I got my eyes on you『 KuroKen 』

I got my eyes on you.

Haikyuu! NO me pertenece.

"Creo que estoy enamorado de ti" Kenma recuerda exactamente la primera vez que escucho esas palabras.

Fue unas noches antes de que Kuroo se fuera a la universidad. Ambos estaban en la habitación del más pequeño, hablando de diversas cosas. Como del equipo y los exámenes finales, sobre la universidad y también de videojuegos.

Eran cerca de las 12 A.M cuando el azabache decidió que sería buena idea regresar a su casa, aunque tenía planeado regresar más temprano, se entretuvo un muy buen rato platicando con Kenma, la verdad es que desde hace mucho no pasaban tiempo así que las horas pasaron volando. Por eso en un ataque de sinceridad, viendo a su mejor amigo de la infancia recostado en la cama a un lado de él jugando con su consola portátil con el ceño levemente fruncido, apretando botones y con la luz azul de la consola pegándole en la cara

Fue en es momento en el que se lo dijo. Así como si hubiera dicho cualquier otra cosa, simplemente se lo dijo, Kuroo pudo notar el ligero cambio de expresión en el rostro de Kenma. Además porque se equivocó y había perdido el juego

Nadie dijo nada más por los próximos minutos, Kenma quería decir algo pero al final no dijo nada, era como si no le saliera voz y de todas formas no tenía palabras que decir, sentía un vacío en el estomago intentando concentrarse del todo en su juego nuevamente. Kuroo sonrió ladinamente mientras se retiraba de la habitación de Kenma sin despedirse

Kenma esa noche no pudo dormir

Se quedó pensando en aquello, en lo que le dijo, y pensando en Kuroo en general.

"Creo que estoy enamorado de ti" Kenma repasó en su cabeza esas palabras una y otra vez.

A la mañana siguiente fue lo mismo.

Desde que se levanto hasta que estaba en clases, Kenma no podía dejar de pensar en Kuroo.

De pronto todo era como si todos los recuerdos y vivencias desde su infancia hasta la noche de ayer se transformarán en imágenes de una película súper8 y se repitieran una y otra vez en su cabeza. Todos esos momentos de amistad que había vivido con Kuroo y también todos aquellos momentos en los que se podría interpretar como algo más que una simple amistad. Todos esos momentos que hacían que el corazón de Kenma inconscientemente latiera más rápido, le hacía sentir nervioso, ansioso, como desde hace algún tiempo no se sentía

Ese mismo día, después de la práctica en el tren del regreso a casa, cuando en vez de estar jugando con su consola portátil o con algunos juegos del móvil, se la pasaba mensajeandose con el, no podía simplemente no extrañar la presencia de su mejor amigo, inclusive cuando lo "molestaba"

Llego la noche y otra vez Kenma no pudo dormir... Aunque al menos esta vez, lo intento.

Los siguientes días fueron casi lo mismo también, y a medida de que veía menos a Kuroo más pensaba en él por las noches. Kenma no sabía a qué se debía eso, realmente ese sentimiento de extrañarlo no lo tenía muy presente antes, hasta ahora

Separados ya habían estado, cuando Kuroo había entrado a la preparatoria y Kenma seguía en la escuela media. Se podría decir que antes podría haberse sentido peor, puesto que para aquel entonces Kenma no era tan "sociable" como se podría decir que lo era ahora.