¿Quien eres tu? [1º Parte] Yaoi SasuNaru [Terminada]

Capitulo 45: "¿Cual es el problema?

Deidara... 

Después de ese día no volví a ver a Itachi, en la mañana apenas desperté me fui mientras el dormía, el fin de semana me paso llamando pero no conteste ninguna de sus llamadas, han pasado 4 días después de ese viernes y no he ido a la escuela. ¿Porque?.... bueno... una... porque me duele un montón la cadera y dos... porque no se que decirle cuando lo mire, la vergüenza se apodero de mi y realmente ya no se que excusa ponerle a mis padres para no ir a la escuela. Abren la puerta de la pieza y entra mi mama

- ¿Como estas hijo? -dice

- Bien... supongo... -digo no muy convencido

Miro el calendario. Estamos a miércoles y es temprano

- ¿Vas a ir a la escuela hoy? ¿O prefieres ir al hospital? -pregunta preocupada

No quiero que me pinchen sin motivos... ¡Odio las agujas!

- Creo que iré al colegio mejor... -me levanto

- ¿Seguro?

- Si... -al menos ya no me duelen tanto las caderas

Me meto a la ducha

- ¡Te preparare el desayuno mientras tanto! -dice mi madre saliendo de la habitación

- ¡Bueno! -le grito mientras me meto bajo del agua

***

Bueno Deidara... tienes tres opciones...

Una... ignóralo.

Dos... inventa una excusa.

Tres... mátate. 

Mierda... por el momento creo que la ultima opción seria lo ideal pero... bien... sera lo que el destino diga. Entro a la sala y mis ojos se cruzan justamente con aquellos que no quería, este me mira sorprendido y yo... bueno... no estoy en estado para decir como estoy. Camino hacia mi asiento y de camino Hidan se cruza al frente mio abrazándome

- ¡Corderitooo has vueltoo! -dice dándome un fuerte apretón

- Hi-dan... me... ahogo... -digo poniéndome rojo

- Oh, lo siento... 

Me suelta y sonríe

- ¿Porque no habías venido al colegio?... y por un momento pensé que era yo el que le daba lo mismo faltar

- Estaba enfermo... -digo desviando la mirada

Se que me esta mirando, su mirada es como si me quemara. Sin poder aguantarlo mas lo miro y estaba en lo cierto... me esta mirando y con el ceño fruncido. Mierda... 

- Ahora explícame... ¿¡Tan difícil es contestar tu puto celular cuando estas enfermo!? -grita dejándome sorprendido

- Y-Yo... 

- ¡No sabia que ahora te pesaba tanto la mano! -dice enojado

- Lo siento... 

- ¡Mierda!... -grita- ¡No sabes lo preocupado que estaba! -dice furioso y se va a su asiento