#3 Me Perteneces

Capítulo 13

  «Mamá siempre me habla de algo valioso que significa tanto en la vida de una mujer: ser madre. Ella desde que yo era muy pequeña me contaba que, por ningún motivo que fuese, debo tener hijos fuera del matrimonio. Evelyne desea que el ciclo se repita por los siglos de los siglos, mi abuela tuvo a mi madre dentro del matrimonio y mi madre me tuvo al estar casada con Charles. Ella desea que así sea conmigo y yo también lo deseo. Desde siempre he soñado tener una buena edad para casarme con el hombre que llegara a amar y que me amara, un hombre que confíe en mí en todo, que fuésemos como mejores amigos, que no me guarde nada y que me fuera fiel hasta la muerte. Así como Charles es con mamá. Y con mi esposo, planear un bebé. Así como yo fui planeada.
—Prométeme que harás bien las cosas, Kate; creo que te sabes bien la vida de tu tía Rosaline y sé que estás de acuerdo en no terminar como ella. —mamá acaricia mi mejilla adolescente, asiento con una sonrisa a lo que ella me acompaña—. Me dolerá mucho dejarte partir a Los Ángeles para que estudies la universidad, sobre todo por lo que...
—Mamá, no es necesario que me recuerdes eso...—me revuelvo incómoda—. No quiero recordar el otro motivo por el cual me voy.
Sonríe, pero en su mirada veo algo triste.
—Lo sé, pero es importante que empieces a aceptarlo...
—¿Sabes qué? —pregunto aunque es obvio que no sabe. Aún no—. No creo tener hijos tan joven como tú, no con éste problema, no podría soportarlo aunque el hombre con quien me casara me amara... No podría lidiar con eso, quiero decir, deseo disfrutar de mi juventud, superarme, tener una pareja formal con varios años de relación... y sin haber rastro de ese problema.
—Entonces debes acabar con ese problema, y dicho lo que acabas de decir, no creo ni necesito preocuparme sobre lo que acabamos de hablar. —me envuelve en sus brazos—. Confío en que harás las cosas bien. Disfruta de tu juventud, enamórate, obtén una pareja estable, y si las cosas se dan, cásate y dame un nieto.
Comienzo a reír.
—Claro, te prometo seguir con el ciclo.
—Sé que no me fallarás. —me besa en la frente y se mece conmigo en brazos como si fuese un bebé.»

Y te he fallado, mamá. He incumplido esa promesa, he arruinado el ciclo, he roto mis sueños. Está claro que no todo está bajo mi control aunque pudo haberlo estado, así como siempre me encargaba de tenerlo. Tal vez nunca debí superar esa parte de mí, si lo hubiese conservado seguramente no estaría en esta situación. No con un posible embrión en el vientre. Hasta temo ir al médico, sé que de esa manera no lograré desaparecer el problema, pero al menos no estaré más atormentada. Joder, debí por lo menos haberle obligado a usar preservativo. Me confié, no, mejor dicho, le confié a Michael mi futuro. Puse absolutamente toda mi confianza en esa dichosa inyección anticonceptiva que resultó ser vitaminas. Unas putas vitaminas. Joder, ni siquiera he podido dormir, sé que dentro de una hora sonará mi despertador pero ruego que la hora se haga eterna como la noche que parecía que cada segundo duraba cinco horas para pasar al siguiente. Ahora no sé qué hacer, tengo la cabeza hecha un lío, estoy hecha un flan. Tomo mi teléfono, busco en mi agenda el número de Madisson y, por tercera vez, llamo a su teléfono con la esperanza de que contestase. No lo hace y me manda a buzón.
—Baja del cielo tres minutos y ayúdame a ser fuerte como tú lo eras porque siento que me estoy desmoronando, Madi. Le he fallado a mi madre, las cosas van mal con Michael, creí haber superado mi problema pero con él todo volvió a fluir y ahora... estoy intentando ordenar mis pensamientos. Te necesito.
Cuelgo la llamada con lágrimas en los ojos, necesito sacar toda esta mierda, no puedo guardarlo sólo para mí. ¿Por qué me ha hecho esto? Deduce que estoy embarazada, puedo decir que está seguro de eso, no sólo por los vómitos frecuentes sino porque todo este tiempo lo hemos estado haciendo sin protección. A pesar de eso, tengo la esperanza de que sólo sea una gripe estomacal. ¡Maldición! ¿Quién se ha creído para decidir eso sobre mi? Es mi cuerpo, es mi futuro, no tenía derecho a arruinarme la vida. Ni siquiera nos hemos casado, ni siquiera somos una pareja estable: hay tantos misterios, tantos putos secretos, me miente, discutimos, lo arreglamos y luego damos un paso atrás. Lo amo, y sé que eso debe bastar, pero yo deseaba con todas mis fuerzas cumplir con él los sueños de mi madre y los míos, quería presentárselo como mi novio, después de un par de años, que Michael pidiera mi mano, que nos casáramos, que disfrutáramos nuestra luna de miel y después planear un bebé. Yo quería que eso fuese así, siempre lo he querido, así todo sería más fácil, todos seríamos felices... y ahora todo se ha fastidiado. Michael y yo apenas hemos dado el primer paso después de todo lo que hemos pasado, ni siquiera llevamos un mes siendo novios y ya se ha saltado más de tres pasos. Tengo tanto miedo, aún no estoy lista para ser madre. Necesito saber quién es exactamente el hombre con quien me he involucrado, saber su pasado, sus misterios y todos sus secretos, alejar a todos quienes intentan separarnos, y si Michael lo desea, casarnos —aunque es demasiado pronto—. Y también necesito superar éste problema por segunda vez.