[ Zodiac ; Soñando con Maravillas ]

- Comienzo.

Mientras caía sobre un infinito vacío, no sentí desesperación ni terror. Sentí paz, una paz inexplicable. De esa paz que la gente suele describir cuando su espíritu sale del cuerpo y vuela sin rumbo alguno, libre.

Se tornó todo opaco y mis párpados se cerraron solos al ver un pequeño destello que yacía en el final del vacío.

Desperté lentamente por el fuerte dolor de mi cabeza, sentía que bombeaba la sangre justamente allí, mareada y algo atontada me puse de pie rascándome el párpado cerrado.

Mi vista dejó de ser borrosa, miré instantáneamente al cielo, (Multimedia) 《Esto debe ser un sueño.》 Pensé pegando un suspiro.

Caminé lentamente sin dejar de mirar el extraño y estrellado cielo ... Espera ... ¡Ni siquiera es un cielo normal! Tenía de fondo una galaxia, o algo más ...

Alcé las cejas confundida y abrí mis párpados.

- Esto se ve tan real ...- Murmuré tragando saliva.

- Es real.- Se oyó una voz tras mío.

Pegué un salto mezclado con un escalofrío.

- ¿¡Eh!?- Tras mío no había nadie, acaricié mis desnudos brazos con miedo.- Quiero despertar...- Sollozé como una niña, una niña que extraña su hogar...

- ¿Quién eres?- Volvió aquella voz.

Volteé nuevamente buscando con la mirada de donde quizás pueda estar proveniendo aquella voz.

- ¡Silencio!- Grité atemorizada.

- ¿Silencio?- Frente a mí se presentó un chico de gran altura y tez albina acompañada con unas pecas rosadas salpicadas en sus mejillas. Sus cabellos eran negros y desordenados, lo que más me llamó la atención fueron unos grandes cuernos enrrollados de colores marrones y su iris era de color castaño.

- ...- No contesté, ¿Aquello no era un disfráz? ¿Qué era esto?- Qu-Qué ...- Tartamudeé.

- Oh, no tienes cuernos...- Habló el frunciendo el ceño serio, parecía enojado.- ¿No serás tú un mortal?-

- ... ¿E-Eh?...-

- ... ¿No hablas?- Se cruzó de brazos serio.-

- Si hablo...- Contesté al fin dejando de lado la cobardía.- ¿Qué clase de disfráz es ese?-

El chico comenzó a reírse, ¿Qué le causaba gracia? Lo preguntaba en serio.

- Vale, realmente eres un mortal.- Pasó su mano por mi espalda y me empujó levemente para adelante.- Vamos, camina, te presentaré a los demás, ellos estarán ansiosos de verte, a que si.-

¡Aquí viene una pequeña nota! Cada capítulo por mayor elegirán comentando que prefieren:

■ Ir con él.

■ Negarse y enfrentarle.

¡Ustedes eligen el destino! La opción más votada será para el próximo capítulo.