El Chico de la Cafetería |harry s|

Juegos.

Estábamos en el patio trasero de la universidad, el hablaba y hablaba por su maldito celular y a mi mis estúpidos tacones me mataban. Pero no paraba de caminar hasta encontrar esa casa maldita.
Después de 35 minutos talvez, la encontré. Le hice señas a Haroldo para que dejara su putito celular y lo hizo.
Milagro.

-¿Que? -dijo indiferente, idiota.

-Sube, hay podrás estar en paz -dije señalando las escaleras de la casa del árbol.

-Sube tu primero -dijo viéndome.

<<Mal día para usar vestido>>
Ni me lo digas.

-¿Me crees estúpida? Subes o... me voy-dije

El muy simio se encogió de hombros y volvió a su celular.
Maldito.
Bueno, Haroldo. Los dos podemos jugar este juego, no?.
Cogí mi teléfono y hice que marque un numero. Y tenía la persona perfecta.

-¿Nathan?

Todo salió a la perfección ya que Harry me miro y dijo:

-Hablamos luego, Louis.

Lo ignore y seguí "hablando con Nathan".

-La casa del árbol!, Si la de aquel día, 15 minutos. Con Harry, pero el esta... En su teléfono. Nos vemos, beso. -Y "corte".

Tuve qué reprimir una gran pero gran carcajada al ver la cara súper súper roja de Harry.
Me hice la desinteresada pero, dios mío. Me estaba muriendo de la risa.

-¿Que? -use su mismo tono.

-¿Nathan? -dijo cerrando sus manos en forma de Puño.

-Eh... si -dije normal

-Que, qu.. porque carajo hablabas con el.

-Te importa? es mi... amigo -dije

-¿Amigo? -dijo Harry

-Si.... como mejor amigo -dije haciéndolo enfadar mas

Harry se acercó a mi.

<<Siente pánico ahora>>
Me ayudas mucho.

Yo retrocedí. El se acercaba. Yo retrocedía. El se acercaba.
Y... el árbol me lo impidió. Harry sonrió, trate de correr pero puso sus brazos en ambos lados del árbol y bueno...

Fin del juego.

Sus labios estaban a centímetros de los míos y... Y.. unas malditas ganas de besarlo... agh.

<<No lo hagas>>
¿Que? ahora si ayudas?!

-Dime... porque lo prefieres a el. -susurro Harry haciendo su voz más grave. Santas vacas.

-A.. A-a a quien? -tartamudee

-Nathan. El es, anticuado.

-Nathan, es mi amigo. -repetí con un poco más de cordura

-Entonces puedo hacer esto -dijo

<<Oh no>>
¡¿Qué va a hacer?!
<<No quieres saber>>

Esa distancia desapareció. De un momento a otro. Puff! adiós distancia.
Esos labios rosas, pequeños estaban encima de los míos.
Un simio chimpancé idiota imbécil... pero muy buen besador. Un maldito buen besador.

Si, Harry Styles me estaba besando.