23. Recuerdo (XXI).

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14 de junio, 2014.

Apartamento de Lia.

Era un sábado normal y no planeaba salir; me encontraba a mis anchas en el apartamento y era cómodo estar así. Estaba recostada en el sofá que tenía, hablando con Jimin a través de mensajes de texto. Casi no nos habíamos visto desde que salimos del instituto, puesto que el último día no fue él quien me acompañó a casa. Fue Taehyung. Él y yo estábamos más cercanos que nunca; casi todos los días desde el comienzo de las vacaciones habíamos hablado por teléfono o salido a recorrer las calles de la ciudad. Charlas sin sentido, frases memorables, momentos dulces y demasiadas carcajadas había vivido estos días, como si encontrarse con la mirada de uno fuera gas de la risa para el otro. Y era increíble.

Mis sentimientos por V crecían demasiado rápido y eso en el fondo me aterraba.

Aunque estuviera libre... Sentía que aún había algo que impedía dar un siguiente paso, pero no podía comprender del todo esa corazonada que afligía de vez en cuando mi pecho.

Una llamada entraba a mi celular, me centré en el nombre de quien llamaba y descolgué.

¿Heidi?

– La misma, Lia.

– ¿Cómo has estado, boba?

Mira iré al grano. Papás te han enviado un paquete.

– ¿Ah? ¿Pero por... – Me vi interrumpida por el sonido de la puerta siendo golpeada suavemente.

– Debe ser lo que enviaron. Anda, ve y abre. – Yo ya me dirigía a la puerta cuando me dijo eso.

– Eso haré pero no te voy a colgar y no abriré eso hasta que me digas que... – Me quedé totalmente muda al abrir y ver quién llamaba a mi puerta.

– Sorpresa, boba. – Habló Heidi, quien al igual que yo seguía con el teléfono pegado al oído. Realmente no me esperaba que la chica de cabello negro y ojos verdes que tanto quería estuviera parada a centímetros de mí.

– Hey... te entrarán moscas. – Yo aún seguía con la boca abierta pues no me creía que ella estuviera aquí. Con su mano alzó mi barbilla juntando mi boca para sellarla. El sonido de mis dientes al chocar hizo que ella soltara una risita divertida. Ahí fue cuando me lancé a darle un fuerte abrazo que por supuesto correspondió.

– Te extrañé mucho Heidi.

– Yo también, boba. – Reímos y le dije que pasara lo cual acató. Se sentó en el sofá y examinó el lugar. – Es lindo, me gusta.

– A mí también, aparte e ambiente es muy bueno. – Sonreí. – Pero bueno, dime, ¿Cómo fue que llegaste aquí?

– Pues fui al aeropuerto, me subí al avión, llegué, tomé un taxi y heme aquí. – Su cara se mostraba inocente, yo le dediqué una mirada sarcástica.

– ¡No! ¿En serio? – Asintió con la cabeza ante mi pregunta, nos miramos y empezamos a reír. Ya extrañaba los momentos así con ella.

– Bueno ya, te diré bien. – Acomodó su cabeza sobre el respaldo y empezó. – Mamá y papá querían saber cómo estabas, si el lugar donde te habían instalado era bueno y bla bla preocupaciones de padres cuando tienen a una hija estudiando lejos. – Me reí bajito por las expresiones de Heidi. – Íbamos a venir todos juntos pero ya vez cómo es el trabajo de mamá ahora y pues a papá le surgió un problema también en su trabajo. Como ya habíamos reservado los boletos les pedí que pudiera venir y después de insistir mucho aceptaron, pero dijeron llamarían seguido así que no deben de tardar en hablarle a alguna de las dos. – Finalizó esbozando una leve sonrisa.

Old Days, memories» Taehyung BTS [김태형] 🔖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora