Manos cálidas (KagexYama)

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Kageyama observaba su celular, no había hablado con Yamaguchi desde hacía mucho, no sabía que decir, no sabía que debía preguntar, no sabía si era bueno hablar...la conversación con Hitoka le daba vueltas, sabía que era un cobarde... ¿Pero qué podía hacer? Esta era la primera vez que le gustaba alguien, era un sentimiento nuevo que no sabía manejar...no tenía ni idea como acercarse a una persona...menos sabría como conquistarlo.

La puerta de la habitación del rey fue golpeada suavemente, ya le había dicho a su madre que no quería cenar, pero aun así ella seguía insistiendo...Kageyama estaba en su momento depresivo así que no quería levantarse para abrir, le gritó para que pasara.

Las madres tienen algo llamado "Instinto maternal", así que se giró para que ella no pudiera ver su rostro. La puerta se cerró, no quería ser cruel con su madre así que espero a que ella hablara...después de todo era su madre...

-Si te sucedía algo ¿No?

Sus ojos se abrieron, su cuerpo se giró inconscientemente...allí estaba, esa dulce voz era inconfundible, Yamaguchi estaba sentado al lado de su cama... ¿Qué clase de fantasía cruel era esta?

-¿Qué haces aquí?-se sentó al borde de la cama

-Tu madre me dejo pasar...-dijo apenado-...sabia que me estabas escondiendo algo

-No es nada-desvió la mirada

-Oye...-suspiro agotado-...deberías ser más sincero, te quejas que Tsukki tiene un mal carácter, pero te guardas las cosas...eso es incluso peor Kageyama

-No menciones a ese idiota ahora...-resopló molesto al recordar lo que había pasado la otra vez

-Tomare la responsabilidad de escucharte...así como tú lo hiciste conmigo-se cruzó de brazos-...y no me iré hasta que lo escupas

El rey observaba aquellos ojos llenos de determinación...era cierto, la dulce voz de Yamaguchi podía controlar todo su ser... ¿Qué ironía? su pecho se retorció de dolor, pensaba en las palabras que podría decir, pero cada una quemaba su corazón... ¿Estaba a punto de morir?

-También tengo un amor no correspondido...-fue lo único que pudo decir, no quería escuchar la respuesta de Yamaguchi, había entrado en un estado de pánico...

-Eso...-Yamaguchi suspiró aliviado-...por un momento pensé que me odiabas o algo por el estilo, pero ahora comprendo todo...

-¿Lo comprendes?- el rey apenas podía articular las palabras, su voz estaba a punto de quebrarse

-Si...lo comprendo...el que me dejaras de hablar y el que me ocultaras sobre tus calificaciones-sonrió

-¿Lo sabes?

-Me enteré por el capitán...nuestra relación se volvió algo confusa, así que entiendo que dejaras de hacer aquellas cosas, para mantener a la persona que quieres...-Kageyama lo observó sin comprender-...digo, yo ya no estoy triste, a ti te gusta alguien...así que ya no hay motivos para el premio...si me lo hubieras dicho, no te lo habría ofrecido Kageyama

El corazón del rey se quebró... ¿Había sido rechazado?...no estaba seguro pero todo aquello que dijo el pecoso lastimó cada parte de su interior, sentía que estaba a punto de llorar, ¿Pero porque lloraría?...el no lo sabía, quería hacerlo y ya...

Levantó su mano para arreglar su flequillo y disimilar aquel rostro, pero su mano fue jalada por Yamaguchi con tanta fuerza que logró bajarlo de la cama, su rostro fue tomado por aquellas cálidas manos que tanto amaba...y fue besado... ¿Qué estaba sucediendo?

-¿Yamaguchi?...

-Justo ahora...-el pecoso se alejó nervioso-...estabas a punto de llorar ¿No?, no quería verte triste...lo lamento, lo lamento...no debí hacerlo

-No...-Kageyama sonrió nervioso-...de alguna manera me siento mejor...

-Ya te dije que puedes contar conmigo para lo que sea-refunfuño molesto

-¿Puedo obtener mi premio ahora?-el rey se acercó

-¿Ahora?

Sin esperar una respuesta, Kageyama deslizó sus brazos por la cintura del pecoso y lo atrajo hasta él, acercó su rostro y lo besó...con pequeños movimientos, abrió la boca de Yamaguchi y metió su lengua...todo estaba tan caliente y mojado en su interior. El pecoso nervioso por la situación intento calmar al rey quien lo besaba apasionadamente, pero fue imposible...solo se dejo llevar, con sus manos se aferró a los brazos de Kageyama...

Sus cuerpos estaban tan juntos que el rey podía sentir como el pecho agitado del pecoso se expandía para respirar...era mucho mejor que en su imaginación, pero ahora esta era la realidad, la cruel realidad. Separó sus labios y antes de encontrarse con la mirada de Yamaguchi...lo abrazó.

-Lo lamento...me deje llevar-habló bajo

-Si es Kageyama está bien...pero, ¿Qué pasara con la persona que te gusta?

-Te lo dije ¿No?...es un amor no correspondido...ahora supongo, que estoy sufriendo lo mismo que tu

-Es doloroso...-lo abrazó con fuerzas-...pero aquí estaré

-¿Podrías consolarme?

Kageyama volvió a perder el control de sus acciones y lo volvió a besar...de la misma manera apasionada, como si los labios del pecoso le robaran cada parte de su alma. Se fue inclinando de a poco encima de Yamaguchi, hasta que logró quedar arriba, el calor de sus cuerpos, la respiración...era capaz de sentir todo eso y mucho más.

Las manos del pecoso se habían aferrado a la espalda del rey, las cosas no estaban marchando bien, pero ninguno de los estaba en completo uso de sus sentidos. Kageyama soltó la cadera del pecoso que había estado afirmando y coló sus manos por debajo de la playera...sus oblicuos, su ombligo, su cintura, su pecho...hasta llegar a sus pezones, eran tan suaves como sus labios...pero para eso debía comprobarlo.

Levantó la playera, se separó de los labios del pecoso para poder besar aquellos pezones que tanto deseaba...definitivamente Kageyama sentía que estaba en alguna de sus sucias fantasías.

Se descubrió su torso y volvió a besar aquellos labios el roce de la piel desnuda de sus torsos era caliente, pensó que terminaría fundiéndose si seguían en contacto. El rostro de Yamaguchi estaba completamente rojo, "Tan adorable"...sin ningún tipo de timidez Kageyama tocó la entrepierna del pecoso...

-¡No toques ahí!..-el pecoso entró en pánico, pero Kageyama ya había tocado para darse cuenta

-¿Estas duro?

-¡Lo sientoooo!-se cubrió la cara-...soy un adolescente con las hormonas descarriladas...

-Yamaguchi-acercó su cadera y la frotó con la erección del pecoso-...no tienes de que preocuparte...

-¡Tu también!...-aún con la cara cubierta Kageyama sabía que estaba nervioso-... ¿Deberíamos continuar?

-Sobre eso...-quitó las manos de su rostro y lo besó-...deberíamos...me haré responsable de controlar nuestras hormonas

-¿E-estás seguro?...Ahh...no...espera...mng...-intento separarse de aquellos labios que lo aprisionaban, pero la mano que acariciaba su entre pierna le estaba dando más problemas-...digo...ahh...

-¿Qué dices?-lamió el lóbulo de su oreja

-Tu...ahh...tu eres virgen Kageyama... ¿N-no quieres hacer esto con la persona que te gusta?...ahh...¡No ...no muevas tu mano tan rápido!

-Dijiste que me consolarías...así que sí quiero... ¿Algún problema con eso?-comenzó a quitar su pantalón

-Mngh...ah...aunque te digiera que te detuvieras, tú no lo haras ¿Cierto?-sonrió nervioso

-Soy un rey tirano después de todo-se mordió el labio al ver el cuerpo desnudo del pecoso-... ¿Qué hay de ti?

-Yo...c-creo que no deberíamos estar haciendo esto... ¡Deja de mirar!-junto sus piernas-...supongo que si es Kageyama está bien...

-Dices eso, pero aquí estas...desnudo abajo de mí...-sonrió-...entonces...continuemos

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Nota:
¡Kageyama modo seme: ONNN!