La Historia De Ladybug Y Chat Noir (según Emma Agreste) [PAUSADA]

Sólo es un proyecto

Retomando: 

-¿A dónde habrán ido Ladybug y Chat Noir?...me hubiera encantado conocerlos-
Y durmió profundamente.

Día de escuela. 

La chica se despertó con muy pocas ganas y lentitud, sólo duró un par de segundo esas actitud cuando volteó a ver el reloj.

-¿¡Las 9:00 am!? ¡Las clases ya empezaron!- su cara estaba totalmente pálida, tomó su ropa, se vistió como siempre lo hace, y salió de su habitación hasta la cocina. 

-¿De nuevo tarde?- dijo la madre con una risa ligera al darle un pan a la menor.

-Lo lamento, no sonó la alarma del despertador- rascó su nuca algo nerviosa, siempre le inventaba escusas a Marinette ya que siempre contaba su vida de adolescente, como ella lo era en ese momento.

-Será mejor que te apresures. No quiero volver a ver otra queja de tu profesor- advirtió.

-S-Si- exclamó para después abrir la puerta y marcharse.
En la mente de la chica decía >>gracias<< por evitar las historias o un diálogo de su madre extremadamente largo.

Llegó a la escuela sin problemas, entró sin que nadie la viera y con mucho sigilo se sentó a lado de una chica rubia.

-Hola- susurró su compañera de a lado.

-Hola...- un tono de voz diminuto se escuchó de la azabache.

-¿Por qué tan tarde?- divertida la observó de reojo.

-Estuve tooooda la noche preguntándome cosas infinitas del universo- bromeaba, no quería hablar sobre su obsesión a cerca de Ladybug y Chat Noir.

Su compañera rió a causa de su excusa -¿En serio, no se te ocurrió otra cosa?-

-Charlotte, ¿te parece el buen momento de inventar algo de la nada para después explicarlo?- con un enorme suspiro y cansancio le mencionó a esta, la cual se sonrojó un poco.

-N-No...- calló y dedicó su mejor atención a la clase. 

-Mejor...- bajó la voz al sonreír.

-Así que, ¿a quién le fascinaría la idea de crear su propia novela de amor?- alcanzó a escuchar las palabras provenientes de su profesora.

"¿Qué había dicho durante toda la clase? ¡No puse atención!" alarmada, confundida, y más sentimientos se desataron sobre ella. 

-¿Ch-Charlotte?- tocó el hombro de su amiga, que posteriormente la otra respondió con una cara de sorpresa y nerviosismo.

-¡¿Eh?! ¿Q-Qué pasa, E-Emma?- 

Al parecer, la azabache igual no entendió la reacción de la rubia claro -Eh...¿sabes qué explicó la maestra?- 

-A-Ah...esto...si-si. Tenemos que hacer al parecer una tipo novela de amor. Ya sabes, por lo del día de San Valentin- desviaba la mirada, hasta que observó la felicidad de Emma.

-¡¿En serio?! ¡¿De cualquier pareja?!- sus ojos brillaban, literalmente. Una sonrisa se mostraba de mejilla en mejilla, sus pómulos color carmesí. Una hermosa imagen de una chica Agreste. 

-¿Supongo...?- al terminar esa frase, un grito salió de la ojos color esmeralda. 

-¡Genial! ¡Finalmente escribiré una novela ligera de Ladybug y Chat Noir!- 

-¿La-ladybug?- levantó una ceja y frunció la otra -Pensé que ella y su compañero habían desaparecido de las calles de París- 

-¿Verdad? Es lo que todos creen. Lo único que olvidan es que no solo eran héroes en sus vidas, también tenían una identidad secreta- chasqueó los dedos -Lo que significa que siguen aquí, la pregunta es...¿quienes son? ¿volverán a ser los guardianes de Francia?- 

-Son preguntas que siguen indecisas...- 

-¡Si! Por eso me intriga, y emociona- rió un poco. 

-La verdad, es que si intriga un poco- esbozó una sonrisa amable.

-Mucho- devolvió la misma actitud.

-Nos vemos la próxima clase, no olviden el reporte.- Avisó por ultima vez la mayor. 

-Oh por supuesto que no lo olvidare- guiñó el ojo en dirección a la observación de la celeste que se sonrojó a causa de la acción. Rió al sentir su color de mejillas aumentar. 

-Me tengo que ir Charlotte, nos vemos luego- se despidió tomando sus cosas y saliendo del salón. 

-Nos vemos-

***

-Quizás todo sea mejor si me inspiro un poco...con todas las historias que me han contado mis padres, tan magnificas, como si ellos mismos se transportaran a los personajes, quiero hacer eso.- decía al caminar hasta su hogar, cargando una mochila pequeña azul común. 

A simple vista, era muy obvio que se trataba de una chica normal, tratando de analizar y acomodar sus ideas. Caminar no tiene nada de distinto, pero...¿encontrar a una persona en peligro es algo que pasa diario? 

-¡¿Qué esperas?! Entrega todo lo que tienes- palabras de un delincuente enmascarado. 

-Ya dije que no tengo nada que entregar- con la cabeza abajo dijo un hombre de tercera edad. 

-¡Me cansé!- levantó con rapidez la mano con el fin de golpear a...¿la azabache?

Así es, ella se interpuso en aquel golpe, terminando un tanto herida. ¿Quien lo creería? Al parecer no era tan normal la esmeralda. 

-No dejaré que hagas eso- advirtió la pequeña al sobar delicadamente su mejilla roja. 

-¿O qué? ¿Una niña me va a detener?- con un tono burlón se dirigió a su locutora. 

-Haré lo que pueda- sonrió motivada, aunque para ser sincera, le dolía todo. Prefería no pelear y atrás sostuvo su teléfono, el cual llamó a las autoridades policiales que llegaron con eficacia y rapidez.

-¿Estas bien, pequeña?- preguntó la anterior victima. 

-Estoy perrrfectamente, no se preocupe- una risa se mostró, concluyendo con la idea de que realmente se encontraba bien. 

-Que alivio, muchas gracias- curvó los labios en forma tranquila, y sin que se diera cuenta, insertó en su mochila un diminuto cofre negro con una linea verde. 

-No fue nada. Tenga más cuidado, ¿de acuerdo?- 

-Lo tendré. Gracias- y se retiró. 

 Fin del capitulo :3

Nos vemos la próxima semana UwU 

Bye bye, maripositas. 

Ah, pero antes...tengo que dejar en claro que este fanfic no va tener el punto principal de el shipp Emma x Charlotte...en otras palabras...si va a ver momentos pero la idea original es la versión de como veía Emma a sus ídolos, y como se convertiría en el próximo.