El mayor misterio del océano (BillDip) #BillDip Awards

Capítulo III: Sin sentido.

Hola a todos!!!

Bueno, perdonen la tardanza, pero he tenido mucho trabajo y ahorita ya tengo sueño pero dije: Hoy subo capítulo, y pues aquí está XD

Este capítulo, como dije, va dedicado a @Rebechita10, espero te guste.

Si les gusta este capítulo, por favor voten y comenten, que eso me alienta a seguir actualizando =).

Por cierto, lo que dije antes sigue aplicando: si nominan alguno de mis fanfics, ése fanfic será el que actualizaré y además será dedicado a la persona que me nominó.

Bueno, sin más, los dejo con este capítulo.

Ya saben, Gravity Falls NO me pertenece.

Capítulo III: Sin sentido.

Dipper comenzó a asustarse y sentir asco de que aquél sujeto siquiera le sujetara la muñeca, hasta que algo en su mente le hizo recordar algo: su espada. Con su mano libre la desenfundó y se la enterró al sujeto en la mano, el cual chilló de dolor, lo soltó y se tomó la muñeca soltando montón de improperios.

-¡HIJO DE...! -Pero Dipper no le dio tiempo de contestar, tomó el mango de la espada con ambas manos para soltarle un golpe al hombre en los hombros, lastimándolo y haciéndolo sangrar. El sujeto cayó al piso quejándose y maldiciendo a Dipper. El castaño apenas lo vio en el piso salió corriendo directo al barco esperando que nadie lo siguiera.

Para su suerte, fue así. El joven logró llegar a su barco y se subió rápidamente llegando hasta su camarote con la respiración agitada por la carrera. Cerró su puerta con llave, encerrándose y lanzando la espada a un lado.

Su corazón latía rápidamente más por el susto que por la corrida. Recargó una mano en la pared tomando aire agitadamente. Pasaron unos minutos hasta que logró estabilizarse. No saldría de ese barco durante dos días (probablemente ni de su camarote). Estaba realmente asustado.

El hambre se le fue a Dipper, se dedicó a esperar a su tío que llegó muy noche para cenar. El hombre tampoco había comido nada en el día. Ambos estaban en la cocina preparando algo de avena. Dipper sacaba algunos platos y Ford calentaba el agua.

-¿Y qué tal te fue, Dipper? -Preguntó Ford en un tono casual, para hacer conversación simplemente.

-Emm... -Dipper no sabía si decirle a Ford acerca del cochino que se le acercó, optó por hablar, por lo menos para dejarlo quedarse en el barco. -bueno...

-Por cierto, escuché que un hombre fue apuñalado hoy en la plaza. Según dice él fue una mujer fácil que le quería robar. -Dipper se puso rojo y enfureció. -Juró venganza, pues por lo que veo, su mano puede estar infectada por la apuñalada que recibió y hasta se la pueden amputar.

-Eso le pasa a los degenerados asquerosos. -Dijo Dipper en un tono tan enfurecido, que Ford no lo pasó por alto y volteó hacia el castaño, iba a hablar pero el menor se adelantó encarando a Ford. -Además, yo no soy ninguna puta.

El hombre abrió los ojos sorprendido, ¿Así que fue Dipper quien lo apuñaló?

-¿Qué pasó? -Preguntó Ford tratando de sonar tranquilo pero su rosto mostraba preocupación. Dipper le contó todo y el rostro del hombre mayor se iba ensombreciendo, nadie tocaría a su sobrino. Cuando el castaño terminó su relato, Ford se tomó unos segundos para respirar, contar hasta diez y tranquilizarse. Cuando se sintió menos enojado (sólo un poco), suspiró y sacó un arma de fuego de su saco, extendiéndosela a Dipper. -Toma esto. Tu espada no será suficiente, además que aún no sabes manejarla bien. Prefiero que uno de ésos muera a que te pase algo. Úsala si lo crees necesario.