Capitulo 4: ¡ESTAMOS DENTRO!

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CONNOR.
Estaba viendo televisión cuando Brandon llamó.

-Tío, estoy en tu casa en 5.

-No tío juntémonos en otro lado. Mis padres están en casa y no quieren un desorden.

-Vale ¿En el biombo a las tres?

-Te veo ahí.

El biombo era una zona que solo Brandon y yo conocíamos. Pasábamos ahí la mayoría de el tiempo cuando no teníamos nada más que hacer. Agarre una chaqueta y salí inmediatamente. El biombo quedaba a unos 20 minutos de casa por lo que podía ir caminando. Una vez llegue me senté en un escalón que daba vista a la ciudad.

-Tío.-Dijo Brandon tocándome los hombros.

Había una sonrisa de oreja a oreja en su rostro.

-Espero que tengas tus maletas listas.

-¿A qué te refieres?

-Estamos dentro tío ¡Estamos dentro!-Dijo saltando.

-¡¿Qué?! ¡¿Estamos dentro?! No jodas.-Dije levantándome.

-¡Si tío! Mira.-Brandon me pasó la carta.

-"Sr. Collins y Sr. Torres".-Leí.-"Nos enorgullece decir que han sido aceptados para el programa de becas.-Me salté algunas líneas.-"Partirán de España el día 4 de septiembre. Atte. Oficinas Cooper."

-¡Tío!-Dijo Brandon.

-Espera, no dice dónde vamos.

-Claro que si, mira.-Me señaló una línea en la carta.-"Han calificado para entrar en NYU.." ¡Vamos a Nueva York!

-No me jodas, hace un frío terrible allá.

-¿Me vas a decir que acá hace calor?-Dijo

-No, pero no lo sé, ¿Qué pasa si no hay chicas con las que podamos pasar las noches?

-Connor, tío. En cada parte de el mundo, hay chicas solitarias que lo único que quieren es pasar una noche alocada con un extraño.-Dijo Brandon abrazándome.-Eso les sube la adrenalina, y se sienten vivas. Te aseguro que en Nueva York hay montones de chicas.

-Joder, ya me lo imagino.

-Tranquilo, el 5 ya estaremos allá.

-Un momento, el 5, eso es mañana, eso significa....-Dije

-Viajamos hoy.

-¡Tío! ¿Y me vienes a decir ahora?

-Por eso dije que ojalá tuvieras las maletas listas.

-Tío, mis padres no saben.

-¿Tú crees que tu padre no sabe cuando fuimos a SU edificio a tomar la reunión? Además yo sé lo recordé.

-Debo ir a casa a hacer la maleta.

-¡Aquí tenemos un carro! Venga vamos.-Dijo Brandon dirigiéndose a su coche.

Subimos al coche. Brandon no dejó de hablar sobre todas las cosas que podríamos hacer una vez estuviéramos allá. Yo no dejaba de pensar en que iba a estudiar. Habían muchas cosas que quería estudiar. Música, negocios, habían tantas cosas que quería ya que nunca pensé que llegaría el momento. Siempre pensé que trabajaría en esa ferretería hasta ser un viejo. Nunca pensé que tendría la oportunidad de poder ir a una universidad. Y no cualquier universidad, una universidad en Nueva York.

Llegamos a mi casa y bajamos de el coche. Subí inmediatamente a mi habitación. Abrí el armario y saque una maleta. Coloque la mayoría de la ropa dentro, saque pantalones, camisas y zapatillas. Cerré la puerta y escuche una caja caer. Abrí el armario nuevamente y era la caja de Anna la que se había caído. Las fotos estaban esparcidas por todo el suelo de mi habitación. Entre las fotos habían recuerdos, estaba la piedra, habían cartas. Había olvidado que esa caja existía, pero nunca me olvide de Anna. Comencé a recoger las fotos y las observe. Cada una de ellas guardaba un recuerdo. No recordaba lo bien que se sentía al ver la sonrisa de Anna. Era imposible no sonreír. Había guardado casi todo, hasta que me encontré con esa foto. Era una foto que Sofi nos tomó sin que nos diéramos cuenta. Fue ese mes, en la cabaña. Era yo abrazando a Anna y besándole la mejilla, mientras ella sonreía con los ojos cerrados. Era como si cada vez que le veía me iluminaba por dentro.
Joder Anna como te extraño, te hice sufrir mucho y no te di la razón de por qué. Espero que no me odies, espero que me recuerdes como el chico que te ama, como el chico que volvías loco.

-¿Connor? ¿Por qué tardas tanto?-Escuche a Brandon.

-Ya voy tío.-Dije

¿Y si llevaba la caja? No necesitaba tanta ropa. Abrí la maleta nuevamente e hice un espacio para la caja. Habían muchas cosas en esta caja que no quería perder. No quería arriesgarme a que mi madre la botara pensando que ya no vale nada. Cerré la maleta pero no guarde la foto. La foto, la mire una vez más y la guarde en mi bolsillo.
Bajé la escalera con mi maleta, abajo, mis padres me esperaban junto con Brandon. Mi padre me abrazó, luego mi madre beso mi mejilla. Ambos nos desearon buena suerte. Salimos de casa y subimos al coche. No era el coche de Brandon, sino, era el coche de la empresa de las becas. Colocamos las maletas en la zona trasera de el coche. Me despedí por una última vez de mis padres. Brandon me dio un leve golpe en la espalda antes de subir. Subí al coche y nos dirigimos a el aeropuerto.
Una vez llegamos, sacamos las maletas. Los que manejaban el coche nos dieron los boletos de avión. Entramos a el aeropuerto y nos dirigimos a ver los vuelos. Yo ya había estado aquí, aquí parado buscando un vuelo. Brandon encontró el vuelo y caminamos hacia la puerta. Ahora caminaba, pero había corrido antes, recuerdo que habían momentos que me quedaba sin aire de tanto correr. Llegamos a la puerta y nos sentamos en unos asientos. Me levante y me dirige a la ventana. La misma ventana en la cual llore hace un año, la misma ventana en la que vi como Anna se alejaba de mí para siempre. ¿Qué hubiera pasado si hubiera llegado antes? ¿Me hubiera perdonando? ¿Se hubiera ido igual? Supongo que nunca lo sabré.

-Pasajeros de el vuelo 0106, por favor presentarse a la puerta ya que comenzaremos a embarcar.-Dijo la azafata.

Brandon se levantó y agarro las maletas. Se acercó a mí y me pasó la mía. Nos dirigimos a la fila para embarcar. Una vez estábamos entrando al avión, nos sentamos en nuestros respectivos asientos.

-Bienvenidos al vuelo 0106, con destino a Nueva York, les pedimos que abrochen su cinturón ya que comenzaremos en breve nuestro despegue.

El avión comenzó a moverse. Una vez estábamos en el aire, mire por mi ventana. Mire como me alejaba de España, mire como cada zona que me parecía inmensa, se hacía pequeña en solo segundos.

-Siguiente destino ¡Nueva York!-Dijo Brandon golpeando mi brazo.

The Arrival.Onde histórias criam vida. Descubra agora