Culpable

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Desperté algo aturdida, abrí lentamente mis ojos  lo primero que percibí y reconocí fue que me encontraba en una habitación de  hospital, y lo segundo es que me encontraba esposada a la cama, una señora  de contextura mediana y de tes morena  se acercó hasta mi, tomo una silla y se sentó a mi lado

— ¿ Como se encuentra?

— ¿ Como me ve?

— Muy tranquila pera haber echo lo que le confesó al oficial Ronald, soy la detective Lucía Murray

— Por una parte me tranquiliza

— ¿Es cierto Melisa?

— ¿Qué asesine a mi esposo?

— Lo hizo

— Si

Sabía cómo era todo este asunto, respire profundo y traté de mantener la calma

— Lo dice, como si....

— ¿Como si lo que  hubiera echo, estuviese bien?

— ¿Lo esta?

— usted no lo conoció, no sabe todo lo que fue capas de hacerme sin ningún tipo de remordimientos

Su mirada era inquisitiva,  observaba cada gesto en mí, para ella y  a los ojos de todos, soy una asesina

— No parece arrepentida de lo que hizo

— ¿Por que he de estarlo?

— ¡Por Dios! Acaba de  confesar que asesinó  a su esposo, ¿Qué otra cosa necesita?

— Que alguien me crea, eso necesitó

— Quiero hacerlo

— Revise todas las cintas  de grabación que tengo en la mochila, y se dará cuenta de la verdad

— ¿Y cual es según usted Melisa?

— Soy la víctima en esa historia

— Quiero creerle

— Debería

— Dígame ¿Dónde esta el cadáver de su esposo?

— Usted dígame  primero ¿Como esta mi bebé?

— Esta muy bien, según el doctor Ferrer, es una niña fuerte

— ¿Es niña? Una niña

No pude evitar que las lágrimas corrieran por mis mejillas, mi hermosa hija, mi pequeña valiente

— Le haré,  unas  preguntas y esta es  muy personal, ¿el padre de su hija era su  esposo?

— Si, por desgracia era el padre de mis dos hijos

— ¿Dos?

— El mato a mi primer  hijo

Más lágrimas salían sin control de mis ojos, mi pobre pequeño, al cual también me arrebató

—  Lo que dice,  es una acusación muy grave

— El lo hizo

Sentencie con firmeza, secando mis lágrimas

— ¿ Donde esta el supuesto cadáver de su esposo?

— No es supuesto, esta en  la mansión Lion Park, detrás de la casa ay un acantilado su cuerpo está  abajo en las rocas

Llamó rápidamente al oficial que me encontró en la carretera,  Lucía le dio la dirección de la mansión mientras que yo acariciaba la muñeca que tenía esposada

— ¿Puede quitarla?, no iré a ningún lado

—Sólo con una condición

— ¿Cuál?

— Que me cuente desde el principio, quiero saberlo todo Melisa, si quiere que le crea necesito saberlo todo

— ¿Tiene tiempo suficiente?

— Toda la vida, si es necesario

— Estoy hambrienta,¿ podría conseguirme algo de comer ?

—Una petición inusual para una paciente inusual, le conseguiré lo que pide, siempre y cuando comience

—  Todos  era diferente, pensé que era un gran hombre, pero todo cambio de un momento a otra, se convirtió en un ser horrible, despreciable que sólo hacia lo que le placia sin remordimientos, sin miedo, él  conseguía todo lo q se proponía, y desgraciadamente yo fui su objetivo  principal, todo empezó cuando.....

Gracias x leer besos electrónicos

!Nunca Mas¡ PausadaWhere stories live. Discover now