Sizes

6 2 1
                                    

Tú, sí, tú, escúchame, hazme caso, eres perfecta, toda tú, sin quitar ni añadirte nada, no lo necesitas.

¿Acaso no lo ves en el brillo de tus ojos al verle aparecer? ¿O en los hoyuelos que acompañan a tu preciosa sonrisa? ¿Y qué me dices de esas pecas que adornan tus mejillas sonrosadas? ¿Eso no es ser perfecta? ¿Entonces qué lo es? ¿Ser una niña sin personalidad ni autoestima? ¿Ser un saco de huesos de la talla 34? ¿Eso es ser perfecta? Pues permíteme decirte que no.

Tú eres perfecta, con tus fallos, tus defectos, tus aciertos y tus virtudes. No hagas caso a esos gilipollas que te digan lo contrario, que no te vean hundida aunque luego llores sola y te sientas al borde del precipicio y a punto de saltar. Porque si eres lo suficientemente fuerte como para esbozar una de tus brillantes sonrisas y fingir que todo va bien, eres lo suficientemente fuerte para parar un golpe más.

Así que corre, levántate, tira toda esa gran montaña de complejos por la ventana y ponte frente al espejo, maquíllate como te guste; azul, rosa, morado, negro... Como tú quieras. Después corre al armario y coge la ropa que más te guste, no importa si es la camiseta de un pijama de Winnie The Pooh con una falda ajustada, da igual si es un top corto con un maillot de baile... Lo que sea, y póntelo, todo, siéntete feliz, preciosa, guapa, increíble, única. ¿Y sabes por qué?

Porque lo eres, porque tú estás diciendo qué es la belleza y no la sociedad, no permitas que te cuelen esa mentira otra vez más.

Que si ellos quieren vivir bajo el "¿Qué dirán?" o el "¿Pensará que estoy bien así?" es su problema, pero tú no. Tú ya has vivido así demasiado tiempo y ha llegado la hora de ser libre, de ser tú misma y de demostrar cómo eres realmente.

De modo que ¡HAZLO!, disfruta, vive y si te sientes caer, yo seré la cuerda que te sujete y si esa cuerda se rompe, no tengas miedo, pues volaremos.

El Tercer RostroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora