Parte 5.

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Bajó la guardia por completo.

No le importaba el daño que pudiera llegar a hacerle, solo sabía que quería estar con él, solo sabía que por muchos problemas que hubiera entre ellos no se alejaría de él, aunque solo fueran amigos. Le importaba. Le importaba mucho y al parecer nadie se daba cuenta de lo que ella estaba empezando a sentir, él se convirtió en lo mejor que le había pasado desde hacía mucho tiempo.

Cosa impensable para mucha gente por que él no era nada especial desde el punto de vista de muchas personas, pero para ella era lo más especial que tenía.

Desde que confesó sus sentimientos no podía dejar de pensar en él, si realmente él seguiría tratándola igual por mucho que supiera que ella sentía algo por él. Se comía la cabeza cada día por miedo a que él la apartase de su lado poco a poco por haberlo confesado, pero eso no pasó.

Pasaron dos, tres meses y ambos seguían igual de unidos que lo estaban antes de su confesión. Las clases se acabaron, se acabó el poder levantarse y decir "hoy voy a verle", se acabó el tener una excusa para sentarse con él o para hablarle por las tardes para ayudarle con las clases.

Y entonces fue cuando se preguntó si ahora que la razón por la que lo había conocido se acabó también haría acabar su relación, pero se dio cuenta que no. Ella quería seguir viéndolo y cualquier excusa era buena para hacerlo, aunque fuera como amigos seguían viéndose y pasando un buen rato, que aunque se hiciese corto, era el mejor momento para recordar cuando volvía a casa.

¿Como se te puede pasar el tiempo tan rápido al lado de una persona que te importa tanto y todo lo contrario cuando no quieres estar al lado de otra persona? Por que estás a gusto.

A su lado ella estaba a gusto, era ella misma, no hacía falta fingir que era otra persona, no hacía falta hacerle ver que era otra. Olvidaba todos sus complejos, lo olvidaba todo, él la hacía olvidar.

Hasta que llegó el momento que ella menos esperaba y que jamás pensó que llegaría. Estaban genial y solo quería un poco más y decidió que si no se arriesgaba en ese momento se arrepentiría y lo hizo, sabiendo que había un tanto por cierto mayor de posibilidades de que él la rechazara que las que había de que lo aceptará. Pero se equivocó, él la correspondió y le devolvió el beso.

¿Increíble? Puede ser.

Pero poco duró.

¿Cómo una persona puede llevarte al cielo y cortarte las alas en tan poco espacio de tiempo? Ella era feliz, no quería nada más de lo que tenía, ni más ni menos, solo quería seguir como estaban durante un tiempo más. Aunque supiera que tendría fin en algún momento.

La rompió completamente, ella estaba ilusionada, emocionada, pensaba que todos los problemas que les interponían se habían ido, esa situación la alegró de una manera increíble y jamás pensó que sería tan feliz.

Pero se ve que no se merecía tal felicidad.

¿Alguna vez habéis pensado que se debe de sentir cuando te cortan las alas?¿cuándo te cortan algo que forma parte de tu cuerpo, que te permite evadirte de la realidad e irte lejos de tus problemas? Duele como si te arrancasen el corazón y en este caso era irónico por que sus alas eran su corazón.

Ella pensó que jamás podría mirarle con los mismos ojos ya que le había enseñado lo poco que le quedaba por ver de ella, se había desnudado completamente ante él, ya no había nada que él no supiera sobre ella. Pensó en la posibilidad de alejarse de él, por que por mucho que le quisiera le estaba haciendo daño y aún así no lo hizo.

No podía. Era imposible para ella alejarse de alguien que la hacía tan feliz.

Pero a la vez le hacía tanto daño.

No dejaba de pensar en él ni un segundo, se seguía preocupando por él una y otra vez y a ratos se sentía estúpida por estar haciéndolo, pero ¿y qué?

Por desgracia y aunque no lo quería aceptar, se había enamorado.

Y como muchas veces le habían dicho: cuando uno se enamora no lo nota y al poco tiempo... Se vuelve idiota.

Te quiero, pero, te odioWhere stories live. Discover now