10 days to fall in love. [Jihan/Lemon]

Día 5.

Tengo migraña incluso antes de despertar, cuando quiero abrir los ojos los parpados me pesan y no puedo hacerlo adecuadamente. Me siento en la cama y examino el lugar... me cuesta un par de minutos recordar donde me encuentro.

Lo último que recuerdo es que Joshua y yo estábamos en Kyung Ri's Food y que me emborrache allí. Todo, inclusive mi llegada a este lugar, esta metido dentro de una oscura mancha en mi cabeza que me impide recordarlo. No volveré a tomar... 

  Voy hasta la cocina sintiendo como si estuviera cargando un roca sobre mi cuello y como si Mingyu me abrazara las piernas, lo que las hace pesadas y difíciles de mover. Allí, dándome la espalda está ese chico que me vuelve loco.

—Buenos días —saludo con una mano en la frente. Necesito detener este dolor de cabeza de alguna manera, ya no lo soporto.

—Buenos días. —¿Es mi imaginación, o está siendo frío conmigo?

—Me duele la cabeza... no debí haber tomado —me siento en la silla junto a la mesa y reposo mi cabeza en esta.

—No, no debiste hacerlo —coincide—. Tampoco debiste haberme mentido.
—¿Te mentí? No lo recuerdo... —frunzo el ceño, la verdad es que no recuerdo nada.

—Me dijiste que aguantabas hasta tres botellas tu solo y a la primera botella ya estabas borracho —sus ojos se posan en mi rostro, pero su mirada no es esa mirada dulce que acostumbro a ver y que me encanta...

—Lo lamento... no creí que tomaríamos tanto, ni que me embriagaría de tal forma —me siento total y completamente avergonzado.

—Toma esto y cállate —ordena poniendo un frasco de vitaminas fuertemente frente a mi. ¿Cuando compro esto?

—¿Josh, estás bien? ¿Estás enfadado por qué te mentí o hice algo mas estando ebrio? —pregunto mirándolo y bebo el pequeño frasco de vitaminas de un solo trago.

—Eso y que estando borracho te dormiste sobre la mesa, insultaste a un hombre que te confundió con una mujer, luego lo abrazaste y le dijiste que yo era tu cita. También casi me golpeas cuando intenté cargarte para ir a la estación de taxis ya que cuando intenté llamar por teléfono nadie me atendió y también dijiste cosas... —suspira pesadamente— mas de las que deberías haber dicho, o de las que hubieras querido decir estando sobrio.

¿Realmente hice todas esas cosas? No puedo recordar nada, ¡por Dios, díganme que no volví a mezclar las palabras y a decir algo que podría mal entenderse!

—Realmente lo lamento, estoy muy avergonzado —admito bajando la cabeza como cachorro regañado—, ¿qué tipo de cosas dije?

—Nada, JeongHan, no tienen importancia —algo me dice que si las tiene, quiero golpearme con una silla en la cara— Solo... solo no volvamos a beber. TU, principalmente —remarca.

—Joshua, ¿que dije? Necesito saberlo... —de veras necesito saberlo.

—Solo, olvídalo, ¿si? —se encoge de hombros, intentando parecer indiferente— Olvida todo lo que te dije, ¿de acuerdo? —cierra los ojos y suspira una vez mas. ¡Por favor, díganme que hice! No puedo verlo así— Ahora tienes que irte... debo bañarme y hacer unas cuantas cosas...

¿Me está echado? Me duele el pecho de tan solo pensar en lo que pude haber dicho para herirlo de esta manera estando bajo los malditos efectos del alcohol. El me acompaña hasta la puerta en silencio sepulcral. Antes de salir, logro ver como sus lágrimas inundan sus ojos y lo mismo sucede conmigo, así que agacho la cabeza para ocultarlo.

—Adiós, Josh —me despido y salgo de la casa.

Cuando oigo la puerta cerrarse detrás de mi, me volteó para mirar el pedazo de madera marrón que nos separa. ¿Por qué algo me dice que esto es el final y que no volveré a verlo? ¡No quiero que eso pase!