Luego del gusto, ¿un disgusto?

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Media hora ya ha pasado desde que estoy sentado en la mesa con la comida al frente y sin poder comer.

Hace hora y media desde que me he puesto a cocinar el almuerzo para el par de pervertidos que aun duermen, ajenos al tumulto de pensamientos que me agobian.

Dos horas desde que abrí los ojos y nos vi allí tirados en el piso del armario de Yeon -ah y desnudos. Para luego tomar a mi amante en brazos y lanzarlo en la cama de una forma nada cariñosa.

Para colmo, ni siquiera despertó.

No estoy molesto con él es algo que he aclarado en mi mente luego de dos horas. Simplemente no entiendo que ha sucedido.

¿HakYeon no ha disfrutado lo que hemos hecho juntos? No, si lo ha hecho. Sus reacciones no fueron fingidas.

Pero yo también le he dado carta libre en lo ocurrido. Sonrió al recordar que he prometido venganza.

Nunca me he considerado el dominante en nuestra relación. Es más, un arreglo no verbal que se ha establecido desde que comenzamos esta locura de estar juntos.

Yeon -ah es solo la persona que me complementa, esa parte que no sabía que necesitaba hasta que ha entrado en mi vida para ponerla patas arribas y tumbar varios paradigmas que estaban presentes en mí.

Y que por lo visto sigue tumbando.

Estoy enfurruñado. No por lo que hemos hecho. Realmente me apunto a la boca de Hakyeon un par de "infinitas veces" más. Sino que estoy seguro que Wonsik nos ha descubierto.

Y también estoy seguro que todo ha sido una estrategia de Hakyeon.

¿Él sabía de los pensamientos secretos de nuestro dongsaeng? Apenas termino de preguntarme a mí mismo cuando la respuesta aparece sin buscarla. No.

Hakyeon nunca jugaría con algo así, en algún momento se le han salido las cosas de control y a improvisado. Y todo le ha salido a pedir de boca.

Su boca.

Estoy duro de nuevo.

Mejor termino de comer o más bien empiezo. No quiero estar fuera del cuarto cuando Wonsik despierte.

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― Sé que estas despierto. ― Le digo y le aviento una almohada.

Llevo rato velando sus sueños y preguntándome si llegare a viejo antes de que me mate con su energía incansable. Aunque comente que ya está viejo y se cansa rápido. Es más, por el ritmo de vida que llevamos. Tantas prácticas y presentaciones. Ensayo tras ensayo. Todo eso va acumulando cansancio.

Pero energía sexual tiene de sobra. Como, por ejemplo, recuerdo haberlo vestido antes de ir a cocinar, y lo he encontrado sin pantalones acariciando su erección dormido. Me he preguntado en que momento iba a abrir los ojos, es decir, yo también tengo esos impulsos, pero al primer corrientazo de placer abro los ojos, aunque sea para ver si es real o sueño.

En cambio, Hakyeon ha seguido así durante un rato, también puedo decir con exactitud en que momento ha despertado y ha seguido su labor y en qué momento se ha dado cuenta de mi presencia.

― ¡Ya! Si no te comportas no te haré gritar como hace un rato. ― Él es la mata del descaro. Abre los ojos sensualmente y palmea la cama a su lado. Como que si luego del comentario que acaba de hacer mereciera mi compañía.

― Fue hace un par de horas atrás Cha Hak Yeon... ― hablo de forma fría y desinteresada, y sonrió al ver como pega un brinco y suelta su erección, seguidamente se ha escondido debajo de las sabanas.

Juguemos (Neo, por ahora)Where stories live. Discover now