Muñecos de Papel.

Sentimientos de arrepentimiento

La mirada furiosa de Woohyun se clavo en los tres chicos que se encontraban frente a el.

Los mataría, por su mente pasaban mil y un maneras para terminar con su vida, cada una más dolorosa que la anterior, tomó una gran cantidad de aire y luego lo dejó escapar todo con una gran frustración contenida.

—Con el tamaño que tiene ahora SungGyu, ¿Cómo pudieron perder de vista ese estomago? — Mencionó Hoya un tanto burlón, ganándose una mirada cargada de odia por parte de Woohyun.

— En lugar de estar planeando asesinatos ¿No deberíamos buscarlo? — La voz de SungYeol fue suave y temblorosa, en definitiva le tenía miedo a su amigo.

—¡¿Y dónde demonios piensas que podría estar?! — Grito frustrado Woohyun.

Todos a su alrededor se encogieron un poco ante el grito, un suspiro generalizado se escapó de los labios de cada uno.

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SungGyu, miraba fascinado la comida frente a él, se llevó un gran bocado del delicioso espagueti, sin importarle en lo más mínimo que su boca se manchara con la salsa.

Estiró un poco más su mano hasta alcanzar las albóndigas, y nuevamente lleno su boca con comida.

El mesero se acercó y con una amable sonrisa dejo sobre la mesa más pan blanco que SungGyu había pedido, además de que sus extraños antojos habían atacado de nuevo y terminó con un plato completo de aceitunas con salsa.

Muchos meseros lo miraron extrañados, aunque luego de ver su gran vientre simplemente asintieron sin queja alguna.

—¿Ya has terminado? — Una voz femenina se escuchó, SungGyu, elevó su mirada y la fijo en la señora que se encontraba frente a él.

La verdad es que al escapar de MyungSoo para ir a buscar a Woohyun, nunca pensó que terminaría en una situación como esa, pero ahí se encontraba en un restaurante italiano.

Junto a la madre de Woohyun.

Claro, que él no tenía ni la más mínima idea de todo lo que había ocurrido entre la elegante mujer y Woohyun.

—Dime SungGyu... — El mencionado elevó su vista y la clavo en los ojos de la mujer —¿Cómo va el embarazo?

—Muy bien, los gemelos están creciendo saludables — Respondió con una gran sonrisa. Los ojos de la mujer se abrieron en sorpresa.

—¿Tendrás gemelos? — Pregunto con un tono elevado.

—¿Woohyun, no se lo había dicho?

—No, me temo que no estaba enterada — Un leve tono de decepción se escuchó, SungGyu dejó a un lado los cubiertos y bebió un poco de agua.

—¿Woohyun y usted están peleados? — Pregunto.

El cuerpo de la mujer se tensó claramente ante esas palabras, dejó escapar un suspiro cansado y sonrío con un poco de amargura.

El arrepentimiento y la decepción hacia sus propias acciones le estaban comiendo el alma lentamente, SungGyu se notaba preocupado por ella, a pesar de todo lo que había dicho.

Aún si el chico embarazado no tenía ni la más mínima idea de todo lo que ocurría.

Cuando lo encontró esa tarde sentado en el parqué, lo primero que vino a su mente fue el pedirle perdón por todo lo ocurrido, por eso lo había invitado a comer.