Prólogo

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*Esta novela es la segunda parte de Lo que todo gato quiere, la cual estoy resubiendo completa a wattpad y también seguirá disponible en librerías  de España y Latinoamérica. Para más información, favor de consultar esa historia en mi perfil"

Te quiero, pero voy a matarte se encuentra completa aquí. ¡Disfruta de tu lectura!*

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Tenía hambre de oso.

Hambre que hacía que sus tripas rugieran salvajemente.

Allan Lambert se levantó de la cama, abrió la puerta de su habitación dejando atrás el desorden adolescente en su máxima expresión y arrastró los pies descalzos por el pasillo mientras bostezaba ruidosamente con el mínimo de elegancia y se rascaba el vello arremolinado en la periferia de su ombligo.

—Eh, Jamie, baja de ahí —le dijo a su hermano pequeño que estaba saltando sobre el sofá de la sala, con una sábana amarrada alrededor de su cuello como si fuera una capa de súper héroe, una espada de cartón empuñada en la mano y una corona de las que regalaban en Burger King que le quedaba grande y chueca sobre su infantil cabeza.

El niño lo ignoró deliberadamente y siguió dando gritos de guerra y espadazos contra un dragón invisible.

Allan abrió, casi desesperado, el refrigerador  de latón y escrutó el interior, esperanzado.

Vaya, la verdad es que hasta los vagabundos podrían encontrar más comida en un basurero que ahí. Todo lo que sus ojos veían era una solitaria caja de leche a medio acabar y una envoltura arrugada y vacía de queso.

—Diablos —masculló cuando su estómago supo el precario estado de la despensa—. Jamie, ¿dónde está mamá?— gritó por encima del ruido del televisor mientras sacaba la cabeza del refrigerador.

—Salió —le contestó el niño sin dejar de brincotear como chivo loco—, pero dijo que me dieras diez libras y me llevaras al zoológico.

—Buen intento.

Jamie estalló en carcajadas y Allan se resignó a tomarse la leche directamente del envase, de todas formas su madre no estaba para reprenderlo por ser un guarro.

Te quiero, pero voy a matarteWhere stories live. Discover now