Capítulo I : ¿Amigos?

146 92 8
                                    

Bueno, vengo a contaros mi pequeña historia. Soy Mei y...

...hace unos 15 años atrás...

Tenía 13 años en ese entonces, y no tuve oportunidad de escapar de esa situación, lo estaba pasando realmente mal, no sabía qué hacer, estaba perdida en un bosque oscuro y tenebroso con mi mejor amigo, Marcos.

Yo era una simple niña en esos tiempos, no me preocupaba por nada. Pero cuando entramos en ese terrible bosque, las cosas cambiaron. No me parecía que fuera yo misma.

Empecé a temblar y Marcos, por mucho miedo que tuviera por dentro, me ayudaba a tranquilizarme.

Él era un chico alto, de cabello rizado color castaño con reflejos rubios. Sus ojos café daban sensación de tranquilidad y seguridad. Me sentía súper a gusto cuando estaba con él. Era muy simpático, buena persona y muy comprensivo.

Un día por la tarde entramos en un bosque por equivocación. En ese entonces se oscurecía pronto y lo único que iluminaba era la luz de la luna. Oíamos ruidos por todas partes, o al menos eso es lo que nos parecía. No sabíamos qué hacer. Estábamos perdidos. Nunca debimos entrar. Jugando y jugando nos íbamos alejando de la ciudad, poco a poco, sin darnos cuenta. Y, evidentemente, éramos pequeños, y en ese entonces no había aparatos tecnológicos ni nada por el estilo.

Estaba perdiendo la esperanza de poder salir de ese maldito lugar. Marcos me repetía constantemente que no pasaba nada, que saldríamos de esa juntos, él era quien alimentaba mi esperanza. Sabía que lo hacía con buena intención, para tranquilizarme, pero era complicado, esa situación me mataba y no podía soportarlo.

En ese momento nos encontrábamos parados en medio del bosque, él abrazándome y alejando todo tipo de pensamientos negativos de mi cabeza.

De repente un ruido entre unos arbustos nos alertó. Estos eran un poco grandes y se encontraban algo secos. El ruido era de una pequeña ardilla que corría por el bosque. Supongo que era algo normal.

Seguíamos andando, como unas 2 horas más, estábamos agotados, así que decidimos pararnos y descansar un poco. Nos apoyamos en un pequeño árbol, cosa que éste también parecía necesitar agua.

Escuchamos de nuevo otro ruido. Pero esta vez se escuchaba de lejos y no podíamos ver qué era. Estábamos asustados, ya que podría ser cualquier cosa...

Le pedí a Marcos que me levantara, a ver si podía ver algo. Así que me subí a una pequeña roca para luego sentarme encima de sus hombros y ver más allá de los árboles. Y sí, lo vi. No podía creerlo, pero estaba allí. Marcos me preguntó que era. No le respondí. Como es de esperar me quede de piedra en esos instantes. Al ver que no respondía, me ayudo a bajar de encima de él y me miró. Me analizo y paso su mano por delante de mis ojos, para ver si estaba bien. Él estaba preocupado, no obtenía respuesta por mi parte.

Cuando por fin reaccioné, no dije nada, agarré a Marcos del brazo y me puse a correr con él. Aún estando cansados debíamos correr, no podíamos parar, era necesario. Y aun así, él seguía sin comprender nada.

Me volvió a preguntar que era eso que vi... "Se está quemando el bosque..." Le dije asustada y casi llorando.
Él no supo como reaccionar a esa respuesta. Evidentemente era lo último que esperaba, pero tenía que ser clara, yo no me andaba con rodeos.

No sabíamos que hacer. Ya no podíamos correr, las piernas no nos lo permitían. Solo un milagro podría salvarnos. Pero esa palabra no estaba en mi diccionario.

Marcos se quedó quieto de golpe. "No quiero morir aquí y de esta estúpida manera..."- Dijo mientras me miraba.

- Tengo algo que contarte antes que nada...- Me dijo mirando al suelo, con la mirada perdida.- Es un secreto que llevo guardado des de hace años, había jurado llevármelo a la tumba... Pero vistas las circunstancias... ¿Qué más da?- Intenta decirlo con gracia... Pero fracasando en el intento.

Friends?Where stories live. Discover now