Capítulo Treinta y Dos: Ayuda

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Capítulo Treinta y Dos

Diana 2012:

Mi cabeza palpitaba. Aunque mis ojos están cerrados la luz es cegadora. Un sonido monótono de beep suena en mis oídos y mi estómago se revuelve. Mis ojos parecen estar sellados, siento una gran pesadez en ellos. Mi boca está seca. Llena de algodón parece lo más probable. Trato de tragar, humedeciendo un poco mi boca. Todo lo que obtengo son pliegues secos de piel.

Trato de abrir mis ojos. Este acto sencillo es cansador, pero necesito saber cuales son mis alrededores. La luz del sol comienza a entrar y recupero mi visión borrosa. Al principio, todo lo que puedo ver son muros blancos. Después otras formas comienzan a aparecer. Diviso un escritorio con flores en él. Bajo la mirada y veo tubos subiendo por mis brazos. Mi nariz está seca e irritada. Me estiro para encontrar una máscara de oxígeno y es ahí cuando todo se aclara. Estoy en un hospital.

Una enfermera entra por la puerta y me muestra una sonrisa simpática. Se acerca a mi cama y me sirve un vaso de agua, colocándolo sobre la mesa móvil—. Nos asustaste un poco. —Dice. Su voz es suave y casi hipnotizante. La manera en la que habla es la forma en la que uno le hablaría a un niño o a un cachorro.

—¿Qué sucedió? —Pregunto. Ella inhala profundamente, con un miedo evidente en sus ojos. Muerde su labio inferior con ansiedad.

—Bueno, después de que tu madre te encontró, te trajeron aquí con prisa. Bombearon tu estómago y donde tenías una gran cantidad de fluídos. Afortunadamente, los analgésicos que tomaste no te causaron consecuencias a largo plazo.

Entiendo todo y pienso. Ahora, todo parece borroso. Solo puedo recordar ciertas partes. Recuerdo la canción "Little Things" que se supone que Zayn escribió para mí. Oh Dios, Zayn. ¿Qué creerá que me sucedió? ¿Siquiera sabía que estaba pasando?

—Uh, señora. —Comienzo con incertidumbre y después leo en su etiqueta de nombre—. Um, señora Terri ¿ahora puedo ver mi teléfono? —Ella niega con la cabeza.

—Debido a que eres una paciente psiquiátrica no puedes pedir tus cosas hasta que el doctor te evalué. Necesitamos asegurarnos que no tratarás de lastimarte de nuevo.

La pregunta sobre cómo un teléfono podría matar a alguien pasa por mi mente. Aunque no la pregunté. No quería que ella pensara que era una suicida.

—El doctor Farinas estará aquí en un momento. También, traeré a tus padres y les diré que despertaste. —Asiento mientras ella sale de la habitación, cerrando la puerta detrás de ella.

Ni siquiera pude matarme bien. Eso demuestra lo mucho que yo fallaba. ¿Por qué tenía que vomitar esas píldoras? Todo hubiera estado bien ahora. Me habría ido. Mamá y papá tendrían una boca menos que alimentar. Sería un sueño de vida.

Estás aquí porque tienes un propósito.

La voz de Zayn resuena en mi cabeza una vez más.

Trata de consolarme por esas mentiras dulces. No tengo un propósito. Una chica rota con un desorden alimenticio y cicatrices en su cuerpo no puede tener un objetivo. Las chicas lindas. Las delgadas sin rollos y huesudas. Esas chicas tienen un propósito. Pueden seguir y hacer cosas maravillosas.

Esas son mentiras. Todo el mundo tienen un propósito.

La puerta se abre una vez más y mi familia entra. Mi mamá, con lágrimas en sus ojos me envuelve en sus brazos. Su cuerpo se mueve con sollozos y estoy insegura sobre como debería reaccionar. ¿Debería abrazarla? ¿Decir lo siento? No puedo mentir y decir que lo siento cuando no es cierto. ¿Qué puede hacer una en un momento como este?

—Por favor, ¡nunca hagas eso de nuevo! Tenía tanto miedo de perderte.

¿Ella tenía miedo de perderme? Eso es tan ajeno a ella. ¿Cómo ella tuvo temor de perderme cuando ella era una de las razones por las que quería desaparecer? No es como si ella fuera una inocente espectadora. Estaba dispuesta a recibir una bala por ella, pero ella apretaba el gatillo. Probablemente parecía muy fría para mi familia, pero no correspondí al abrazo. Ahora se comportan como si les importara.

—¿Por qué lo hiciste? ¿No pensaste que íbamos a echarte de menos? Nos mataría saber que te hubieras ido. Nuestras vidas habrían cambiado para siempre —Los ojos de mi papá están cristalizados y un nudo se forma en mi garganta. ¿En serio él no tiene idea porque hice esto? Le conté a él y a mamá incontables veces que la gente me odiaba en la escuela. De todos modos, ellos solo me decían dramática y que si era más sociable quizá le agradaría a las personas. Era mi madre quien me decía monita rechoncha. Era ella quien me alentaba a que perdiera peso.

Aún así, ellos se están portando tan inocentes.

—¿Por qué lo hice? —Mi voz se eleva con furia. Siento que mis latidos se aceleran en mi pecho—. ¡Lo hice porque yo les dije que las cosas iban mal, pero ustedes no me creyeron! Lo hice porque me sentía sin valor, no tenía nada. ¡Ni siquiera los chicos me querían! Seguí intentando, pero nada funcionó, aún así preguntan ¿por qué lo hice? ¿Saben que es mirarse al espejo cada día y odiarse a sí misma? No solo tú reflejo, sino también tu voz, la forma que piensas, ¿todo? ¡No tienen idea como se siente y ustedes me hacían sentir así! ¡No actúen como si no fueran culpables!

Cálidas lágrimas descienden por mi rostro y escucho el monitor de mi corazón hacer beep fuertemente. La mirada en mis padres es de puro shock y horror. Bien, no me importa. De todos modos debería haberme ido. Antes de que ellos tengan la oportunidad de decir algo un enfermera entra y los saca de la habitación, diciendo que me estaban irritando y que el alto ritmo cardiaco podría matarme potencialmente debido a los analgésicos que ingerí antes.

Pronto ellos salen de la habitación y ella se acerca a mí, sentándose al borde de la cama diciéndome que respire lento. Inhalo, siguiendo sus indicaciones. Mi pecho está tenso, mi cabeza palpita, todo a mi alrededor parece desvanecerse. Cierro mis ojos y continuo respirando. Estoy cansada de esto. Estoy cansada de sentirme así. Quiero irme. Abro mis ojos de nuevo y estoy mirando los ojos azules de la enfermera. Con una respiración temblorosa finalmente digo.

—Por favor, ayúdeme.


©liveoutsidethelines

Finalmente Diana les dijo todo lo que sentía a sus padres, ¡PARA QUE VEAN QUE SU VIDA NO ES SOLO UN DRAMA! ¡ES REAL! ¡R-E-A-L! y en lugar de llamarla dramática deberían prestarle más atención a su hija :(

¿El negro se enterará de todo lo que le pasó a Diana?

¡MUCHAS GRACIAS POR SER TAN PACIENTES!

¡MUCHAS GRACIAS POR LEER!

Pd: Shelby no actualizó porque se mudó a la universidad, aparte de que tuvo varios problemas u.u esperemos que todo eso mejore. Según su nota de autora aún faltan varios capítulos c:

 Dedicado a: majodemalik ya está Majo, para que no te desesperes c:

Diana (Z. M.) | εѕραи̃σlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora