Confused Heart. |Jihan| (Lemon)

8.

—Oye, Minghao —Joshua llamó la atención del menor, cuya mirada estaba clavada en Soon Young.

Si, el chico había cumplido su promesa de ser cliente recurrente hasta conseguir el teléfono del menor. Ahora se encontraba leyendo un libro junto a una mesa en la ventana.

—Dime, hyung —sonrío volteándolo a ver.

—Un chico me pidió tu numero de teléfono. —Fue al punto, sería mejor si era directo— Soon Young —lo señaló.

MingHao sonrío ampliamente y volvió a mirar al rubio de ojos pequeños.

—¿Le gusté? —preguntó sonriendo y Joshua asintió— ¿De verdad? Nunca le he gustado a nadie.

—¿Qué? No bromees, a puesto a que le has gustado a muchas personas —SeokMin rió con fuerza y él menor lo golpeo para que bajara la voz.

—Hablo enserio, hyung —suspiró—. ¿Debería pasarle mi número?

—Primero te emocionas porque le gustaste a un chico y luego dudas en pasarle tu numero —Seungkwan puso los ojos en blanco—, ¿quien te entiende?

—Es que... ¿y si me pide una cita? Yo no se como actuar en las citas... nunca tuve una —suspiró con preocupación y Joshua apoyó una mano en su espalda.

—Mira... la mejor manera de actuar en una cita es siendo tu mismo —aconsejó—, busquen cosas que tengan en común, sus gustos, sus pasatiempos...

—Bueno... a mi me gusta bailar —habló pensativo, mirando el techo.

—¿Lo ves? Ya tienen algo en común, Soon Young se recibió de coreógrafo el año pasado —se encogió de hombros—. Vamos, dame tu teléfono que se lo llevaré.

Minghao volvió a mirar a Soon Young, quien lo estaba mirando desde la distancia y al encontrar miradas miró a otro lado, avergonzado. El chino sonrió y anotó el teléfono en un papel que encontró por ahí antes de entregarselo a Joshua para que se lo llevara a su amigo.

—¿Tu café está bueno? —preguntó el pelirrojo sentándose frente a Soon Young.

—¿De que hablaban con MingHao? ¿Tienes su numero? —el rubio parecía desesperado a los ojos de Jisoo, por lo que no pudo evitar reír.

—Si, toma... —le pasó el papel y éste lo miró con una sonrisa— No seas intenso con él, nunca le ha gustado a nadie, tampoco ha tenido una cita nunca.

—¿Intenso? ¿A que te refieres con eso? —preguntó, algo ofendido.

—Tu tienes demasiada energía y eres demasiado alegre... él es mas del tipo silencioso pero tierno —explicó—. Háblale con calma, no grites...

—Como si fuera tan ruidoso... —rio y Joshua lo miró con las cejas alzadas— Está bien, no seré tan ruidoso —resopló.

—Perfecto —rio.

El horario de trabajo terminó, el día fue agotador para todos. La tienda se había llenado, según los empleados de mas antigüedad, mas que de costumbre. Joshua llegó a su casa y se tiro boca abajo a la cama y se quedó dormido sin siquiera quitarse las zapatillas.

*   *   *

Al día siguiente, Joshua y Jeonghan preparon todo lo que llevarían para pasar el día en el Palacio Gyeongbokgung juntos; una manta para sentarse, comida, algo para beber y la guitarra del pelirrojo. Después de que Joshua fuera a la casa donde el pelilargo vivía, se tomaron una taxi juntos hasta dicho parque turístico.