El internado

38 5 0
                                    



Otro continente me daba la bienvenida, otra vida y el mismo dolor...

Estaba llena de nostalgia por lo que deje atrás, por mi casa, mis recuerdos, mi colegio y en mi memoria mis padres...

Bajé del coche mirando a mi alrededor, otros coches con chicas que venían a estudiar, llegaban con sus padres, las despedían con besos y abrazos; trate de no fijar la mirada para que no me doliera haber llegado sola. Miré los extensos jardines y en frente el enorme colegio, una chica alta y algo protocolar me recibía cordialmente. Respondí a su saludo sin interés.

Fui guiada por esta chica hasta mi habitación compartida, allí me recibía Abbi una dulce niña, con la que me sentí a gusto desde el principio. Sobraba una cama que aún no era ocupada. Era una enorme habitación en el primer piso con una ventana que daba hacia un jardín interno. Y a lo lejos se veía otra estructura del mismo colegio.

-Puedes elegir entre las dos camas, aun no las asignan- Dijo sonriendo.

Realmente me daba igual, así que solo tomé alguna. Cuando de repente apareció una hermosa chica rubia, sería la tercera y última compañera de habitación. Era presumida y poco amistosa, no me importó su actitud, era una malcriada, hijita de papi...

Entró una empleada del colegio con los uniformes perfectamente doblados junto con una hoja con el horario de clases que debíamos cumplir fielmente y las reglas del colegio.

Ya era casi hora de almuerzo, nos colocamos el uniforme y nos dirigíamos al comedor, no tenía hambre, realmente los deseos de comer habían desaparecido casi completamente, había bajado muchísimo de peso en estos casi dos años que habían pasado desde la muerte de mis padres...

El comedor era extenso, allí pude observar el gran número de chicas que estudiaban allí, el colegio se dividía en dos secciones para niños y para niñas los dividía un jardín interno, las únicas prácticas que teníamos para compartir con ellos eran las obras de teatro y los deportes del resto no podíamos tener ningún contacto con ellos...

Los días pasaron sin novedad, tenía clases casi todo el día; no había mucho tiempo para pensar o para holgazanear, eso me gustó; mente ocupada, mente ágil y eso me hacía sentir bien, pronto recupere mis calificaciones que estaban por el piso. A pesar del tiempo y la convivencia con las chicas, me había vuelto muy arisca y solitaria, mi mundo los libros y la literatura... Hice una amistad muy cercana con Abbi. Hasta que llegaron los problemas.

Entre aquellas niñas había una líder del grupo, de esas chicas que arrastra masas y tiende a sentirse las diosas del mundo, así era esta chica, era arrogante y egocéntrica veía la debilidad en las otras chicas y se aprovechaba de eso...

Siempre me mantuve al margen con ella, hasta que la cogió con Abbi, mi indefensa y dulce amiga...

Hasta el punto que tuve que revolcarme con ella en una pelea que aglomeró a todas las chicas alrededor, había recuperado algunas libras de peso y la resistencia que había tenido en las canchas de futbol en América me habían valido de mucho. Pronto se dio cuenta que no podría conmigo, así que siguió molestando a mi amiga Abbi, hasta que le propuse hacer una apuesta que la liberaría del maltrato a que era sometida casi a diario.

Deje que ella eligiera el reto y se alejó de nosotras aceptando y diciendo que en una semana respondería cual sería la apuesta que libraríamos...

Deje que ella eligiera el reto y se alejó de nosotras aceptando y diciendo que en una semana respondería cual sería la apuesta que libraríamos

К сожалению, это изображение не соответствует нашим правилам. Чтобы продолжить публикацию, пожалуйста, удалите изображение или загрузите другое.





SI TE HA GUSTADO POR FAVOR VOTA Y SÍGUEME...

En los zapatos de CinderellaМесто, где живут истории. Откройте их для себя