Prólogo.

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Tranquilidad era una de las cosas que se podrían destacar del bosque por una razón evidente. Las criaturas viven en paz, así ha sido durante años, lo único que podría considerarse molesto es el cantar de los pájaros durante todo el día.

Entre la tranquilidad y la extensa vegetación del bosque, un joven castaño descansa entre la hierba, con un libro de portada marrón en sus manos. Está muy concentrado en su lectura, un pasatiempo que disfruta hasta el punto de leer todo el día. A veces se cuestiona si su gemela tiene razón al reclamarle que debe buscar más actividades... Entonces es cuando olvida esas absurdas ideas y vuelve a sus historias de fantasía. Su gemela, aquella sirena castaña con escamas de colores rosados, ella es quién disfruta de esas actividades más "ruidosas". Adora a su hermana y pasar el tiempo con ella, aún cuando suele iniciar muchas guerras de agua sin ningún motivo... Pero, aunque ama lo activa y graciosa que puede ser, esas cualidades también son las que lo separan de ella. Dejando de lado el detalle de que ya ha arruinado varios de sus libros por el agua, Mabel adora llamar la atención. Es una sirena ruidosa, le encanta gastar sus energías día a día, aunque eso implique reír a carcajadas y gritar hasta que el bosque completo la escuche. Sin embargo, Dipper es lo contrario. El pequeño cervatillo disfruta de la tranquilidad, la lectura y la discreción. Odia tener las miradas sobre él, teme hacer el ridículo frente a cualquier persona. La personalidad, los gustos e incluso la especie es algo que separa a los Pines más pequeños, aunque eso no significa que se desagraden, simplemente significa que Dipper necesita sus pequeños momentos en calma. Al menos tiene su consciencia tranquila al pensar que su hermana no está sola, siempre tiene compañía, incluso aquella presumida serpiente rubia. Su hermana tiene mucha compañía, otra cosa que los diferencia.

--Uh...-- El pequeño castaño suspiró, mientras cerraba su libro y lo dejaba a su lado derecho, sobre una piedra plana que suele usar como respaldo para las cosas que pueda llevar. Luego de aquella acción, comenzó a apreciar el libro con la mirada. Ese libro es especial, un secreto que guarda a toda su familia. Cuenta la historia de una chica que adora la lectura y a su padre, pero por azares del destino queda atrapada en el castillo de una bestia. Con el paso del tiempo, la joven y bella mujer se enamoró de su captor, al igual que la bestia de ella. Con amor verdadero, rompieron el hechizo que mantenía a la bestia con esa forma, terminó siendo un apuesto y gentil príncipe. Es demasiado fantasioso para el gusto del menor, pero eso no impide que haya releído el libro una y otra vez. Aún así, lo especial de su lectura no es la historia, sino que lo es su origen. Sí, el pequeño cervatillo tiene un libro del mundo humano en sus manos.

Su tío Ford siempre le advierte sobre esos seres, son egoístas y crueles, la mayoría cazadores de los que hay que cuidarse y mantenerse alejado. Sin embargo, Dipper no puede creer eso. Está la palabra de su tío contra un libro, una historia que encuentra muy adorable. ¿Cómo un ser capaz de destruir y asesinar puede crear tan bello relato? Acciones descritas a la perfección, casi podía sentir las emociones de la bella doncella atrapada. El miedo y la confusión, luego la dulzura ante el ser desconocido, ¿Cómo pensar que eso lo hizo un ser malvado y sediento de sangre? Son dos puntos contradictorios, a ambos puede encontrarle la razón. Sabe que son seres peligrosos, pero no puede simplemente juzgar a todos por igual, sería como decir que todas las criaturas mágicas del bosque son excesivamente tranquilas, lo cual es mentira si cuenta a su propia hermana. Hay excepciones para todo, ¿Por qué no para un humano?

Sin embargo, el cervatillo no sabía lo que le esperaba.

Atrapado en sus pensamientos, sólo pudo volver a la realidad al sentir un agudo dolor en una de sus patas traseras. Giró su cabeza para ver lo que había provocado esa molesta sensación, sólo para encontrarse con un extraño artefacto con... ¿Plumas? Ni siquiera logró distinguir lo que era, sólo supo que su visión se nublaba poco a poco, mientras pasos pesados se acercaban a él.

--Te atrapé, Pino.-- Luego de escuchar aquella frase, todo se volvió oscuro.

Cacería. [BillDip]Where stories live. Discover now