¿Robará tu esencia mi puñal ausente?
¿La inocencia tibia calmará su llanto?
¿Me dirá la magia algún secreto franco,
con el que redima mi banal presente?
¿Te veré dormido en un segundo canto?
¿Y con mis mejillas rozaré tu espalda?
¿Las almohadas frías mirarán tu tacto,
entre las inertes sábanas descalzas?
"Somos poesía" me dijiste en blanco,
cuando te admiraba sin perder el hilo.
Somos peces fieles y leones mansos.
Eres de quien llora cuando ya te has ido.
No hallaré consuelo en otros labios castos,
ni revancha cruel en manos con historia.
No podrá un sombrero con conejos santos,
arrancar disparos desde mi memoria.
Entre mis cobijas pálidas de sangre,
moldearé tu rostro en mundano esfuerzo.
Yo te recorría como un plano en marte,
tus lunares guía, tus pestañas puertos,
tus detalles lunas, mi universo alterno.
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Carta a la autoestima.
PoesíaEl dolor no te hace menos fuerte o te quita valor. Sentirlo y sobrellevarlo es un gran acto de valentía. Qué bello es el sonido del alma entera, ¡que la miren todos! Ella, ni realeza ni esclavitud... Certeza. El valor, independencia suave, ¡que la...
