P A R T E ❀ Ú N I C A.

2.9K 283 1.2K
                                    

ㅡPor favor, tienes que entenderme, no puedo dejarlo sin regalo de cumpleaños como si nada ㅡdecía el hombre a su mujer con cierto tono preocupado mientras la seguía por toda la habitación ㅡ. TaeHyung casi no tiene nada ni a nadie aparte de nosotros, no podemos dejarlo así, cariño.

La mujer hacía oídos sordos a las palabras expresadas por su marido. Por más que le doliese, no podía hacer nada al respecto para consentir a su hijo, quien cumpliría años dentro de tan sólo unos pocos días. La pobreza era muy notable en la pequeña familia del joven TaeHyung, que con tan sólo siete años de vida en la injusta tierra en la cual vivía, casi ocho, se había tenido que adaptar a aquella situación que sus progenitores no podían controlar ni hacer nada al respecto. El pequeño castaño no solía tener nada de cumpleaños, y siempre pedía el mismo regalo una y otra vez, siempre pedía un amigo con el cual jugar, como un hermano. Sus padres no podían darse el lujo de tener algún hijo desde el nacimiento de TaeHyung, su madre ya había pasado la edad límite para traer otro ser humano al mundo, pero por más que lo intentase, no había éxito al procrear con su marido.

ㅡAmor, sabes que no tenemos el suficiente dinero para pagarle una escuela a TaeHyung ㅡsoltó su esposa, ya cansada de la situación ㅡ. Me niego rotundamente a dejarlo con los demás chicos del pueblo a jugar, todos lo molestarán por nuestra pobreza, y no quiero que nada malo le suceda a nuestro hijo.

ㅡPero podemos buscar otra manera ㅡsugirió el hombre, atrayendo nuevamente la mirada de su mujer, quien no comprendía a qué se refería su marido con aquellas palabras ㅡ, aún tenemos tiempo cariño, seguramente podremos hacer a TaeHyung cambiar de opinión y buscar algo más accesible ㅡoptó por buscar una solución sencilla para el problema, pero ella lo miró no muy convencida de sus palabras.

ㅡNo creo que cambie de opinión tan fácil, SeokJin ㅡSe levantó del sofá con pesadez, decidida a irse de la sala a su habitación para descansar de una vez por todas y relajar sus nervios y estrés. Pasó por un lado de Jin, sin dirigirle mirada alguna.

El rubio se quedó en silencio un tiempo considerable, mirando a través de la ventana que había en medio de la sala, la cual apuntaba a las oscuras calles del pueblo donde vivían. No sabía qué hacer con TaeHyung y su regalo, pero sin duda estaba cansado de no poder darle absolutamente nada por culpa de sus ingresos.

Decidió que al salir el Sol de la próxima mañana, se pondría en rumbo a buscar algún regalo que reemplace ese deseo de su hijo por tener a alguien más a su lado. Quizás podría preguntarle qué cosas le gustaría tener por su cumpleaños, algo además de simple compañía. Apagó las luces y se dirigió a su habitación con su esposa para conciliar el sueño, mañana sería un nuevo día y tendría que estar con las fuerzas recargadas para cualquier situación.

ㅡ♡ㅡ

ㅡ¿Y qué cosas quisieras para tu cumpleaños, TaeHyung? ㅡpreguntaba Jin al muchacho con una sonrisa de oreja a oreja. Ya sabía la respuesta que le daría el sonriente chiquillo, pero de todas formas no dudó en preguntar nuevamente.

El niño miró sus pies como si fuera lo más interesante del mundo antes de levantar su mirada y sonreírle a su padre con inocencia y completa alegría. Su peculiar y rectangular sonrisa era algo adorable en él que perfectamente podría traer locas a las demás niñas de su edad, era sumamente lindo, aunque él no lo sabía realmente. Las palabras que salieron de su boca fueron las típicas que su padre había estado escuchando desde hace mucho tiempo atrás.

ㅡQuiero un amigo.

ㅡ¿Y no preferirías otra cosa? ㅡTrató de convencer al infante, pero éste negó con su cabeza de lado a lado. Jin suspiró ㅡ. Oye, Tae, ¿Seguro que no hay algo más que quisieras por tu cumpleaños? Como, no sé, ¿Algún juguete? ¿Un helado?

ten steps | taekookWhere stories live. Discover now