Capítulo 41: "Ahora más que nunca"

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Mientras Alonso la abrazaba sintió como la bala se impactaba en el cuerpo de la castaña.

Las manos del ojiazul se llenaron de sangre.

Él la miró.

No logró evitar que las lágrimas recorrieran sus mejillas.

Y sollozó fuerte.

No le prestó atención ninguna de las personas a su alrededor.

Sólo se concentró en ella.

- Por favor, resiste... por aquella vez que vi a la chica de cabello castaño sonriéndome, por esa chica tímida y con una locura hermosa, necesito verla fuerte, no tienes idea de cuanto la necesito...

Inclinó su rostro para evitar que viera sus lágrimas.

Y sollozó.

Ella se dedicó a mirarlo.

El impacto de la bala le dolía, pero nada era peor que ver llorar al hombre que tanto amaba.

La bala no se comparaba al dolor que sentía cuando lo veía llorar.

Eso no impidió que le llegara un fuerte retortijón a causa del impacto en su espalda.

Cada vez respirar le era más difícil.

Con mucho esfuerzo movió poco a poco su mano, hasta tocar el rostro del ojiazul.

Éste la miró.

La chica inhaló profundo.

- Alonso... de aquella chica que recuerdas ya no hay nada, tal vez es mejor así, que desaparezca una vez más de tu vida, está vez para siempre... - mencionó con la voz en un hilo, le era difícil hablar por el dolor.

El peli rojo de desconcerto.

Ella no podía estar diciéndole eso.

¿Era verdad todo lo del video?

- No, no digas nada. En estos momentos estás delirando, es lo que sucede.

Le repitió una y otra vez.

La chica dejó salir una lágrima, que recorrió poco a poco su mejilla.

Alonso no se percató de esto.

Dejó de escucharla.

La tomó entre sus brazos y la cargó hasta una de las camionetas, ahí lo recibieron sus cuatro amigos.

Ella ya se encontraba inconsciente.

- Aún está respirando y tiene pulso- exclamó Jos tomando a la chica del cuello.

El ojiazul retiró todos los malos pensamientos de su cabeza.

No le importaba lo que ella le dijera, él la amaba.

- Tenemos que llevarla al hospital- exclamó el de los ojos azules.

[....]

Se encontraban en la sala de espera del hospital.

Los chicos le habían informado a Alonso acerca de lo que había sucedido, después del disparo llegaron más agentes y lograron capturar a los secuestradores, quiénes serían interrogados para llegar al fondo de todo.

- Eso no me devolverá el tiempo que pasé sin ella- mencionó Alonso observándola detrás de la ventanilla de la habitación en la que estaba la castaña.

Ella había estado en la sala de urgencias y de ahí se la llevaron al quirófano para extirparle la bala.

Había quedado en una situación muy delicada.

Recuérdame  [AV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora