Tristeza.

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El aire chocaba contra mis mejillas, la superficie blanda me doblegaba y hacia que no quisiera despertar de tan placentero sueño, el olor a café llegaba a mi haciendo mas difícil mi despertar.

-_____.... Despierta. 

La pequeña voz de Bell se escuchaba distante, apenas un murmullo distante. 

-______.

-Ya voy... Ya voy... 

murmure apenas, sin poder evitarlo comencé a abrir los ojos con lentitud, notando que bell se encontraba sentada en la almohada en la que mi cabeza descansaba y en mi estomago, el pequeño Gholem me miraba con curiosidad. 

-No me mires así pequeño. 

El solo desvió la mirada, para después caminar hacia Bell y susurrarle algo en el oído. 

-Dice que quiere un contrato contigo, _____.

La petición me tomo por sorpresa, Bell siempre ha sido mi única familiar, desde que tengo 6 años, tener otro familiar de repente eso... 

-L-lo siento pequeño pero... No se si debería. 

-vamos ____, tener otro familiar no seria tan malo, tu energía no se terminaría tan rápido. 

-ahh... Esta bien... Al atardecer aremos el ritual del nombre.

Unos golpes se escucharon en la puerta, Bell fue a abrir la puerta, encontrándonos con el mago y el pequeño aprendiz detrás de esta, al mayor traía una charola de comida, mientras que el pequeño traía algunos cubiertos.

-Que bueno que despertaste, el Amo Howl te trajo hasta aquí cuando te desmallaste. 

-Es mejor que comas, recuperaras energía.

Me senté en la cama sintiendo un pequeño mareo, al parecer el conjuro fue mas  duro de lo que creí, el gholem se acurruco a un lado de mis piernas, quedándose dormido casi al instante, al parecer la purificación había echo que sus energías también se bajaran, Bell se sentó en mi hombro, a la vez que Holwl se acercaba con la bandeja de comida, en ella se encontraba un zumo de naranja acompañado de fruta y un poco de huevo frito y verdura asada, todo un manjar para mi después de haber echo el echiso de purificación.

Sin importarme mucho que los presentes tuvieran su mirada puesta en mi, comencé a devorar la comida, sintiendo las miradas pegadas en mi y a Bell riendo en mi hombro, al terminar, mire al mago y al aprendiz. 

-G-gracias por la comida...

-No es nada, eres la nueva huésped por ordenes de Suliman,  Es nuestro deber darte la bienvenida, se que esto debió ser al principio pero permite me presentarme. Soy el mago Howl, conocido en muchas partes del reino. 

-Soy Marck, el aprendiz del mago Howl, un gusto conocerte.  

Me impresiono la formalidad y cambio que estos 2 sujetos tenían, pero mi eso era poco importante, con algo de esfuerzo me puse de pie, ignorando por completo la falta de fuerza que aun teni, bell a mi lado se encontraba volando. 

—Soy _____, hechicera protectora. 

—Soy Bell, un ada guardian, familiar de _____. 

Ambas al mismo tiempo hicimos una reverencia, mientras en mis labios se posaba una sonrisa. 

—____... ¿Por que te han envido a este lugar? 

—Bell... 

—A la orden. 

Bell se encontraba ahora frente s ambos chicos con un pergamino en su mano. 

—Por ordenes de la hechisera Suliman, la hechisera guardiana _____, ha sido enviada pera evitar la muerte de los avitantes del castillo ambulante de Howl, para remediar su deprecion y devolver a los habitantes su magia perdida. 

Bell termino de leer lo que contenia el pergamino, para despues volver a mi lado. 

Al mirar a ambas personas todo rastro de alegria se habia perdido, sus miradas era sombrias y sin calidad, lod ojos brillaban de tristesa, y sus miradas estaban bajas. 

—Me temo que eso no es pocible bella dama... Como vez, la felicidad es algo que ya no esta precente en este lugar. 

Sin mas, ambos dieron media vuelta ssliendo por donde habian venido, sin mirar  atras y dejando la habitacion en un silencio sepulcral. 

Una nueva hechicera HowlxLectora (El maravilloso castillo vagabundo)Where stories live. Discover now