Albus Potter y la Rebelión del Lago

4: Fred, El Inventor

*En la imagen, James Potter.

Los días posteriores al nombramiento de Percy Weasley como nuevo Ministro de Magia fueron bastante ajetreados varios de los adultos de la familia. Como la mayoría trabajaba en el Ministerio, de pronto tomaron cierta fama, a parte de la que ya tenían, obviamente. Para Teddy y Victoire, que recientemente habían comenzado a trabajar como aurores, esto supuso algo de estrés adicional, pues no estaban tan acostumbrados a ser perseguidos por reporteros como el resto y, además, ahora su boda era uno de los temas que más se comentaban en los periódicos. Zacharias Smith, de El Profeta, escribió un molesto reportaje en el que se recordaba la condición licantrópica que padecía el difunto Remus Lupin, padre de Teddy. Al final de la nota, se podía ver que Smith solamente quería evitar la boda, y los motivos eran obvios. Se dedicaba a halagar a Victoire, pero criticaba fuertemente a Teddy.

-Seguramente es su lado veela- pensó Rose un día -Zacharias Smith ha caído en el encanto.-

-¿Y quién no?- soltó James.

-No puede ser- se exasperó Rose -¡Es tu prima!-

-¡Lo se!- se defendió el muchacho -Solo digo que ella es hermosa, y hay que ser ciego para no reconocerlo-

-Tiene razón- concedió Albus -¿No te fijaste en nuestro primer año, cuando ella estaba en séptimo? ¡Todos la volteaban a ver cuando caminaba por los pasillos!-

-¡Claro!- los calmó Rose -Ya entendí su punto, primos...-

-Lo se, Victoire era casi tan popular con los chicos como yo con las chicas- bromeó Fred.

El primo Fred había terminado su séptimo año en Hogwarts el curso anterior, y los resultados de sus EXTASIS fueron algo malos, por no decir terribles. Su calificación más alta fue "Supera las Expectativas" en Encantamientos y Transformaciones. Sin embargo, a él no le importaba mucho, pues admitió que no se esforzó en lo absoluto a la hora de hacer sus exámenes. Y es que Fred tenía muy claro que, si no iba a trabajar en el Ministerio, no necesitaba sacar calificaciones altas... Y lo último que él quería era trabajar en el Ministerio de Magia.

-Sigue soñando- desafió James al escuchar que su primo alardeaba de su popularidad -Todos saben que en Hogwarts yo siempre seré el rey y tu el príncipe...-

-Soy mayor- interrumpió Fred -Y si mal no recuerdo, hasta hace unos meses tu me llamabas "Capitán".-

James decidió no decir nada ante esos argumentos.

-Es mejor no hablar, y parecer un idiota- le dijo Albus a su hermano con una sonrisa -Que abrir la boca y confirmarlo.-

-¿Y qué harás con tu vida ahora, Fred?- quiso saber Lily.

-Buena pregunta, prima- agradeció Fred -Lo he pensado bastante, y creo que mi futuro está en inventar cosas.-

-¿Como tu padre?- se extrañó Albus.

-No exactamente- se apresuró a explicar Fred -Amo los artículos de broma que hace mi padre, pero quiero ir un paso más allá... Mi sueño es inventar algo que revolucione al mundo... Como el tipo que descubrió la cura contra la Viruela de Dragón, o el que inventó los Giratiempos...-

-¿Giratiempos?- preguntó Hugo -¿Qué es eso?-

-Eran aparatos que permitían volver unas horas en el pasado y así cambiar algo que no te gustó- se adelantó Rose -Pero fueron destruidos hace años-

-Por nuestros padres- completó Albus -Una lástima, seguro habrían sido útiles en algún momento.-

-Exacto- apuntó Fred -Y quiero crear algo tan innovador como los Giratiempos.-