One Shots/ Peter Maximoff Y Tú/

Amor desquidiado.

Advertencia: Sí: v. Bien, esto proviene del lado más oscuro de mi alma negra :v(?
P.D: Ya me jodio Summer Paradise, no sé como seguirlo ya que terminé haciendo algo totalmente diferente a lo que pensaba:v por cierto, aquí ambos son humanos.
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- Entonces yo le dije que se fuera a la mierda. ¡Nadie puede insultarte a ti!. - Me dijo muy molesta, su ceño fruncido, sus labios apretados y las ligeras arrugas que se formaban entre su ceja al enojarse volvieron a captar mi atención. Mi corazón aceleró al ver cómo sus ojos se perdían en los mios por un instante hasta que yo desvíe la mirada al ver como dos tipos le veían el trasero al pasar a un lado de nosotros. La sangre hirvió en mis venas por minutos ignorando complemente lo que mi acompañante me decía, odiaba con el alma cuando las personas veían algo que me pertenecía solamente a mí. Algo que era mio, mio, mio, mio y solo mio.

- ¿Quieres que te deje en tu casa? - Le pregunté cuando había terminado de relatarme con alegría su día. La estancia en la mansión X había sido de lo más agradable en lo personal, pero como ambos no teníamos poderes y solo la visitábamos por nuestros amigos consideré que era hora de ir a casa. Ella asintió con energía y fuimos a buscar a Scott para despedirnos. Luego, ambos partimos rumbo hacia casa nuevamente sumidos en un silencio casi mortal.

- Hasta luego Pet. - Se despidió ____ dándome un beso cerca de la comisura de los labios. Nuestros cuerpo quedaron muy cerca e inhale su aroma sin que ella se diera cuenta. Sonrió al separarse de mí y salio con un paso decidió hacia su casa.

- Espera... - La detuve agarrando su brazo de una manera descontrolada, soltó un gemido de dolor y eso hizo que me excitara un poco. El hecho de tenerla gimiendo... Gimiendo de dolor. - Lo siento. - Me disculpé rápidamente con un sonrojo bastante notorio, normalmente solo pensaba de esa forma con las personas que quería fuera de la vida de ______.

Me di miedo por un momento.

- No te preocupes. - Dijo dulcemente con una sonrisa de lado, se sentó de nuevo en el asiento del copiloto y esperó paciente a que le dijera que ocurría.

Miré sus ojos y todo el miedo por confesarle mis sentimientos desapareció. Respire hondo y me lance a darle un beso.

Sus labios se movieron lentamente al compás de los mios un poco desorientados al principio. La sentí sonreír sobre el beso y acaricio miñ

La miré marcharse y con una sonrisa de idiota enamorado encendí de nuevo el carro para ir a mi casa.

....

- ¡Ya llegue familia! - Grite cerrando la puerta a la soledad de la casa. Mi familia murió hace unos años y quedé completamente solo, la única persona que no murió fue mi hermana Wanda pero ella tuvo que irse por un tiempo.

Me desvesti en la sala ya que me importaba muy poco que alguien me viera así, los rayos de la lunas traspasaban las ventanas y cortinas dándole un aspecto algo sombrío a la casa. Subí con cuidado las escaleras y fui directo a mi habitación, abrí el ropero y saqué un traje algo viejo completamente negro, saqué una mascara de un cajón lleno de candados.

- Hora de trabajar. - Susurré poniéndome la máscara y unos guantes negros.

Salí de mi casa con una mochila negra en la espalda, la soledad de la calle me hacia bien y me producía una sensación confortante. Caminé unas cuantas cuadras hasta quedar en frente de una casa aún iluminada y sonreí sin saber por qué.

Sería una mentira si dijera que en mí no había nada especial así que lo diré. No soy ningún mutante pero tengo "súper poderes" que puede servir para mi trabajo.

Trone mis dedos en un solo movimiento y di una pequeña carcajada. Salté la valla que había y subí como pude hasta una ventana cerca de la casa. Rompí en vidrio sin hacer mucho ruido y con todo el cuidado que pude. Sonreí al ver que había entrado en la habitación de mi víctima.