CLOSET 「Fonnie AU」

Seven

Bonnie se tambaleó hasta su habitación apoyado en la pared, abrió como pudo la cerradura y se adentró cerrando de golpe la puerta. Se tiró a la cama lo más rápido posible, pero su móvil comenzó a sonar en su bolsillo; gruñó y lo sacó para contestar torpemente.

-Holaaaaa- alargó lo más que pudo la "a" soltando una risa tonta luego de eso.
-¿Bonnie? ¿Estás ebrio?-
-Nooooo- otra risa tonta. -¿Qué quieresh?-
-Conejito...-
-No me lla... Llames ashi, imbeshil, yo ya no- hipó. -No shoy tu conejitooo-
-Mierda, Bastián, sé que estás ebrio y que últimamente te has estado drogando, no quiero que lo hagas, me preocupo por ti-
-¡Tú no te preocupash por mí! Si lo hicierash no habríash embarazhado a esa... Shica- gritó, cayendo de la cama. -Yo no voy a sheguir aguantando... Tu mierda... ¡Eshtoy harto!-
-Oh, vamos, sabes que lo del embarazo es falso-
-Ya no te creo, me has mentio tanto... ¡A la mierda con noshotros! Quédate con tu puta novia y tu puto bebé- cortó lanzando su móvil contra la pared.

Se arrastró por el suelo en busca de cualquier cosa, alguna droga, algo, pero no encontró nada, lo que lo hizo enfadarse más y comenzar a patalear para finalmente terminar levantándose y tirando los muebles. Gritó lo más fuerte que su garganta le permitió, también dio varios golpes a la pared hasta que fue capaz de calmarse un poco.
Cuando ya se le hubo pasado un poco más el efecto del alcohol, se dirigió al baño para refrescarse, llenó la bañera y se metió sin molestarse en quitarse la ropa. Poco a poco sentía como el cansancio lo comenzaba a invadir así que tiró la toalla al suelo y se recostó ahí mismo.

[…]

-Abre la boca, conejito- Bonnie obedeció y en su boca fue depositada una pastilla amarilla con una carita feliz. -Traga-

Volvió a obedecer, sólo que esta vez comenzó a besar desesperadamente al chico con el que estaba, yacía sentado en las piernas de su opuesto mientras este le apretaba los muslos. Gimió en la boca del de cabello oscuro cuando sintió su mano colarse en su pantalón e ir directamente a su entrepierna; no les importaba estar en un lugar público y a Bonnie en ese momento no le importaba que hubiese un pequeño grupo de fans detrás de él, grabándolo mientras se frotaba contra el otro chico.
Casi media hora después, Bonnie comenzó a sentir su cuerpo arder, sintió la necesidad extrema de ser tocado y su acompañante estaba dispuesto a ayudarlo. Fue guiado hasta la salida del lugar en el que se encontraban y sin importarle que hubiesen varios paparazzis atacándolo con los flashes de sus cámaras, se montó en el coche de su contrario. Después de eso, todos sus recuerdos se volvieron borrosos.

Se despertó en su cama, sintiendo como su cuerpo dolía horriblemente. Intentó sentarse, pero lo único que consiguió fue soltar un pequeño grito por el dolor que sentía en su parte baja. Se tapó la cara con las manos intentando recordar lo ocurrido la noche anterior, pero su cerebro sólo proyectaba imágenes borrosas, lo único que era capaz de recordar mejor, era él gimiendo abrazado a un extraño tipo... Tres extraños tipos. Gruñó cuando su móvil empezó a sonar igual de molesto que el día anterior, desbloqueó la pantalla y vio que tenía casi setenta llamadas perdidas de sus amigos y su ahora ex novio. La última llamada había sido hacía unos minutos atrás. Su tablero de notificaciones del móvil estaba lleno de menciones en todas sus redes sociales; abrió su facebook y quedó perplejo al ver que lo primero que le aparecía en el inicio era una noticia con una foto muy particular de él y uno de los chicos de la noche anterior. Había un vídeo adjunto que había comenzado a reproducirse sólo, logrando que todos los recuerdos de la noche anterior se vinieran mágicamente a la cabeza de Bonnie. Por una parte, comenzó a preocuparse por lo que dirían los demás, pero su otra parte estaba literalmente orgullosa de si mismo, le daba igual si Frank había visto el vídeo, las fotos o lo que sea, después de todo, su historia había acabado.
Sintió un nudo en su garganta al recapacitar y darse cuenta del daño que se estaba haciendo, de que había roto con Frank y de que se había acostado con tres tipos distintos en una noche. Estaba jodiendo su vida con drogas, alcohol y más por una estúpida razón. Su novio tendría un hijo con una chica que apenas conoce.

[…]

«Ojalá te mueras, perra»

«¿Embarazarte de uno de los chicos de la relación que apoyas? ¿Tú eres enferma?»

«Sabemos que ese hijo que esperas no es de Frank, deja de intentar retenerlo a tu lado, puta»

«Ojalá que en navidad te regalen dignidad»

«A tu novio le gustan los PENES, es GAY, ¿Recuerdas?»

Carrie limpió sus lágrimas cuando Frank entró en la habitación, ella no quería eso, nunca lo quiso y no se lo desearía ni a la persona que más odiase en el mundo. Cambió la página rápidamente cuando el pelirrojo se acercó a ella, haciendo como si estuviese concentrada en el juego que había puesto.

-El conjunto de la izquierda es el que sirve para obtener la cita con Castiel- la chica le dio clic sin mirar al pelirrojo. -Bonnie juega lo mismo, solía pasar toda la tarde gastando el dinero de su móvil para poder comprar PA's-

Carrie finalmente miró a Frank, profundas ojeras adornaban su rostro y todo él lucía más descuidado que nunca. Ella no quiso entrometerse y él no quiso decir nada. La chica se había enterado de lo ocurrido con Bonnie, pero debido al estado en el que se encontraba su amigo, no tocaría el tema.
Frank suspiró, dejándole su móvil a Carrie por si quería comprar más puntos de acción para el juego, mientras él iba a la cocina de su casa. Miró su brazo donde yacía el nombre de Bonnie escrito en Hylian y sintió como el dolor recorría todo su ser. Sin siquiera pensarlo, sacó sal y luego de encontrar una lija se encerró en el baño, comenzando a frotar fuertemente la zona tatuada, provocándose una horrible herida y que comenzara a sangrar bastante, pero sin importar nada, siguió raspando en lugar hasta que se desmayó a causa del desangramiento.