El amor siempre es cero

S i e t e

Brittany no estaba muy feliz después de lo sucedido en la cafetería y eso lo aseguro porque cuando salí de NYU ella estaba esperándome con una expresión molesta en su rostro recargada contra su auto y no me hizo falta que me lo dijera, yo ya sabía que debía entrar en su auto.

Ella condujo tranquilamente hasta Starbucks sin decir nada y al bajarnos fuimos directo al mostrador, yo pedí solo un vaso de café y ella pidió café con una dona, luego nos sentamos en unas mesas vacías.

- Me has secuestrado - Reí.

- ¿Por qué le dijiste eso a Sam ayer? -

- Porque... ¿qué más querías que le dijera? -

- Lo que sea menos eso -

- ¿Por qué te molesta, es más, por qué Sam no sabe dónde vives? -

- Eso no es tu asunto, no debiste hacerlo -

Torció el gesto - Hay algo que ocultas -

- Solo no quiero que sepa mi procedencia - Ella suspiró - Ahora tendré que llevarte a mi casa a ver una película

- No necesariamente, ¿sabes? - Ella levantó una ceja - Solo fue una excusa, ahora vamos a lo nuestro. Lo que sucedió

- Cierto - Bebió de su vaso de café - Escucha, Santana, solo sé que nos acostamos por exceso de alcohol y nada más. No vamos a hacerlo de nuevo

La miré fijamente y luego entrecerré los ojos.

- ¿Te gusto? -

- ¿Qué? -

- ¿Que si te gusto? -

Ella parpadeó confundida - ¿Por qué? -

- No lo sé. Yo no dejo de pensar en que me gustaría repetirlo -

- No voy a engañar a Sam de nuevo -

- Si lo piensas bien no es engañar porque Sam es chico y yo soy chica -

Ella me miró confundida aún más y creo que estaba molesta porque tomó su vaso de café y se fue de allí. Me maldije por ser tan estúpida y la seguí rápidamente, ella caminaba hacia su auto y yo se lo iba a impedir. La tomé del brazo justo en el momento en que iba a abrir la puerta y la acorrale contra la puerta.

En sus ojos pude ver algo brillar, algo que no tenía sentido hasta hace unos minutos, algo que no lo hubiera imaginado ni creído si no fuera porque lo he visto por mi cuenta. Una sonrisa socarrona se deslizo en mis labios. Podía sentir el aliento de Brittany sobre el mío, su rostro tan cerca del mío y también la sentía nerviosa.

- Tú quieres repetir - Dije con un deje arrogancia.

- No -

- ¿No? No te creo. Tus ojos se volvieron más oscuros cargados de lujuria -

Ella resoplo entre diente desviando la mirada. Quite mis manos de sus costados y la mire sonriendo, ella apenas sonrió porque intentaba no hacerlo y luego sacudió la cabeza.

- No quiero engañar a Sam -

- No tiene porque enterarse -

- Pero no está bien -

Me mordí el labio inferior. No hay forma en que yo pierda algo así. No sé por qué de todos modos me importaba tanto tener a esta chica, no es como si fuera... no lo sé, ¿una diosa? Pero admito que... ¡NO!

- Solo será sexo sin compromiso - Mis labios se movieron sin que pudiera procesar primero lo que estaba diciendo. Los ojos de Brittany volvieron a destellar y se volvieron oscuros por una fracción de segundos.