Narra Samuel:
Todavía no podía asimilar la situación, cuando mi abuelo me llamó de forma urgente por mi abuela, no pensé que estaría tan mal.
Ella estaba en cama, delgada y su rostro mostraba cansancio, me quedé a pasar la noche en casa de mis abuelos para poder estar más tiempo con ella, pero... no sirvió de nada... sufrió un ataque mientras dormía.
Mi abuelo estaba destrozado, yo me tragué todo el dolor para mostrarme fuerte ante él, si no lo hacía no tendrían sentidos mis palabras de aliento al momento de consolarlo, toda mi familia estaba tan impactada con la noticia que no había tiempo para ponerme triste, lo único que podía hacer era encargarme del asusto del velorio y demás...
Ahora que estoy enfrente de la lápida, me lamentaba todas las veces que no podía venir a visitarlos... estaba tan ocupado en mi trabajo que en varias circunstancias me veía en la obligación de no asistir en épocas importantes... la hubiera atesorado tanto... fue un gran apoyo cuando mis padres me dejaron a su cuidado, ella me escuchaba y me ayudó a salir de los problemas que me veía envuelto cuando joven.
El sol que caía lentamente, tocaba mi rostro como si quisiera reconfortarme antes de que se escondiera, había sentido tantos abrazos y lamentaciones por la muerte de mi abuela, pero no había nada que pudiese ayudarme a sacar esta tristeza que se encontraba atrancada en mi pecho.
Cada vez me sentía más sólo y perdido, la imagen de mi abuela que apenas ayer había visto, estaba pasando a ser un recuerdo más... uno que se me haría difícil soportar, después de todo... ella fue mi gran inspiración...
Mi cuerpo sintió un gran impacto que se aferraba fuertemente en mi espalda, era tan cálida y electrizante que solo venia a mi mente una persona... Guille...
Lentamente mi mano subió para encontrarse a lo que me estaba sujetando, eran unas manos grandes y ásperas, unas que antes ya había tenido el placer de tomar, al hacer contacto con ellas me sujetó rápidamente, como si me dijera que no me soltaría jamás... ante solo esa acción... mis lágrimas no pudieron evitar caer... había llegado a mi límite.
El funeral había terminado hace dos horas, pero jamás había llorado tanto como lo hice en estos minutos, como si tuviera de pronto el soporte que necesitaba para poder descargarme, los brazos mágicos que me consolaron de la nada, estuvieron sujetos todo el tiempo hasta que yo me pudiese tranquilizar.
Cuando al fin pude volver a centrarme, giré y me encontré a guille, así que si era él la persona que me abrazaba tan firmemente.
-¿Qué haces aquí guille?- pregunté algo decaído, todavía no me reponía del todo, pero me sorprendió bastante que él haya dado con mi ubicación, si no mal recuerdo... yo nunca le hablé donde estaba la casa de mis abuelos.
-¿Cómo que hago aquí? Vine a acompañarte macho... me dejaste preocupado cuando desapareciste de pronto... pero descuida, tomate todo el tiempo que necesites, yo estaré contigo- dijo mirándome fijamente a los ojos, sus mejillas estaban sonrojadas levemente y su piel brillaba por el ocaso.
-Bueno... tu desapareciste antes... ¿ya te encuentras mejor?- dije al recordar que no había hablado en días con Guillermo, después de lo de la cita y... la visita inesperada, Guillermo no había contestado a ninguna de mis llamadas y me dejaba preocupado.
-Sí, ahora eso no es lo importante Samuel... yo...- se detuvo un momento para buscar algo –que pringao soy... ¿Dónde lo dejé?- dijo después de darse cuenta que no llevaba nada encima.
-¡Willy!- una voz que se escuchaba a lo lejos venia a donde estábamos nosotros, era el chico que me había atendido en el café cuando me enteré de la mentiras de Guillermo... ¿Qué hace aquí?
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SU DULCE FRAGANCIA - fanfiction wigetta
FanfictionGuillermo era un chico normal que estudiaba en la universidad, ya estaba en esos años que debía buscar un trabajo y entonces salió a encontrar suerte, pero lo que no esperaba era que ese día sería víctima de un asalto, el miedo abundaba en el joven...