XV [L]

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Contenido explícito.

Esta vez sí que es de verdad.

— Lauren vamos a llegar tarde a la boda de tu hermano, mueve el culo —tocó la puerta del baño un par de veces Camila mientras seguía intentando verme medianamente bien en aquel crop top negro, la americana y el pantalón a juego... Iba muy emo, parecía que iba a un entierro, pero no, iba a la boda de mi hermano.

Salí del baño finalmente, tras haberme maquillado, y moví el culo en frente de Camila.

— ¿No ves que bien lo muevo? —bromeé guiñandole el ojo al ver la cara que puso al ver mi vestido.

Me llevé una mano a la boca para bostezar, impasible, y dejé que Camila se preparase en el baño. Lindsey llevaba un vestido rosa con un lacito en su pelo. Muy "Camila style".

— ¿Tú también tienes sueño, Joregui? —me preguntó la pequeña.

Asentí con la cabeza y dejé un beso en su frente cuando se colocó justo frente a mí. La subí encima de mi muslo y me abracé a ella moviéndome de lado a lado para mecerla... No sabía por qué hacía eso, pero simplemente lo hacía. Eran esas acciones que hacías sin ni siquiera pensar.

Camila tardó unos 10 minutos en salir, y Lindsey se quedó frita en mis brazos. Llevaba un vestido blanco precioso, además de una coleta a modo de tocado. Estaba bastante maquillada, parecía digna de una gala de premios. Sonreí y cuando vió que Lindsey se durmió su sonrisa se ensanchó.

— Déjala que duerma un rato —le pedí cogiéndola en brazos. Ella se abrazó a mi cuello y a Camila le señalé mi bolso con la cabeza.

Se acercó a su hija y le colocó un par de mechones detrás de la oreja y tras eso empecé a andar, abriendo la puerta con el codo dejando que Camila saliese primero para que me sujetase la puerta.

Salimos del hotel y esta vez fue ella quien me abrió la puerta del coche para que me metiese con su hija dentro, que seguía plácidamente dormida en mis brazos.

Camila vagó su mano por mi muslo, dejando pequeñas caricias en él mientras hacíamos el trayecto hasta la casa de mi hermano. Lindsey se despertó cuando el coche paró y no tardó en gatear hasta las piernas de su madre.

— Me da envidia, ella puede dormirse en cualquier sitio, yo que tengo sueño no me puedo dormir sin parecer una vagabunda —protesté con voz de niña pequeña.

— Aw Lauren... Venga, que luego te dejo dormir en mi hombro —bromeó Camila. Aunque si lo dijese en serio mira que no me lo pensaba dos veces.

Abrió la puerta y salimos las dos encontrándonos con todos los invitados en el jardín delantero de la casa.

— ¡Lauren! —exclamó mi madre.

Me acerqué a ella y la abracé. Desde que hablé con ella al salir de la clínica de desintoxicación teníamos una buena relación, por fín había entendido que su pareja le hacía feliz. Al principio me comporté como una egoísta al haber antepuesto a mi padre a la facilidad de mi madre para pasar página. Pensé que lo hacía porque nunca lo había querido, pero en realidad no era así, precisamente pasó página porque papá se lo dejó bien claro siempre. Él sería una estrella, su estrella, y siempre estaría ahí para protegernos, a todos, aunque fuese desde el cielo.

— Te echaba de menos, mamá —dije sobre su hombro.

— Deberías venir más a California, te sienta bien el sol.

Solté una pequeña carcajada y negué con la cabeza haciéndole un gesto a Camila para que se acercase.

— Camila, esta es mi madre Clara. Mamá, esta es Camila, y su hija es Lindsey.

Instant Chaos [Camren]Where stories live. Discover now