30 días de FredSagi.

day 6

"¡Freddy!" —una chica de cabellos azules había entrado a la habitación de su novio. su suegra se lo había permitido, después de ofrecerle galletas, claro.

la chica inspeccionó la habitación, definitivamente el castaño no se encontraba en el lugar. Pero encontró una pequeña nota pegada en el escritorio del chico.

"Usagi, como sé que entraste a mi habitación cuando te dije que no lo hagas, decidí escribirte esto. tengo ensayo con los chicos, llegaré como a las 6, te quiero. -Freddy"

ella sonrió, ¿acaso era demasiado predecible o su novio era muy inteligente? usagi se recostó en la cama, ¿y ahora qué? iba a esperar 2 horas más.

"¿Qué habrá por aquí?" —la peliazul caminaba por la habitación.  fotos del chico de bebé, de cumpleaños, una de ambos y de él junto a su banda. pósters, su laptop, libros, entre otras cosas.

pero algo llamó la atención de la chica, las orejas de oso del chico.

ella corrió para tocarlas, eran tan suaves. chica era una muy buena costurera, la peliazul pudo imaginar que sentía un oso de verdad. abrió su armario, el cual contaba con un espejo dentro, y se colocó las orejitas.

"Como toda una Fazbear" —ella rió, pero había algo que faltaba, la camiseta de color negro y la corbata en forma de lazo que el chico iba a vestir en la competencia.

abrió sus cajones en busca del traje, examinó en cada esquina hasta que lo encontró. procedió a sacarse el suéter color lila que llevaba puesto para cambiarlo por el traje.

"tal vez me quedaría mejor si fuese castaña" —dijo al ver su reflejo.

"¿Usagi" —ella dio un pequeño salto por el susto, ¿desde cuándo Freddy estaba allí?

"¿¡Qué haces aquí!?" —ella se volteó, completamente avergonzada.

"¡Vivo aquí!" —dijo él, entre risas, mientras que ella se retiraba las orejas y buscaba su suéter.

"No es lo que parece" —dijo ella al intentar defenderse.

"Claro" —respondió sarcásticamente.

la morena se puso el suéter encima, agarró su bolso y se dirigió a la puerta. el castaño, al darse cuenta de que ella no se había sacado su traje, dijo —"¡Oye! ¿a dónde crees que vas con mi polo?"
"Nos vemos mañana"