CAP. 37 [~*Vidas Distintas *~]
___: Tom espera
TOM: ¿Qué pasa?
___: es que…
TOM: ¿ya no te gusta?
___: no es eso
TOM: ¿entonces?
___: es que yo…
TOM: ¿tú?
___: Tom yo te…
Tom me volvió a callar con un beso, pienso que sabe lo que quiero decir y me lo impide apropósito, quizás solo quería conocer a los niños y ya, jamás ha pensado en volver conmigo o darle su apellido a los niños. Son expectativas mías, falsas ilusiones que me hacía antes de tiempo la noche que pasamos en la sala de espera creaba mi vida perfecta con él y los pequeños, algo que solo estaba en mi imaginación. Solté su cintura y quite sus brazos de mi cuerpo, el valor se había ido en menos de un segundo y se había demorado meses en salir.
TOM: ¿Qué me ibas a decir?
____: nada no te preocupes
TOM: -jalo mi mano- hablaremos más tarde este no es lugar, tenemos muchas cosas pendientes y quiero que todo se solucione
____: -sonreí- claro más tarde
TOM: -mirando la hora- voy a llamar al colegio, me reportare enfermo
____: es un irresponsable profesor Kaulitz
TOM: y la Srta. Schäfer también falto a clases, mañana me debe llevar justificativo
____: mi hijo acaba de ser operado no iba a ir a escuchar los aburridos sermones de los profesores teniendo a mi pequeño enfermo
Tom iba hablar cuando la puerta se abre eran mis padres con la pequeña Dayán ella al verme corrió hacia mí y se lanzo sobre mí.
ANTONELLA: mi vida, ¿Cómo está Dylan?
____: está bien mamá
PETER: mi pequeño nieto
Dayán subió a mis brazos mientras mis padres iban con Dylan, ni siquiera tomaron en cuenta a Tom, los tres salimos de la habitación y Tom miraba a Dayán con una sonrisa en los labios.
____: ella es Dayán tu hija
TOM: lo sé
Le di a Dayán en sus brazos él la afirmó y dejo un beso sobre su mejilla, la pequeña quería salir de los brazos de Tom con la desesperación no supo nada más que hacer y le dio una cachetada a punto de romper el llanto. La tome rápidamente para que no llorara mientras Tom sobaba su mejilla.
TOM: eso me lo merecía pero ¿tan pronto?
____: Dayán mi vida, él… él es tu papá mi amor no tienes que tenerle miedo no te hará nada malo
Dayán ocultaba su rostro entre mi cuello y puso sus pequeñas sobre mi pecho intentando aferrarse de algún modo para sentirse protegida. Al parecer a Dylan no le había costado tanto acostumbrarse ya que se quedo con él sin problemas.
TOM: Dayán, pequeña mírame
Tom tocaba su espalda mientras le hablaba ella se retorcía para ocultarse no quería tenerlo cerca.
TOM: es inútil me detesta
____: es pequeña y nunca ha tenido contacto con extraños
TOM: pero yo soy su papá no un extraño