¿Qué Culpa Tiene Amy? ଽ Sonamy ©

Bölüm 2: Secuestrada

La tarde había caído harán las 5:00 p.m, Sonic se fue al sofá esperando a que Amy (Annie) despertara, encendió el televisor  por mientras. Y miró las noticias, o buscando algo en que perder el tiempo. Esa era la parte más molesta para él. El tener que esperar. 

(...)

Ella se quejó. Lentamente fue despertando recobrando su sentido. Cuando lo hizo se levantó de un tirón mirando a todos lados, perdida — ¿Dónde estoy? — moduló, y se sintió extraviada. No reconocía ese lugar —. ¿Huh? —se levanta de golpe de la cama y grita—. ¡¿Dónde estoy!?

De inmediato recordo como una voz la había llamado, después de esto todo fue oscuridad para ella. No entendía, solo sentía una descarga de miedo institivamente.

Finalmente entendió que había sido secuestrada.

«Piso abajo»

Sonic escucha la voz de ella, exclamando y piediendo a gritos mientras golpeaba con los puños la puerta, apagó el televisor y se dirigió a rápidas zancadas al segundo piso.

Amy» 
»Siento graves presentimientos en mi interior. Siento que nada está bien. Siento que es mi fin de mi historia. Porque no conozco ni una esquina del lugar; ni tampoco reconozco que alguien intente hacer una especie de broma pesada.

— Q-quien ¿¡Está ahí!?...¿Rouge? —dudaba obviamente que se tratase de una broma o de una de sus amigas. Definitivamente no tenía idea de a quien le pertenecía esa habitación.

—¿Puedo pasar, Annie Hazer?— dijo desde el otro lado de la puerta, dando toques en la puerta. Después de esto, ingresa la llave y gira la perilla de la puerta.

»¡Dios Mio!¡Auxilio! Quería gritar, La voz de un hombre fue la que escuche miraba a mi alrededor, ¡Una salida! ¡Una salida Por favor! Obviamente no era una voz de un chiquillo, si no que si se escuchaba un tanto masculina e imaginé que sería un hombre mucho mas mayor que yo y me haría daño... Hasta que entró, estaba tan nerviosa, era alto, pelaje azul, estaba oscuro aquí, pero podía verte, lo pude ver...»

—Hola ¿Qué tal?—cerró la puerta del cuarto tras él. La vió ahí, una chiquilla rosa, temblando de miedo en una de las esquinas del cuarto.

Entró de golpe, ya no podía resistir estar lejos de su lado, algo quería, ¿Por qué lo hizo? Este se acerco a Amy. Ella solo lo podía ver, absorta de todo, sin imaginación de lo que iba a suceder.

— ¿¡Quién eres tú?! — le gritó — ¿¡Qué carajos quieres de mí?! — Retrocedió más, pegó con la pared —¡N-no te acerques!

—¿Por qué?

—¡¿Qué quieres de mí? ¿¡Por qué estoy aquí!?,Te daré todo lo que quieras, pero por favor, — le suplicó—. ¡Dejame ir!

—Aún no quedamos en nada. ¿Te gustaría empezar por tu nombre? Ya me lo sé, pero deseo asegurarme.

—Amy..Rose.

La chispa de Sonic desapareció, se supone que era la mismisima Annie. Metió la mano en su bolsillo. Detrás de la foto, decía el nombre que necesitaba.

—Eso es mentira, —leyó por última vez el nombre y tiró la foto al suelo, reclamándole como si hubiera sido su culpa— ¡Eres Annie Hazer!

Los ojos de Amy se abrieron aún más.

—...Annie es mi compañera de instituto, mayor que yo. Yo soy Amy. —el miedo hizo que solapara la información de su compañera en tan solo un tirón.

Sonic chasqueó la lengua, y corrió hacia ella, alzando su cara y ver sus ojos se cerca.

Eran verdes.
La soltó, ella se asustó. Pero no dijo nada más.

—Joder..—suspiró a sus espaldas de ella— abre tu bolsa —señaló la mochila.

Amy corrió sin pensarlo y la abrió.

—Quiero ver tu credencial de estudiante.

De pronto se le hizo menos malo, solo por eso. Suerte que traía una tarjeta de la biblioteca con su nombre y fotografía.

Estiró su mano hacia él, y Sonic tomó la tarjeta de su mano.

La leyó.

—...Amy Rose —y su nombre se quedó en el aire.

La miró por un largo rato. Solo se escuchaba el sonido de sus respiraciones por parte de ella. Observó que juntó sus palmas, como si estuviera orando por su bienestar.

Sintió lástima y vergüenza por confundirse. Por primera vez, había fallado. ¿Qué iba a decir el jefe? ¿A quién matarían primero?

No sabía que hacer.
Y tuvo tres opciones en su mente;
A) Regresar a la chica de vuelta.
B) Entregar a la chica al jefe y decirse que fue su error de él.
C) Entregar a la eriza como si nada al jefe y que él hiciera con ella lo que quisiera.

La única más sutil fuera la primera. Pero si lo hacía; implicaría que su nombre y su casa fueran descubiertas por autoridades.

—Por favor...¿Puedo irme? —finalmente habló ella, y vió una lágrima asomarse.

Sonic mordió su mejilla inferior. Tenía su cabizbajo, pensando en cuál había de ser su respuesta correcta.

—No me será tan fácil soltarte. Ahora que sabes que el del error eh sido yo.

Fulminante. Él la miró y parecía que le reprochó sobre ella todo el odio.

—¡No diré nada a nadie!

—Sí, seguro. Te quedarás aquí por esta noche. Mañana veré qué hacer contigo.

La esperanzas de ella se cayeron al suelo.
Y no dijo nada más.

Sonic salió del cuarto.
Y ella se quedó en su lugar.