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Nunca he sido afectiva, es difícil para mí sentir algo por alguien, puesto que el amor verdadero no lo conocía, solo el de mis padres, ellos si me daban mucho amor pero no era lo mismo, saben ser universitaria es difícil, estudio diseño gráfico, las tareas, proyectos y todo eso no son peor a cuando te enamoras de quien nunca te hará caso, una historia extraña y divertida acaba de comenzar.

Bienvenidos a una historia de amor o algo parecido, soy universitaria, fría y seca, además muy sincera, un mar profundo como tormenta soy, no soy única y diferente, pero me gusta vestir de negro muy seguido, creo que esa es mi característica principal además de ser delgada y alta, soy muy fácil de percibir, mi grupo era pequeño y todo empezó ahí en mi grupo, una chica como yo no se enamora fácil, sinceramente me daría lastima si alguien se fija en mí, y se oye grosero, pero es la verdad; recuerdo cuando estaba en el kínder y un chico me dijo te quiero, no supe cómo reaccionar y lo empuje por las escaleras, no eran muchas pero si le dolió y sí, sigue vivo y aun lo recuerda, imagínense que me enamore, la verdad no sabría cómo abrazarlo o querer besarlo, o que hacer cuando salgamos.

Me gusta el color negro, escuchar rock y además me gusta las cosas de terror, y no soy emo, ni dark, punk o esas etnias que crearon la sociedad, solo soy yo, una chica alta, alocada y sincera, el estar en la universidad hizo que pudiera ser un poco más yo, por así decirlo demostrar que soy, como dije no soy afectiva y aun así no logro entender como le puedo gustar a alguien, antes me gustaban las cosas cursis, el amor, ahora solo me dan flojera.

Ver parejas besándose es repulsivo, la verdad cuando tuve novio no lo besaba mucho, mucho menos lo agarraba de la mano, salíamos y parecíamos amigos, si a veces puedo ser detallista pero no cursi, eso no va conmigo.

Caminaba por el pasillo de mi facultad para llegar al salón, mi facultad es grande y verde, tiene muchos árboles de diferentes colores, formas y tamaños, conocía a todos los bobos compañeros, y a mis amigas, primeros días y ya me caía mal alguien, para ser precisa 1 persona, que puedo apostarles también la odiaran.

En fin, me senté hasta atrás con mis amigas, y si, yo consegui amigas en el primer día y que hasta ahora están conmigo; en el salón era conocida por ser fría y directa, una de mis compañeras me tenía miedo, mientras que las demás me respetaban, y otras les caía mal, la verdad me importa poco que piensen de mí, clase de matemáticas aburrida y tediosa clase, la maestra era buena dando la clase pero la verdad era mucha teoría que procesar, así que me puse a mensajear con mis amigos sin que la maestra se diera cuenta, nos expuso que veríamos y nos fuimos.

Mis amigas y yo hablamos sobre películas de terror, y películas de acción mientras comíamos en la cafetería, así pasaron las horas, hasta que nos fuimos cada una a nuestra casa, era viernes y tenía que conseguir unos materiales para unas clases, el fin de semana se pasaría rápido y tendría que ir mañana al centro a comprar todo.

Decidí ver una serie en mi celular, mientras me daba sueño, total se hicieron las 3 am, y yo seguía picada con la maldita serie que ni me di cuenta que había perdido el sueño. Me dormí bueno total no dormí bien, toda torcida me desperté a las 8am, porque mamá me despertó para desayunar y limpiar mi cuarto como todos los sábados, 5 horas dormí, maldito zombi parecía con mis ojos rojos y mi saliva seca, y mi cabello despeinado.

-Si no estuviera acostumbrada a verte así ya hubiera gritado- dijo la tierna y graciosa de mi madre que me abrazaba, mientras yo le daba palmadas en la espalda para que me soltara, fui caminando a pasitos lentos hacia el baño y justo cuando me senté a orinar, tocan la puerta para que me apure, ósea no pudieron despertarse antes, tenían que ir justo a molestar cuando acababa de entrar, en fin, respire hondo, y me apure salí y cepille mis dientes y me peine, fui a la mesa y comí un plátano, eran ya las 8:30 am, ósea demasiado temprano para mí, me senté en el sofá y tome el periódico, y apenas vi el titulo me empecé a cabecear, y cuando menos lo pensé me quede dormida.

Desperté por los regaños de mi madre. - ¡Ya son las 11 am! ¡Levántate Evey! - me gritaba mi madre, me rasque los ojos y me levante corriendo a arreglar mi cuarto, y a bañarme ya que tenía que ir temprano a comprar las cosas, baño rápido y tome lo primero que encontré y me fui.

12:30 am, y el calor estaba horrible camine rápido por las calles para entrar y salir de papelerías, el dinero poco a poco se acababa, y mis ansias de comer llegaban de nuevo y es que cuando tengo dinero en mis manos me dan ansias de gastarlo en comida, además de que en el centro de la ciudad hay muchos puestos de comida, tiendas y vendedores ambulantes que veía por toda la calle, hacía un calor infernal, fui a la última papelería y compre lo que me falta y camine hacia una tienda por una coca de lata.

Salí rápido para tomar el carro de ruta a mi casa, me puse mis audífonos y subí al carro, salude al chofer como es costumbre, y subí la música para no oír las tontas platicas de los pasajeros con quienes compartiría el asiento, me gusta la vista de la gente cuando estas en un carro, es como ver todo en cámara lenta y rápida a la vez, como si adelantaras una cinta de cine, el sonido del viento con el contacto de la ventana donde iba y el calor combinaban tan perfecto al ritmo de la música. Admiraba a todo tipo de personas que veía en la calle, de todos gustos y sabores había, la gente era pasajera, algunas caras felices y otras tristes, el camino se pasó rápido hasta llegar a casa.

Camine una cuadra y gire hacia mi casa, corrí por las ansias de sentarme en el sofá con el ventilador prendido, estaba sudada y agitada y con tarea que tenía que hacer además tenía que limpiar mi cuarto, la verdad salir de la casa me relajaba un poco, ya que todo el día estar encerrada y solo iba a la universidad y a casa era difícil para mí. Las horas pasaron rápido termine la tarea y me puse a ver TV, como siempre los sábados aburridos de series como Unidad de victimas especiales, que vería con mi pesada hermana en el sofá caluroso de nuestra sala, el sol desaparecía en la cortina que estaba en la sala, el viento movía la cortina y la oscuridad aparecía de nuevo, un clima perfecto para ver algo de terror dije para mí, pero sabía que no podría hacerlo ya que mama estaba en casa y ella no le gustaba eso.

Me dormí temprano, mañana era domingo y tenía que despertar temprano para ir a la iglesia en la mañana y como todos los domingos ir a comer con mi familia, me dormí, mi sueño era negro y el clima se sentía pesado, la verdad no recordaba mucho y despertaba a las 3:00 am, sudada y agitada, supongo otra pesadilla que no recuerdo, la puerta de mi cuarto no ayudaba mucho, ignore la oscuridad que se veía en la puerta y me di la vuelta y volví a dormir.

9:30 am, ya se me hace tarde para bañarme soy la única que falta para irnos, me metí a bañar rápido, y busqué algo decente que ponerme ya que los colores negros que tenía mama no se acostumbraba a que los usara en la iglesia, me puse un vestido negro con blanco para no quitar la costumbre, y me medio peine, salí a prisa y me subí a la camioneta.

12:30 am, se acaba la reunión y es hora de comer, puse mis audífonos en mis oídos y me puse a escuchar a Fobia para imaginar un poco en el camino al restaurante donde iríamos a comer, mis hermanos peleaban un poco y mama y papa se ponían a platicar sobre cosas personales que no alcanzaba a entender, así que subí la música y me dispuse a disfrutar.

Se me hizo eterna la comida, y sabía que por ser domingo saldríamos a alguna aburrida tienda a ver ropa o comprar algo de nieve, la verdad solo iba por la rica comida que podía comprarme mi papá, imaginaba que me compraría y mi cara de felicidad aumentaba,; la verdad a veces me aburría mucho porque no comprábamos nada o mamá terminaba en la tienda 2 horas y nos fastidiábamos mucho, compré la nieve y me senté con mi hermano esperando a los demás, tenía un poco de tarea que tenía que terminar y nos fuimos a casa. Al llegar corrí a la computadora y me puse a avanzar las clases eran pesadas, y eso que ya era un mes y tenía que acostumbrarme, mañana es lunes y tengo que arreglar todo, sabía que algo bueno sucedería.

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-Hk

Relativamente enamoradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora