Lyann es el alfa de la manada Luna de Sangre es muy cruel, posesivo, agresivo y fuerte. Todos le temen y lleva 235 años en busca de su "Luna", pero ¿Cómo reaccionará al ver que su mate es una omega? ¿Qué secretos guarda?
Courtney es una "omega" de...
Hoy llegaba... Me levanté temprano para que mi manada empezará a preparar las casas donde se hospedaría la manada de Courtney.
¿Todo listo Ethan? - le pregunté por nuestra conexión Alfa-beta.
Claro Alfa.-
Ven a la oficina.- dije
De acuerdo Alfa.- corté la conexión.
No habian pasado ni cinco minutos que ya tenia a Ethan frente a mi. A distancia podia escuchar su respiración agitada por lo que me imaginé que debió haber corrido. Reí.
-¿Ya están listas las casas?.- pregunté
-Todo listo Alfa. Se supone que lleguen pronto.- dijo confiado.
-¿Ya revisaste los límites de nuestro territorio?.-
-Si no hemos visto ni un solo vampiro lo cual es sospechoso.- él tenia razón algo tramaban.
-¿Lograstes verificar si se ha vuelto a saber de Zack?.- ese tema todavia no lo habia dejado pasar por alto. Él debia ser un rogue y ellos son vengativos.
-Nada aún seguimos atentos a cualquier sospecha alfa.- la puerta de mi oficina se abrió suavemente no sin antes escuchar unos pequeños golpes en ella.
-Alfa ya la manada Luna Azul llegó.- dijo Esteban de manera alegre lo cual me causaba irritación.
-Puedes retirarte.- dije de manera brusca.- Ethan vigilalo bien, no quiero que este mucho con Courtney.-
-De acuerdo alfa.- Ethan y yo salimos justo en el momento en que la camioneta negra Land Rover se estacionó frente a mi casa.
De esta salió Courtney con un pequeño vestido azul que se ajustaba a ese magnifíco cuerpo suyo y dejaba ver esas piernas de diosa. Tenía una bufanda negra alrededor de su cuello, gruñí, amaba besarla ahí y ella lo habia cubierto probablemente de mí.
-Bienvenidos de nuevo.- vi que todo su cuerpo se tensó al escucharme, lo cual me hizó sonreír. Vi que llevaba puesto mi collar.
Miré al lado de ella y estaba el idiota de su beta Daniel, Dereck el vampiro, una chica que no reconocí y April, la bruja que tenia encerrada en mi mansión, eso hizó que mi cuerpo se tensará.
Miré a mi lado y vi que Ethan estaba sumamente quieto pero podía escuchar su corazón acelerado, miré en la dirección que sus ojos apuntaban y vi que su mirada estaba puesta en la chica de cabello castaño al lado de Courtney.
-Gracias alfa Lyann, ellos son Daniel; mi beta, April, Dereck y ella es Sasha, la hermana de mi beta.- dijo Courtney apuntando a cada uno y podía escuchar a Ethan gruñiendo al escuchar el nombre de la chica.
-Un placer. Pasen les mostraremos sus habitaciones.- cuando ellos entraron agarré del brazo a mi beta.- ¿Qué te sucede?.-
-Ella es mi mate.- dijo sonando tenso.
-Yo que tu tendría cuidado es la hermana de Daniel, el beta de Courtney y no creó que este muy de acuerdo con eso. Además no quiero problemas.- dije usando mi voz de alfa.
-De acuerdo alfa.-
Entramos y todos se encontraban de camino a sus habitaciones pero logré detener a Courtney antes de que subierá al segundo piso.
-Yo te mostraré tu habitación.- le enseñé mi mejor sonrisa y vi que todo su cuerpo tembló.
-Espero que ésta habitación tenga ventana.- dijo con sarcasmo. Esa boquita suya tan valiente. Reí.
-Claro mi Luna.- hizé una pequeña reverencia y escuché una risita nerviosa proveniente de Courtney.- ven por aquí.- subimos las escaleras y la guie por el mismo pasillo por el que la llevé cuando la traje aquí por primera vez.
Pasamos por la habitación donde la tuvé encerrada y mi estómago se encogió de solo recordarlo y pudé escuchar los latidos fréneticos de Courtney. Estaba asustada y era mi culpa.
Me detuvé y me giré para verla sus ojos estaban cristalizados probablemente recordando todo su dolor y saber que yo era él causante me hacia querer darle para atrás al tiempo y remediar cada momento horrible por el que la hizé pasar.
Me acerqué a ella y pase mi mano derecha por su mejilla. Ella se tensó con mi tacto y eso hizó a mi lobo gruñir, no quería que me tuviera miedo. Mis ojos hicieron contacto con los suyos y pude ver el dolor que ella estaba sintiendo. La abrazé con delicadeza y besé su hermoso cabello rojizo.
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-Perdóname mi bella Luna.- inspiré su colonia y ésta era diferente.- Tienes un aroma extraño.- ella me miró y pude sentir que estaba nerviosa, se alejó unos pasos de mi.
-Quizás porque ya no hay ninguna conexión entre nosotros.- auch sentí mi lobo gruñir de rabia cuando mencionó eso. Me giré y seguí caminando hasta que dí con su habitación la cual estaba a una puerta de la mía y no es que fuera coincidencia.- Aquí dormirás.- mi voz sonó tensa. Ella asintió y yo me marché.
Al bajar me encontré con Daniel éste me miró con rabia. Lo ignoré, no tenia ganas de discutir con alguien más. Llegué hasta el patio trasero donde estaban mis guerreros Deltas entrenando.
Me quité la camisa, esperaba entrenar un rato para liberar mi enojo. Me acerqué a un pelirojo bastante alto pero no tanto como yo y lo derribé con solo dos puñetazos. Sonreí victorioso.
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