Fútbol y moda
¿Qué tienen en común?
En realidad, nada, son ramas totalmente distintas que no suelen compararse o pensarse en el mismo contexto.
Pero en este caso, demasiado está sobre la mesa y nada podrá evitar que se encuentren.
Harry se dio a la tarea de investigar sobre el chico del partido. Y su solución fue Google.
Obteniendo miles de fotos de las cuales se robó una buena parte, sólo de las que no tenía uniforme. Y una en especial que dejó como fondo de pantalla, simplemente era él como cualquier ciudadano.
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Varias redes sociales aparecieron en el inicio y no dudó en seguirle, sólo en las que estaban verificadas, ya que se dejaron ver varias fanpage. Quizá no era buen momento para obsesionarse y tenerlo como ídolo, pero sus ojos y la curiosidad valían la pena.
Así que la próxima vez que vio a su padre en el sofá, con el televisor transmitiendo un partido de Manchester City se sentó a su lado, su padre palmeó su hombro con una gran sonrisa y él trató de entender el partido.
La vida por fin dejaba de darle la espalda, empezando por su padre, que ya no estaba de mal humor siempre, se podían tener comidas normales en casa y el ambiente tenso era cada vez más ligero.
Por otro lado, en el instituto se inició un concurso de decoración, los estudiantes se dividieron en dos equipos y era parte de la calificación por lo que su padre no pudo protestar, de igual manera el premio era que quien tuviera más creatividad podría hacer que su trabajo fuera realizado en un evento, aunque no revelaron que tipo de evento, sólo dijeron que era algo formal, como si fuese de negocios pero más aligerado. A Harry le bastaba con esas señales.
Hasta ahora todo iba bien con su equipo, en realidad todos aportaban muchas ideas y siempre se buscaba la manera de incluir todas. Eligieron a Harry como director del proyecto ya que tenía una fluidez genial y acomodaba las ideas muy rápido a comparación de los demás. Ese era su fuerte.
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—Amor por favor— Louis caminaba tras el joven por los pasillos de su hogar.
—Estás muy mal si crees que va a ser así de fácil— volteó a verlo bruscamente. Se había desatado un lío en el recinto gracias al internet. Ya que algunos publicaron un vídeo de como Louis sonreía y veía interesadamente a un chico en la tribuna, lo que no descartado como coqueteo por las personas entre ellas Troye.
—Troye, sabes que es imposible, es un fan— lo tomó de la cintura intentando robar un beso de sus labios, fallando cuando el contrario lo esquivó.
—No, sé que no es cierto, te conozco— Louis hizo un puchero aún sin soltarlo. En cambio el rizado no cambió su gesto y eso hizo que Louis rodara los ojos.
—Okey, lo vi antes— se rindió, Troye frunció los labios pero no se movió —Fue algo de nada, él estaba fuera de la casa de Zayn, ya pasó mucho de eso— el otro dudó en si preguntar lo que quería, pero finalmente lo hizo.
—¿Qué hacía fuera de la casa de Zayn?— Odiaba actuar de esa manera, pero Louis era guapo y además famoso, debía protegerlo.
—No lo sé. Sólo estaba ahí, sentado— Se encogió de hombros.
—¿Y hablaste con él?
—No en realidad, sólo pregunté si estaba bien. No parecía estarlo— Recordó la expresión del muchacho aquel día y no pudo evitar el gesto de lástima en su rostro.
—Está bien, pero ¿Desde cuándo te interesas en una persona que no conoces?— Preguntó ahora aceptando en beso de su novio.
—Vamos, tengo corazón, el chico estaba solo llorando y era Navidad—Por un momento Troye se arrepintió de creer en el internet y le dio una leve sonrisa a Louis dando por hecho que no estaba enfadado.
—Lo siento Lou, me da miedo perderte— Louis le devolvió una sonrisa enternecida y lo besó de nuevo.
—Sabes que eso nunca va a pasar.
—Lo sé amor— Respondió entre besos —Vamos a mi habitación.
Y mientras subían las escaleras Louis lo pensó ¿Nunca pasará?
