Capítulo 9 "¡Despierta!"

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Entre a mi habitación, la noche había sido devastadora, Rob había dormido en mi cama, pero no había dicho una sola palabra, aún recordaba su mirada de miedo, y me aterraba pensar que quisiera irse, me senté a su lado y lo mire detenidamente. 

Pasaron unos cuantos minutos cuando el despertó, me miró, pero no decía nada.

-Dijo algo por favor. -dije exasperada.
-Es que no tengo nada que decir. -explicó.
-Dime que era lo que pensaste cuando paso todo eso anoche, cuando te vi tenías una mirada de miedo. -dije asustada de su respuesta.
Rob se quedó pensando unos segundos.
-Muchas veces he pensado que esto no va a funcionar, y hasta he pensado irme por mi cuenta, y ayer te vi siento tú, un vampiro salvaje y jamás podré ser como ustedes, pero... Te amo y me preocupa el dejarte ir, así que llegue a la conclusión de que jamás podré dejarte Ema, una vez ya te deje ir y no volverá a pasar, no importa quien se interponga entre nosotros, siempre encontraremos una salida, Te amo Ema Brooks.
Rob se acercó a besarme sin dejarme que contestará algo.

*****

PAUL

Era de día, a pesar de que estaba muy oscuro en la bodega a lo lejos podía ver la luz del día, Emily estaba en mi hombro dormida, no paro de llorar hasta muy noche culpándose, no sabía de qué ya que solo me contó que ya sabía que éramos vampiros. Genial.
-Tengo frío. -se quejó.
-Aléjate un poco de mi cariño, yo estoy demasiado frío. -dije dulcemente.
Emily me hizo caso, se alejó un poco de mí, quería tomar su mano, pero ambas estaban amarradas con cadenas, Emily también estaba amarrada, pero con grandes cuerdas.
-Cómo paso esto. -pregunto Emily.
-No lo sé, ayer cuando estábamos en la cocina escuche un ruido, entonces fui a ver que era cuando varios vampiros me atacaron, me fue imposible defenderme. -expliqué -¿y cómo fue que tu llegaste aquí? -pregunté.
-Anoche Ema me contó la verdad o parte de ella, esta confundida y aturdida, creí que necesitaba pensarlo un poco, así que hice una maleta y me fui, cuando estaba entre los arbustos algo paso golpeándome lo suficientemente fuerte, pues me desmaye y cuando desperté ya estaba aquí. -explicó.
-Saldremos de esta Emily. -asegure.
Emily sólo asintió con una media sonrisa, pero sus ojos ya comenzaban a llenarse de lágrimas.
No la culpaba, yo también quería llorar, no había comido en los días anteriores y eso me volvía vulnerable a la sangre de Emily y también me había debilitado por completo.

*****

EMA

-Tengo que ir. -dije segura.
-Ema no, es lo que quiere Esteban. -se quejó Rob.
-¿Que más podría hacer? Está pasando todo esto por mi culpa y tienen a Paul y Emily, saben que son de las personas que más quiero y que más me importan. -reconocí.
Estábamos todos, mis padres, mis tíos y Rob tratando de hacer un plan para recuperar a Paul y posiblemente a Emily.
-Tengo una idea. -dijo Orlando. -pero no les gustará. -dijo refiriéndose a mis padres y a Rob.
Todos se miraron entre sí y Orlando comenzó a contar en plan. Era demasiado simple, pero teníamos que hacerlo bien, un pequeño error y todo se acaba pues sabíamos que tenía más vampiros de su lado.
-Esperare a que llame. -dije.
Pasaron unas cuantas horas cuando el teléfono sonó, era él. Quería que fuera a un pequeño parque, estaba lejos, pero mis tíos sabían que nadie pasaba por ahí. El lugar perfecto. Pero también sabían que cerca de ahí estaba una pequeña bodega abandonada, seguramente ahí estaba Paul y Emily.


*****

Tomamos todo lo necesario, comida para Emily, mantas y aunque era un poco asqueroso, llevaba un poco de sangre para Paul. Todo eso lo metimos al carro de mis tíos.
Subí a mi carro y me fui para donde me había pedido, tal como lo pensamos vampiros me seguían, según mi padre eran alrededor de 4.
Quince minutos después salieron los otros, por diferente camino para que no los descubrieran, pero el camino era más corto así que ellos llegarían primero.
Después de casi una hora de conducir llegue al lugar, efectivamente era un pequeño parque, pero estaba casi pegado al bosque y si, también estaba muy sólo.
Baje y cuidadosamente comencé a caminar.
-Hola Ema. -dijo Esteban.
-Esteban. -dije fríamente.
-Me sorprende que hayas venido sola siempre te sigue toda tu familia, pero será mejor así no verán tu muerte. -dijo entre dientes.
Mi muerte. Repetí dentro de mi cabeza.
-Al grano Esteban. -dije rápidamente.
-Quisiera que todos mis amigos vieran esto.
Del bosque salieron alrededor de 20 vampiros, entre ellos venía Anne, Ivan y Alex.
Solté un gritó ahogado, no porque fueran ellos, sino porque ya no eran humanos. Si, eran vampiros.
Todos se pusieron del lado de Esteban dando la espalda a la pequeña bodega, perfecto.
A lo lejos pude notar como pasaba corriendo Orlando y mi padre.
-Al fin Ema, podré vengar a mi amada y al chico que mataste ayer. -dijo Esteban.
Quería poner atención a lo que decía Esteban pero pude notar que a lo lejos llevaban en brazos a Emily, y Paul apenas podía mantenerse de pie.
-Bueno, de hecho ya estábamos a mano. ¿En serio Ivan? -pregunté.
-Ema, yo te quería, pero tú a mí no y solo jugaste conmigo, me quería vengar. -explicó.
Negué con la cabeza.
Era la hora tenía que echar a correr, de un golpe tire a casi tres vampiros y corrí como nunca, tenía que llegar a donde me habían dicho mis tíos. Esa parte del plan sabía que no iba a funcionar, alguien me alcanzó y me tiro salvajemente al suelo. Era Anne.
-¡No irás a ningún lugar perra! -gritó.
Le di un golpe me levante para seguir corriendo pero al rededor tenía a varios vampiros, todos con miradas asesinas.
Ya estaba iba a morir. Respire profundo y cerré los ojos esperando lo peor.
Cuando escuché que alguien corría hacia nosotros, abrí los ojos eran mis padres, mis tíos y Paul quien ya estaba bien.
Entonces todo se volvió salvaje, empezaron a matar a todos los vampiros. Yo me quedé aturdida.
-¡EMA! -gritó Paul.
Voltee a verlo.
-Tienes que ir con Rob y Emily, y gracias por la sangre -rio.
Me reí un poco y comencé a correr.
Rob y Emily estaban un poco lejos, estaban en mi carro. Rob estaba observando todo el lugar y Emily estaba tomando agua.
-Hola. -dije sin aliento.
-Ema, estas bien creí que te había pasado algo. -dijo Emily entre sollozos.
-Tranquila Emily, estoy muy bien, pronto acabará todo esto. -prometí.
-¡Ema alguien viene! -gritó Rob.
Eran dos vampiros, demasiado jóvenes ni siquiera hablaron sólo se abalanzaron contra mí.
-Rob, llévate a Emily. -grité.
Rob corrió al carro y como pudo arrancó.
No quería pelear, pero tenía que hacerlo, le di un golpe fuerte a un vampiro el cual cayó en un árbol golpeándose y quedando aturdido.
Voltee a buscar al otro pero ya no estaba, estaba siguiendo a Rob.
Corrí y en cuestión de segundos lo encontré casi alcanzaba a Rob, cuando trepó encima del carro, corrí aún más rápido y lo jale para que cayera en el suelo, al caer comenzó a golpearme no quería hacerlo pero tenía que matarlo no quedaba de otra, cuando estaba a punto de matarlo el otro vampiro apareció, y de un golpe hizo que el carro se estrellará en un árbol.
-¡No! -grité.
El vampiro a lo lejos rio y de un tirón saco a Emily que estaba bien.
Tome al vampiro y con rapidez acabe con su vida.
- ¡NO! -gritó el vampiro que tenía aun a Emily. -era mi hermano perra.
Creí que iba a matar a Emily, pero no. Tomó su muñeca y le enterró los afilados colmillos.
Mierda, mierda.
Corrí hacia ella, iba a matar al vampiro pero apareció mi padre con Paul y Orlando.
Mi padre y Orlando se llevaron al vampiro a la oscuridad del bosque.
-No Emily no. -sollozaba Paul.
-Tenemos que hacer algo. -dije.
-No podemos hacer nada, una vez que la muerden ya no hay vuelta atrás. -explicó Paul.
-Duele. -dijo en un susurro Emily.
-¡Maldita sea! Todo es mi culpa. -grité.
Corrí hacia el carro, y ahí estaba Rob, inconsciente.
Lo saque e intente despertarlo, tenía sangre escurriendo por su cabeza.
-Rob despierta, por favor. -dije sollozando.
Nuevamente lo intente despertar, su respiración era lenta.
-¡Maldita sea despierta! ¡No me puedes dejar! -grité.
Pero Rob no despertaba.
-Cariño, por favor...
Lo abracé, para ver si regresaba, pasaron minutos y creí que lo había perdido.
-Ema... -apenas podía hablar Rob.
-¡Rob! -grité. -¿Estas bien? -pregunté.
-Me duele la cabeza. -susurro.
-Tranquilo, ya nos vamos.
Mi padre y Orlando subieron a Rob al carro.
A lo lejos Emily se retorcía de dolor, era agobiante.
Me acerqué a ella y Paul se veía asustado.
-Yo... no... Lo siento Ema no puedo ver esto. -dijo Paul aturdido.
Entre mi madre y yo cargamos a Emily y la llevamos a otro carro, nosotros fuimos a casa y Rob al hospital.
Emily estaba siendo muy fuerte.
-Tranquila Emily, estarás bien lo prometo, lo estás haciendo muy bien. -dije mientras la abrazaba fuertemente.
Paul apenas podía mirar.
Al llegar a casa tuve que dejar a Emily e ir al hospital.
Mi padre ya estaba ahí, Rob estaba bien y fuera de peligro.
Salí a tomar aire, cuando el teléfono sonó.
-¿Si? -pregunté.
-Ema la transformación ha terminado...
Tuve que ir a casa otra vez, al entrar todos estaban en la cocina menos Paul.
Fui al patio y ahí estaba Emily como si todo estuviese normal.

-Es increíble. -dijo Paul mientras miraba a Emily emocionado. 

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