Por lo menos una vez (Leo Valdez)

Futuro

POV Nico

- Ni creas que te dejare entrar - Le dije.

- Será solo un segundo y no es como que puedas detenerme de todas formas -.

- Ya le causaste suficientes problemas, tu mayoría en números desapareció, ¿por qué no te das por vencido? -.

- Por que la amo -. No pude evitar fulminarlo con la mirada. ¿Amar? Él no sabía qué diablos era el amor. - Incluso si no lo entiendes -.

Se movió menos de un milímetro y de pronto ya no estaba. Maldije al aire y me giré para entrar en la cabaña pero la puerta estaba cerrada con llame.

- ¡Apolo! - Grité enfurecido.

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POV Leo

- ¿Entonces todos nos conocimos en el pasado? - Preguntó Percy, por décimo octava vez.

- No y sí. Al parecer nuestras almas han estado unidas desde hace mucho. Podrías decir, de una forma poco acertada pero romántica, que estábamos destinados a estar juntos -. le respondió Annabeth, ella era quien había ayudado a dar sentido toda a mi historia mientras les contaba a mis amigos qué había visto en la puerta del sol.

- Awww, eso es hermoso - Le respondió Piper soltando un dramático suspiro, solo para después negar con la cabeza molesta consigo misma por esos dejes de hija de Afrodita que a veces se le escapaban.

Todos sonreímos y reímos un poco por eso.

- Entonces... ¿Serás un Dios? - Preguntó de la nada Jason, cargando de nuevo el ambiente con tensión.

- No lo sé, viejo. Los dioses dijeron que hablarían pero siguen encerrados - Le respondí, indicando con un movimiento de cabeza hacia la ventada de la enfermería dónde nos encontrábamos.

Afuera, en medio del campamento, los dioses habían puesto de nuevo la carpa gigante en la que nos reunimos por primera vez. Nos habían dicho que votarían y discutirían cuál sería la medida a tomar; era curioso pues en esa forma adolescente, se habían comportado con más madurez de la que alguna vez les hubiera visto.

- Si te vuelves inmortal... nos veras envejecer - Soltó Hazel.

- Joven por siempre, realmente no suena algo divertido para un semidiós - Agregó Frank.

- Verás muchas batallas y mucho dolor -. Esta vez, fue Annabeth.

- Nos veras desaparecer - Dijo Piper, las lagrimas comenzaron a formarse en sus ojos. No hacía falta explicar nuestras emociones, todos comprendíamos lo que comprendía el que yo pudiese volverme un Dios.

Incluso daba gracia la cosa, quizá sería el Dios más enclenque de la historia, el de aspecto menos heroico y sobre todo el que más extrañaría a sus amigos.

Negué con la cabeza, los había visto, la puerta no me había mostrado todo eso en vano. - Es mi destino, así tuviera que recorrer el mundo entero, los encontraría una, dos, tres y mil veces. Siempre -. Les sonreí con alegría y confianza. - Estaré ahí para ustedes aunque no me reconozcan. Estaré ahí para sus hijos - Traté de bromear. - El eterno tío Leo -.

Guardamos silencio. Poco a poco, nos devolvimos una sonrisa y continuamos a varias risas y bromas sobre cómo sería siendo un tío inmortal. No era un adiós, no aún y no eterno.

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POV Nico

- Odio a los rubios - Dije mientras lanzaba otra pequeña roca al vacío.