OCURRE

En el tiempo existen varios puntos de pensamiento, que estos se ven reflejados en una sola reflexión hasta que llegue otra a sustituirla y hacerte reflexionar sobre lo que tu veías con el paso del tiempo hasta llegar a una visión objetiva y auto-crítica sobre ti.

Hace tiempo tuve una relación que con el pasar de los meses se convirtió en lo mejor que había experimentado hasta la fecha. Pero después de tanto sonreír y ser feliz, todo eso se acabó, a veces llegan los puntos clave de tu vida que te hacen ver la vida como nunca has querido verla y así es, empiezas a partir de allí.

Con el paso de estos 2 años me he dado cuenta que me siento solo, me siento solo de alguna forma u otra y no logro entenderlo, tengo lo indispensable en mi vida ¿Por qué me sentiría así? Si cuando tienes todo para ser feliz ¿Por qué no serlo? Es simple, a veces te falta algo aunque te niegues a repetirte a ti mismo que no es así, que te encuentras bien, sin nada más. Pero es que la triste ironía es que no sabes que es lo que necesitas y a la vez el no saberlo deja un hueco en tu interior, un hueco que solo puedes rellenarlo con mejores recuerdos o bien, encontrar algo que reemplace lo que te hace falta pero no sabes que es.

Quizás todo empezó con el hecho de que me aleje de la gente que quería, excepto uno, excepto esa sola persona que es con la que mejor tengo recuerdos y momentos que no cambiaría por nada. No sé cómo lo ha hecho pero sabe hacerme sentir mejor cuando no lo estoy, aunque yo la cague o el siempre reímos, reímos de nuestros errores, lo que mejor se nos da. Cuando decidí alejarme de los míos empecé a entender que un individuo no puede caminar siempre solo por el mundo, aunque se repita que es mejor hacerlo solo... no es así, es solo una falsa mentira que intentas creerte.

Cuando me di cuenta que necesitaba de su olor, de su sonrisa, de sus historias, de sus regaños, de sus consejos, de todo, me di cuenta que no era la persona que el futuro había puesto en mi camino para que se quedara... para siempre... no lo fue y... quizás lo aceptaba falsamente, aunque le había revelado mis sentimientos tarde pero lo hice, eso nunca fue la solución a nada, ni siquiera marco algo en este tiempo, bueno... no en este tiempo, me da pena decirlo pero ese tiempo ya ha pasado y yo solo puedo quedarme a continuar. Cada que veo a su prima me recuerda a ella, y no porque sea la persona que quizá la conoce mejor que yo, sino porque tiene un poco de su personalidad, me es imposible no detenerme a pensar que ella puede concederse el verla cada cierto tiempo, en cambio yo? solo me queda aceptarlo muy pero muy en el fondo de mis sentimientos.

Esto no se trata sobre ella, quizá esto es más un recopilatorio que un diario de un adolescente que plasma la pérdida de su "amor". Después de tanto me he dado cuenta que me hace falta ese amor, que dentro de mi interior existe un hueco que el amor no ha podido llenar, no intento llenarlo a toda costa pero si me queda hacérmelo saber y decirme "lo sabes y tienes que vivir con ello", es triste y quizás suene a un capricho de un adolescente pero después de todo acerté en que esto era lo que necesitaba hablar conmigo mismo, no con alguien, necesito darme más el tiempo de hablarme al oído y decirme todo lo que necesito descubrir de mi corazón. A mis casi 20 años sé que esto no llegara hasta en un futuro más distante a este futuro tan cercano, el futuro está cambiando, la gente está cambiando y el mío lo está, solo tengo que darle el engrane correcto para que esto no me lleve a un pozo profundo del que no pueda escapar.

Pero ese hueco de amor se ha estado separando del resto y otro hueco a empezado a manifestarse y solo hasta ahora he podido escribirlo en estas líneas que puede que pocos se enteren de cada una de ellas y cuál fue el fin de cada letra y cada pulsación.

He visto como mis grandes amigos de preparatoria aquellos con los que llegue a irme de clases solo para ir a comer a un sitio y reír y reír ahora solo son un recuerdo de hoy. Podría tener nuevos amigos, tomar a alguno de mi grupo y hacerlo mi amigo pero no es como una juguetería donde eliges el que será tu nuevo "entretenimiento temporal" ¿verdad? He visto mucho del mundo y no es lo mismo cada día, cada vez todo se divide en grupos de personas que buscan el ocio y el entretenimiento.

He visto como ellos se han ido alejando de lo que éramos antes, no busco que el pasado sea igual, el pasado ahora son recuerdos que perduraran hasta el futuro, el futuro terminal donde nosotros desaparezcamos de esta población, todo tiene que cambiar y por ello ser mejor, ser mejor de lo que era, ser mejor de lo que pudo haber sido.

He visto que mi preocupación por su malos hábitos y sobre todo su poca consciencia ha sido solo algo que los hace creer que estoy por encima de ellos solo por ser amante de la fotografía y en lugar de salir de fiesta prefiere estar en casa y estar por cientos de páginas, asi es mi vida, ha sido me costó decidirla desde que inicie mi vida nocturna (bastante dañino a nivel químico para ser sincero).

He visto como todos mis recuerdos solo me están sirviendo para darme cuenta de que están siendo mi peor arma y podrán jugarme una mala historia cuando abuse de su memoria.

Y sin embargo tengo que seguir con ello en la mente cada día, él me dice que valora mi preocupación hacia el pero yo no lo siento así ¿sabes?, a mí no me hace sentirme mejor cuando doy lo mejor de mí por el bienestar de mi amigo, no es para mí lo más gratificante sacrificarme moralmente para estar con alguien que solo piensa en val viajarse y olvidarse de sus problemas con drogas y mierdas así.

Empiezo a creer que solo estoy siendo empático y no me he preocupado por mí.

¿De qué sirve sacar una buena calificación y ser disciplinado si por dentro sigo teniendo esa desestabilidad emocional que siempre he tenido?

¿De qué sirve estar consciente de lo que me hace daño si el daño lleva en mí desde hace más de 3 años?

¿De qué sirve pensar por los demás si al final no recibes ese agradecimiento sincero que te ayude a saber que tu apoyo ha sido indispensable para ellos?

Todo eso me planteo día con día, eso y más. ¿Pero de que ha servido? De nada... créeme. No son simples emociones, son memorias que han vivido en mí y las he tenido que cargar desde hace años, tal vez me hago daño cargando pesos que no me corresponden o arrastrando el pasado a este futuro que solo ocasiono que me vaya afectando cada vez más. Inventar excusas no va a solucionar nada... La pérdida de ese amor me ha afectado más de lo que he creído, no he disfrutado con plenitud esta vida, no he vivido ni más de la mitad de lo que debería de estar disfrutando ahora mismo como lo hacen cientos y cientos de personas de mi edad.

En más de una ocasión critico la gente que vive en las Redes compartiendo imágenes de que están necesitados de una pareja, yo nunca he pensado en caer en algo como eso, me parece algo absurdo esa gente. Absurdo compartir ante un público masivo lo que necesitan OBLIGATORIAMENTE en su vida. Yo nunca exijo ni reprocho nada, solo me quedo callado el 99% de las veces y lo sé, es lo peor y lo mejor que he podido hacer y aprender. Mas sin embargo he querido volver a tener esa persona que valore mi trabajo, que aprecie todo lo que hago y he hecho a lo largo de mi vida, que decida hablar conmigo de las locuras por las que ambos hemos pasado, hacer una llamada que dure horas y horas sin sentir las horas transcurrir, que al mirar una de mis fotografías elija una como favorita o una de sus favoritas, me da tristeza llegar a un punto donde tengo que aceptar que necesito del amor para empezar a notar que estoy haciendo algo con mi vida, no quiero que llegue el día donde mi fotografía la termine dejando de lado, ella me ha dado lo mejor que tengo hasta ahora, me ha dado una cobija en un invierno sumamente frio y me tomo de la mano a un proyecto de vida que yo nunca imagine tener, yo no elegí a quien me hizo elegir, y en este caso fue ella. Es triste que un hombre como yo a sus 19 años no este disfrutando su vida, y decida ser apático la mayoría de las veces, pesimista, indiferente, irrespetuoso, cruel, insensato, estúpido y más adjetivos que puedan definirme en muchos de los casos.

Sé que llegara el día donde alguien quiera valorar mi trabajo, ese día recordare este escrito y hare una reflexión que amerite dedicarle miles de palabras. Hasta entonces toca seguir trabajando y proyecto un futuro solitario y con sonrisas cuando el tiempo me las entregue para disfrutarlas.

OCURRE

Alberto Ayala