Capitulo 2

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Narra Murdoc

Después de un puto año....... Un puto año desperdiciado de valiosa vida, en la que pude haber hecho cosas inimaginables. Al fin iba a tener su recompensa, pero ¿Por qué mi emoción para tener esa banda con la que había soñado toda mi vida? Para eso tengo que narrarles un poco de la asquerosa vida del gran Murdoc Niccals ¡¡¡¡¡

Todo comenzó en los suburbios de Stoke-on-Trent (Reino unido) el 6 de Junio de 1966.
En aquel lugar, fue donde, se formó este hermoso ser, el cual paso por la más asquerosa infancia que no se la desearía ni a mi peor enemigo.

Aquella tarde en la que ellos me dejaron en la puerta de quien sería mi perdición, el ser más repugnante que alguna vez conocí, aquel culpable de que tuviera los peores recuerdos de esa época a la que llaman infancia, la cual para mí fue el infierno en persona, humillaciones por parte de ese engendro del demonio que por cuestiones de "respeto" tenía que llamarlo "padre" o como yo mismo lo bautice "El verdugo de mis sueños" me imagino esa escabrosa figura, un clásico verdugo, con una tela cubriendo su rostro, armado con un hacha de doble filo, un aparato que únicamente pudo haber sido construido en la inquisición, de cual estaba cubierto de una pequeña capa de óxido gracias a la sangre de sus anteriores ejecuciones, un olor penetrante, algo salido de la mente de un psicópata.

Por alguna razón ese hombre el cual se hace llamar "Jacob Niccals" en ese papel, apresando mis esperanzas, todos mis sueños, metas. Todos ellos en una fila esperando para ser decapitados y arrancados de la existencia de este mundo.
Pero se preguntaran, el porqué de este particular rencor que tengo hacia él.

Durante toda mi infancia él se dedicó a sacarme provecho de una forma un tanto "medieval".
En los bares en los cuales llegaba de noche con el fin de ahogar sus penas, y amanecer recordando la reverenda mierda que siempre fue, pasaba toda la noche ahí junto a él, pero había una característica algo especial.

Me vestía como un maldito imbécil, usando ropas totalmente ridículas para cualquier persona que tuviera la más mínima pizca de dignidad, obviamente ese horrible vestuario era con el fin de llamar la atención de los presentes en esa pocilga.

Era algo tan denigrante para mi persona, me obligaba a hacer danzas ridículas, vestido como un completo tarado, mientras todo se reían de mí, la gente me arrojaba algunas monedas por la lástima que les causaba, no había nada más bajo que eso, y por si no fuera poco, esas pocas monedas que recibía se las quedaba él. Las gastaba en alcohol, putas etc.

Recuerdo aquel día en el que dije algo temeroso.

--Padre, ¿Te puedo hacer una pregunta?--

--Que quieres maldito mocoso, ¿no ves que estoy ocupado?

--Padre algún día podre entrar a la escuela y tener amigos, la gente en donde te ayudo a trabajar no me agrada del todo—Dije con tal inocencia que parecía ese asqueroso pigmento azul.

--¿Te puedo hacer una pregunta hijo?..... ¿Sabes que me importa una grandísima y reverenda mierda lo que te moleste o lo que no?, además ¿Para qué quieres entrar a la escuela? Todos los que van a ese asqueroso lugar, aprenden a se mejores esclavos, a recibir órdenes de los demás, a ser un sumiso de mierda, seguir unas putas reglas que impone la sociedad. Así que....... DEJA DE DECIR ESTUPIDECES Y MAS BIEN PONTE A TRABAJAR, ASQUEROSO ENGENDRO DEL DEMONIO, PIÉRDETE¡¡¡¡¡¡¡-- Me contesto de una manera muy agresiva, no sé por qué siempre tenía que desquitarse conmigo, quizá era como su "Saco de boxeo".

Después de tan duras palabras que me había dicho mi padre, corrí lloviendo hasta mi habitación, dejando un inmenso rastro de tristeza, me preguntaba el porqué de mi vida era algo...... Mierda como lo decía mi padre, el siempre andaba quejándose de la mala suerte que tenía, jamás prospero, siempre fue un borracho asqueroso.

Desde aquellas acciones que cambiaron mi vida, no volví a ser el mismo, había aprendido tantas cosas en ese vertedero al que me llevaba mi padre a trabajar.
Veía a los demás chicos ir a la escuela, tener una vida completamente normal, haciéndose un futuro, en cambio yo....... Poco podría hacer, era un don nadie proclamado bufón de ese asqueroso sitio, estaba harto de esa rutina, quería cerrarle la maldita boca a mi padre.

--Más vale que no te canses, siempre serás mi perra por el resto de tu infeliz existencia, ¿Crees que lograras algo? Sigue soñando, ahora....... ¡Vuelve a trabajar zorra!—Siempre me decía en respuesta a mis suplicas para que acabara con esto, quería ser alguien en la vida, estaba cansado de esta rutina diaria, a veces quería dejar este mundo, muchas veces agarre la pistola que mi padre guardaba en su chaqueta por si las moscas, como decía él.

Aquel día había pasado la raya, jamás me había sentido tan mal, me rompió la nariz en frente de todo el público por..... Acaso tener hambre es malo, había veces en las que tenía que valerme por mi mismo para calmar mi hambre, saqueaba basureros, rasgaba las bolsas, buscando algo comestible, mientras que todos los chicos del barrio se burlaban de mi....

A mitad de un show.

--Papa puedo parar ya tengo hambre, estoy que muero del hambr.....—Me interrumpió con una bofetada de su parte.

--¿Tienes hambre?, me importa un grandísimo y soberano CULO, si tienes hambre ve y escarba en la basura a lo mejor encuentras algo que te merezcas—Respondió toscamente, en un tono desafiante.

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⏰ Last updated: May 11, 2017 ⏰

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