Narra Hans:
Ha pasado un mes desde la última vez que hablé con Kristoff, la verdad es que esperaba más de el, pensé que la manera de juzgarme sin conocerme había sido lo peor, pero el colmo fue el hecho de que me ha estado evitando como niño pequeño, literalmente en cuanto me ve se da la vuelta y va para otro lado, de alguna manera me recuerda a cuando mis hermanos me ignoraron por dos años... o bueno, me recuerda a mi familia en general después de la muerte de mi madre.
Pero... creo que en general todo el mundo ha decidido ignorarme, el único momento en el que parece que realmente existo es cuando los sirvientes me dan un trabajo o cuando los guardias se burlan de mi haciéndome la vida imposible, toda mi vida es una pesadilla horrible de la cual deseo despertar. Incluso Anna ha ido un par de veces a verme trabajar (creo que en serio disfruta humillarme) y ella bueno... tampoco me deja muy fáciles las cosas.
Últimamente no me siento bien, pero la verdad ya no se si es por la falta de comida, por el cansancio, por lo frío de mi "hogar" o por el incidente de hace unos días...
Me levanto como todas las mañanas, pero esta vez siento más frío que normalmente, cuando intentó ponerme de pie simplemente no puedo, todo el cuerpo me duele mucho. Pero finalmente lo consigo al pensar que si no me presento al trabajo los guardias vendrán por mi y me castigarán.
Me visto y camino directamente a la cocina, me falta el aire, no puedo respirar bien... ¿Qué está pasando?. Todo se comienza a volver negro justo cuando estoy por llegar al pasillo que me lleva a la cocina.
Fin de la narración de Hans.
Narra Kristoff:
Voy caminando por el castillo buscando a Olaf otra vez, me estoy cansando de esto, creo que le haré un collar con una campana, de lo contrario lo buscare toda mi vida.
Al doblar la esquina del pasillo me encuentro con Hans tirado en el suelo, ¿qué demonios?, me acerco rápidamente a él. Puede que lo haya estado evitando desde la última vez que hablamos, pero aún así tengo conciencia. Le pongo una mano en la espalda y lo sacudo con fuerza, pero el no se mueve ni un poco. Le doy la vuelta para poder verle la cara, cuando logro hacerlo casi me desmayo, está tan pálido que parece un fantasma, además de que es mucho más delgado que la última vez que lo vi directamente. Le tocó la mejilla y me doy cuenta de que está ardiendo en fiebre, ¡demonios!, lo cargo como lo hice la última vez y lo llevo a su habitación.
En cuanto llego lo dejo en su cama, el se queja levemente como si le doliera mucho algo, voy al baño y traigo agua fría junto con un trapo. Me siento a un lado de el y humedezco el trapo para después ponerlo en su frente, me paso así al menos una hora, pero la fiebre no hace más que subir... creo que lo mejor sería buscar ayuda.
Salgo de los establos y voy corriendo por el doctor del palacio, prácticamente lo arrastró fuera de su consultorio (que he de agregar está al otro lado del castillo), corro de regreso al establo con el doctor detrás de mi. Cuando llegamos el doctor está sin aliento y tengo que detenerme para que el pueda respirar.
-Kristoff, ya te dije que Sven no es un humano y yo no se atenderlo- me dice una vez recupera el aliento.
-Por increíble que parezca no quiero que atienda a Sven, es a... bueno....-
-Me imagino que al príncipe Hans- dice el levantando una de sus cejas.
-¿Cómo lo supo?- le pregunto caminando en dirección a la cama de Hans.
-Desde que llegó al palacio pedí que lo llevaran a mi consultorio y conseguí que la reina Elsa lo aprobara, pero esa misma noche la princesa Anna vino a mi y dijo que él era un prisionero más y uno de los peores criminales y por lo tanto no merecía atención de ningún tipo- me dice el doctor que al ver a Hans se acerca de inmediato y comienza a revisarlo.
-Eso es imposible Anna no...- intento hablar, pero el doctor me interrumpe.
-Eso no es importante muchacho, el príncipe necesita ayuda de inmediato- me dice el doctor.
-¿Qué le sucede?- pregunto.
-Para empezar, está desnutrido, tiene inicios hipotermia y tiene síntomas de una infección- murmura el doctor seriamente.
-¿En qué puedo ayudar?- pregunto de inmediato.
-Solo ve por mi maletín a mi consultorio, cuando regreses ve por un poco de comida a la cocina- dice el doctor, pero su atención está completamente en Hans.
Hago lo que me dice y en menos de 20 minutos regreso con todo lo que necesita. Cuando llego Hans esta despierto, pero no parece muy consciente.
Fin de la narración de Kristoff.
Narra Hans:
¿Dónde estoy?, ¿Qué hago aquí?, ¿No debería estar trabajando?. Abro los ojos y los primero que veo es el techo, un techo de madera, ¿estoy en los establos?...
Entonces lo recuerdo, debo ir a trabajar o si no tendré un castigo.
Intentó ponerme de pie, pero un par de manos me lo impiden.
-no se levante príncipe- dice alguien.
Intento contestar pero no puedo... no entiendo que sucede, pero tengo miedo.
-cálmese príncipe, todo está bien solo necesito chequearlo y atender un par de cosas, después se sentirá mejor- habla otra vez esa persona -duerma un poco mientras tanto-. Por algún motivo le hago caso y vuelvo a dormir.
Cuando abro los ojos otra vez la única iluminación es una vela, miro a todos lados y me encuentro con Kristoff mirándome atentamente.
-¿Qué pasó?- pregunto.
-Te encontré inconsciente en el pasillo y te traje aquí, también traje al doctor del palacio, dijo que tienes que descansar y.....- me responde, pero lo interrumpo.
-No puedo, tengo que trabajar o...- un ataque de tos me interrumpe.
-No puedes trabajar así, mañana hablaré con Ana y Elsa para informarles que estás enfermo- me dice más como una orden que como otra cosa -Ahora necesitas comer- murmura mientras acerca un poco de pan con leche.
Al ver la comida simplemente la tomo y me limito a comer, hace dos días que no tomaba nada más que agua.
-Más te vale no salir de la cama- dice antes de ponerse de pie e irse. Esto es demasiado extraño.
***************************************okey..... pues no sé cómo me quedo, para mi que quedó muy forzado el final, pero bueno....
