Capítulo 11

36 11 8
                                    

90 días.

Al vibrar de unas pérfidas notas,

una infausta melodía,-

que sin piedad me atiza,

y entonces te recuerdo;

me desorienta,

y te siento;

me absorbe,

y te revivo;

me embriaga,

y al éxtasis de tu sonrisa,

y una mirada intransigente,

le debo la cuenta de esa ronda

y la resaca infinita,

y las inextinguibles ganas de más,

y que Dios me perdone,

por hacerme adicta

y querer siempre más,

y enloquecer sin ti

e inyectarte insanamente en mi vida,

hasta someterme,

hasta envenenarme.

100 DÍAS DE OCASODonde viven las historias. Descúbrelo ahora