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HyungWon abrió sus ojos con intriga al ver al director frente suyo. Aún no entendía que hacía ahí ni sabía que le iba a decir. No tenía miedo, pero algo se presionaba en su pecho al pensar que otra cosa mala se sumaría a su lista.

-Señor Chae, ¿sabe por qué está aquí?

-No realmente, director. ¿He echo algo malo? -preguntó algo grave, analizando la extraña mirada que le dio su director.

-No, para nada. Pero sí harás algo bueno -lentamente sacó algo de su saco y HyungWon notó que era una tarjeta -Léala.

-"Psicólogo juvenil" -tardó unos segundos en entender realmente el significado de aquella y con el ceño fruncido vio a su mayor -¿Por qué?

Levantándose de su asiento, se encaminó hasta quedar al lado del chico.

-Se le ha visto bastante decaído, bastante distante de la realidad. No por mí, comentarios de los profesores -aún no entendía, pero asintió -Un psicólogo le ayudará. Será todo costeado por la escuela, así que con mucha honra podría iniciar mañana mismo.

-P-pero, yo...

-Hemos hablado con su madre, señor Chae. Todo está arreglado.

Desde esas palabras no quiso escuchar más y aún con la tarjeta en su mano salió del despacho del director. Se sentía inútil, tonto. Le dolía el pecho y los labios al morder estos.
Sentado en las escaleras más cercanas de la escuela, ahogó un suspiro al ver una silueta frente a él.

-Te dije que no me hablaras hace unos días.

Wonho chasqueó sus labios y bufando dejó a la vista una mínima sonrisa.

-No había empezado a hablarte.

-Tú... -alzó su mirada, finalmente mirando al chico frente a sus ojos -¿Crees que necesito un psicólogo?

Esa pregunta tomó desprevenido al rubio y abriendo sus labios no supo que decir. Fue así como leyó la carta que el ajeno le había lanzado y ahí entendió todo. La famosa recomendación del director.

Wonho aún no hablaba y HyungWon entendió aquello a su manera.

-Lo supuse -se rindió, apoyándose en su mano mientras sentía un calor en su pecho -Quizás realmente deba ir.

-¿Y en serio le vas a crees a alguien como el director?

Ante la pregunta, el más alto asintió.

-Entonces sí lo necesitas.

-¿Qué?

Wonho se aproximó y se sentó a su lado, conectando ambas miradas -Si te dejas llevar por las palabras de alguien como él, quizá sí necesitas un psicólogo por incrédulo -diciendo eso, pellizcó la nariz del alto a lo que este se separó- Pero, por mí, no necesitas ayuda.

-Me va mal en todo, nunca tengo compañero, ni siquiera en inglés que es en lo que soy bueno -cerró los ojos sin querer romperse -Odio prácticamente cada cosa que haga, mi madre acepta cosas sin preguntarme y me encuentro aquí hablándole a una de las personas que más detesto.

Incluso así, incluso si aquello le dolió a Wonho, sólo le sonrió. Pero HyungWon no podía verlo.

-Está bien, HyungWon -se levantó. El rubio ahora estaba frente al alto y levantó su mirada para verle -Si vas por ahí creyendo que eres lo peor, te dejo. Pero cuando te des cuenta que para cierta persona eres lo mejor, sin defectos, sin nada malo que mirar, por favor sonríe.


Y se fue.
Y aunque HyungWon captara algo, se quería convencer así mismo de que nada de lo que dijo tenía sentido.
Pero claro estaba que así no era.

too beautiful to handle. 2wonWhere stories live. Discover now