12.- El novio de mi mejor amiga

2.1K 176 10
                                    

Me quedo un par de minutos más hablando con Jax y, obviamente, aprovechamos de besarnos de vez en cuando. Cuando falta una hora para que papá llegue a casa, Jax decide irse a la suya para no tener problemas con papá.

Voy a dejarlo a la entrada del edificio mientras vamos tomados de la mano. Me encanta que algo esté naciendo entre Jax y yo, sea lo que sea que esté naciendo. 

-¿Nos vemos mañana?- me dice posicionándose frente a mí.

-Tenemos clase, así que yo creo que si- le respondo riendo.

-Claro, esas cosas aburridas por las que vamos al instituto- dice entre risas.

-¡Hey! Por esas cosas aburridas nos conocimos.

-Pues, entonces amo esas clases- dice tomando mi cabeza entre sus manos y besándome con delicadeza- y agradezco al día en que nos conocimos, Liv.

Sus palabras hacen que vuelva a sentirme como un helado de vainilla puesta al sol el día más caluroso del verano. 

Me derrito por este chico y no sé si sea malo o bueno, pero si sé que se siente genial tener a alguien así en mi vida. Con quien me sienta segura y me encante estar con él de todas las formas posibles.

Nos besamos una última vez antes de que se vaya. Yo sé que quedo con una sonrisa tonta en mi cara. Me doy media vuelta y hago ademán de volver a mi apartamento, pero me encuentro con Ricky, el portero del edificio que me mira con una sonrisa de oreja a oreja.

-Así que mi pequeña Olivia creció y ahora tiene novio- dice moviendo las cejas con diversión.

-Jax no es mi novio, Ricky- le digo sin quitar mi sonrisa tonta de la cara- Al menos no aun.

-Asumiré que no debo decirle ni una palabra a tu padre de que estabas sola en el departamento con tu chico- dice y abro los ojos como plato- ¿o me equivoco?

-Asumes muy bien- digo con nerviosismo. Ricky y papá se llevan muy bien y él siempre me cuida cuando estoy sola.

Me despido de Ricky y corro hacia mi departamento. Me acuesto en mi cama y guardo el diario de mamá. Tengo demasiadas cosas en mi cabeza como para saber más sobre la historia de mis padres.

Espero que Ricky no le diga a papá que Jax y yo estuvimos solos en el departamento. No quiero que piense mal de mí ni desconfíe. No quiero que odie a Jax sin conocerlo y menos si él y yo nos hacemos novios, que es lo que espero que pase algún día. Además, no tiene razones para desconfiar, con Jax solo nos besamos.

Comienzo a ordenar las cosas del botiquín y a botar los algodones que usé para curar el labio de Jax. Recuerdo como se sienten los labios de Jax sobre los míos y como de suaves son. Insisto en que no soy muy buena besando, pero eso no le importó y, más aun, me dijo que siguiéramos besándonos para practicar y mejorar.

Espero tener mucha práctica con él de ahora en adelante.

Decido que para matar el tiempo mientras llega papá, voy a hacer las tareas de la escuela. Saco mis cuadernos y mis lápices. Comienzo con mi tarea de cálculo. No es muy difícil, pero mi intento de mantenerme concentrada en los números no funciona muy bien cuando siento como vibra mi teléfono celular, lo miro para ver quien es y es Skye que me está llamando así que contesto sin dudarlo.

-Hola, rubia- la saludo con naturalidad

-¿Sigues con Jax?- pregunta ansiosa- Por favor dime que no, quiero saber los detalles de todo.

-Jax se fue hace unos minutos- contesto con emoción- y tengo que decir que besa muy bien

-¡¿Lo besaste?!- grita al teléfono, lo que hace que tenga que alejarlo un poco de mi oreja- Creo que esa es la segunda mejor noticia que me han dado en el día.

El día en que nos conocimosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora