10.

241 24 32
                                    

Noa.

El premio se otorgarían a las dos primeras parejas en llegar. No lo podía creer, Yannick había llegado el primero, en segundo lugar Lucas, en tercer lugar Anto, y por último Saúl, aún quedado por detrás más chicos.

Ahora nos toca a las chicas, así que nos metemos en el agua, y empezamos todas a la vez. Es Maria la primera en tocaría campana, yo la segunda, Mery la tercera, y Amil cuarta.

Salgo del agua y abrazo a Yannick, y el besa mis labios con su dulce sabor que tanto me encanta.

Lucas.

María, Noa, Yannick y yo acabamos de ganar el premio. El premio tendrá lugar mañana por la tarde-noche.

Saúl me pidió que le pidiera a María dormir conmigo para el dormir con Mery. No quiero ni imaginar a Saúl en ese momento.

María se acerca a mi, y me abraza, abrazo que es respondido con rapidez.

—Enhorabuena por ganar, francés.

—Enhorabuena a ti, francesita.

Los dos reimos, tiene una risa preciosa.

Día siguiente.
En la piscina climatizada.

—Maria, quiero hablar contigo. Por favor.

—Claro, dime.

—Donde no nos escuche nadie. Por favor.

Salimos y vamos a una especie de banco de palets que hay, mientras Yannick y Noa se están besando.

—Mira Maria, desde que llegaste no me dejas dormir, todas las noches sueño contigo. Sé que solo llevamos una semana aquí, pero me ha valido para enamorarme de ti. Porque Maria, si tu, eres increíble. Eres diferente a los demás, sin conocerme de nada, has aceptado todo lo que te he pedido. Quizás pienses que soy un maldito psicópata, pero es que es verdad. Estoy enamorado de ti, María. Haces que pueda entregar lo mejor de mí, porque eso es lo que provocas en mí.
Cada vez que estamos abrazados me gustaría atesorar el momento y congelar el tiempo, para no dejarte ir jamás.
Cuando estoy a tu lado no existe nada más, todo comienza a desvanecerse hasta que quedamos solos tú y yo. A partir de ese instante, me siento en un universo que es solo nuestro.

Sus ojos se han entrecerrados​, pero lo poco que veo, sus pupilas están dilatadas.

—¿Estas bien? ¿He hecho algo mal? Lo sabía, nunca debería de haberte dicho nada.

—Es lo más bonito que me han dicho nunca Lucas, es precioso.

Una sonrisa se escapa de sus labios, y se lanza a mis brazos.

Levanto su cabeza, y dejo un dulce beso en sus carnosos y suaves labios. Es perfecta.

[•••]

⬇⬇⬇⬇
Gabi Fernández o Griezmann.

¿Un verano mas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora