Best Friend ll

323 42 7
                                    


Si me necesitas ahí estaré.

Había tenido tantas ganas de marcar que muchas noches en solitario juró que lo haría...

Estaba sólo, y aunque Visión ahí se encontraba no era lo que buscaba, ambos lo sabían.

Estaba seguro que quiso suicidarse, lo vio como una opción tan llena de sentido, tan tentadora... De no ser por Peter así hubiese sido.

Llegó como un rayo de esperanza, como una luz que alumbró su camino en penumbras y veanlo de manera metafórica o no así había sido.

Un día se había sentido mareado y vomitado todo aquello que entraba a su boca. No había pasado mucho tiempo de la pelea en Siberia así que Rodhes aún estaba por ahí.

-Un simple dolor de estómago, se pasara- lo había soltado con tanta tranquilidad, aún y cuando no estaba de humor para fingirla.

War Machine se negó, lo obligó prácticamente a hacerse estudios. Los mareos y vómitos no iban de la mano a una enfermedad normal.

No era una enfermedad, tampoco era algo normal.

Al principio se lo tomo a broma, riendo de manera paranoica en la sala donde se lo habian dicho, comenzando a asustarse cuando notó que no quitaban su rostro serio.

Pidió los análisis con toda la amabilidad que pudo en ese momento, temblando al ir leyendo todos los resultados, llegando con pavor al que le provocó un vuelco al corazón.

Positivo.

Una sola palabra, una que cambio su forma de ver la vida, de sentirla, de vivirla.

Había maldecido tantas noches a Rogers que no reparó en el regalo más hermoso que alguien pudiese darle, le había regalado esperanza.

No supo como fue posible, no lo investigo hasta después.

No era importante, ya estaba ahí, ya venía en camino, no le importó nada más.

Los meses siguientes fueron difíciles. No iba a engañar a nadie, hubiese preferido estar en cualquier lugar menos ahí, vomitando en el retrete mientras Visión le acaricia la espalda de manera suave.

¿Qué habría sido de él sin Visión?

De un día a otro era todo un experto en remedios para dolores de espalda, de pies, incluso de vómitos. Había aprendido a preparar licuados que Tony odiaba pero que debía tomar, sabía una y mil dietas, platillos llenos de nutrientes pero sin muchas grasas.

Fue lo que Tony no tuvo y necesitó.

Pepper llegó un día a la torre de manera inesperada. Exigió verlo. Ya había ido tantas veces siendo negada.

"El señor Stark ha salido de imprevisto"

"No está disponible ahora"

Tantas negaciones elegantemente armadas pero siendo su propósito el mismo, negarle ver a su mejor amigo.

Tony no pudo decir esa vez: no, era su amiga, ella merecía saberlo, asi que la dejó pasar aún con todos los nervios del mundo en su cuerpo. Visión estaba a su lado, como ya era costumbre, de alguna forma eso lo logró tranquilizarlo.

Cuando ella lo vio corrió a él sin reparar en el aspecto que ya tenía, lloraba, tal vez las lágrimas no le habían dejado ver. Lo único que importó fue cuando lo rodeó en sus brazos no pudiendo sentirlo del todo bien gracias a algo.

Tony no se movió, sólo la miro cuando recuperó la compostura para observarle mejor.

6 meses de embarazo no se ocultaban detrás de una camisa holgada.

Frost and rosesWhere stories live. Discover now