|Capítulo 6|

4 3 0
                                    

-Vamos a ver si dices lo mismo después de esto... -dice con voz arrogante.

-¡Ja! -digo. -haz lo que quieras, no te tengo miedo. -lo reto.

Enserio que este absurdo jueguito ya me aburrió. Ya no sé que más hacer para que el idiota este me deje en paz.

¡Carla! ¿¡dónde coño te metiste!? Ven por mí por favor...

Y entonces por estar distraída no sé exactamente en qué momento pero, siento unos labios carnosos sobre los míos, e inmediatamente me opongo, retiro mis labios de aquellos, abro los ojos y me encuentro con los intensos ojos azules de Louis. Intento hablar pero no encuentro mi voz, él tampoco dice nada.

¡Por Dios! ¡me ha besado!

Ninguno de los dos sabemos que hacer o decir, solo nos quedamos ahí...  mirandonos por segundos que parecen eternidad.

¿Por qué me besó? ¿será qué le gusto? ¿qué siente la misma extraña sensación que yo? Miro sus labios, sus rojos y carnosos labios. Y me entran unas ganas infinitas de besarlo, quiero sentir sus labios de nuevo. ¿por qué fui tan tonta de interrumpir su beso?

-Louis, besame. Prometo no intervenir. -Ruego internamente, queriendo que él lea mi mente, aunque sé que eso no va a pasar.

Él sigue sin decir o hacer nada. Y yo ya me estoy desesperando. ¡haz algo idiota!

Y sin saber por qué, mi boca se pega a la de Louis, roso sus labios y él me corresponde.
Mis labios buscan con desespero los suyos para   Fundirnos en un beso, introduzco mi lengua en su boca, tocando todo a su paso. Explorando el manjar que esta guarda. Él me besa con cariño, pero yo me siento muy caliente. Éste se apoya mucho a mí, haciendome sentir su dura erección yo doy un pequeño gemido, en un impulso subo mi pierna derecha de modo que mi rodilla llegue poco más arriba de su cadera izquierda, Louis me ayuda sujetando mi pierna, la elevo todo lo que puedo con tal de adherirme más a él sin siquiera importarme que llevo un vestido ceñido al cuerpo. Con la mano que le queda libre a Louis agarra mi cuello y me besa con mucha más fuerza, yo lo abrazo, lo abrazo de tal manera que no lo dejo despegarse ni un centímetro de mí. Ahora Louis suelta mi cuello sin bajar la fuerza en el beso, al contrario, esta se cada vez es más fuerte. con la mano que ahora ha dejado libre toma mi nalga y le da un leve apretón, encendiendome aún más. Louis sube lentamente su mano hasta llegar al final de mi espalda, donde empieza mi nalga. La ubica ahí, justo donde está el escote de mi vestido. Me sigue besando, metiendo y sacando su lengua, degustandome de una manera increíble. Acaricia fuerte mente mi pierna, intento bajarla pero él no la suelta. En cambio su otra mano sube lentamente por mi escote hasta llegar a donde debería de estar el broche de mi sujetador, pero por la forma de mi vestido decidí no llevar. La llamarada dentro de mí cada ve es más fuerte. Louis acaricia mi espalda y mi pierna en un vaivén que me me hace erizar todo el cuerpo. Quiero más, ¡necesito más! pero no. El beso se va suavizando. Ahora mi pierna esta en el lugar que va, junto a la otra. Las manos de Louis no se encuentran en m cuerpo y de alguna manera eso me entristece. El beso cesa, y sin darnos cuenta ya estamos a un metro de distancia. Él con los ojos dilatados, los labios rojos e hinchados y su vestimenta... ni hablar de ella. Y yo, acomodando mi vestido que no llega siquiera a las rodillas, organizando y cabello y sintiendo como mis labios palpitan.

Y es así como nos damos un beso, nuestro primer beso. Un beso muy apasionado y caliente que nunca nadie me había dado. Ni siquiera Alex.

¡Oh! se siente tan bien esto... ya se me estaba olvidando lo bien que se siente dar un beso, lo bien que se siente estar atraído por alguien. Hace mucho que no besaba a nadie, hace mucho que no me gustaba alguien. Hace más de cuatro años.

No sé que arrebato me da pero, me lanzo a los brazos de Louis, éste me corresponde de inmediato, pero de un momento a otro me suelta y se quita de mi lado de forma brusca, sacandome de mi ensueño Y, me siento tonta cuando él sin ningún pesar en sus palabras y con voz burlona suelta...

-¿No qué apestaba mi aliento? -dice con una sonrisa triunfante.

Y entonces entiendo que todo esto fue solo para hacerme quedar mal, para demostrarme que no tenía mal aliento. Él sabía perfectamente que yo le correspondería, pero mejor le salió su plan al ser yo quien lo besó. Todo dentro de mí se calienta de nuevo. Y no precisamente de la manera que me gustaría.

-Sí, Apesta. -digo con rabia llevando la ante palma de mi mano derecha a mis labios para limpiarlos, mirandolo seriamente a los ojos, a esos que justo ahora me parecen horribles.

-No parecía que apestara ahora que TÚ me besaste. -dice haciendo énfasis en la palabra <<tú.>>

Y sí, todo queda claro. Ese grandioso beso solo fue por su ego.

ahora la que no sabe que decir soy yo.

Anna: 1         Louis: 1

¡Me siento tonta! ¡Rídicula!
¿¡Cómo fui a dejarme llevar por mis tontos impulsos!?
¿¡Cómo fui capaz de rebajarme a besarlo!? ¡A dejarme tocar, manosear de un imbécil como este! ¿¡Cómo fui tan ilusa!? ¡Al pensar que le gustaba al tonto este! Jamás me pasó algo así con un hombre, no he sido una mujer fácil. Crítico a las que lo son, y justo ahora por dejarme llevar por el momento me comporte como una más.
Siento un horrible nudo en mi garganta, no se que hacer. ¿Qué hago?

-Debo irme. -digo sin saber que más decir, que más hacer. Y empiezo a  retomar mi camino hacia la parada de autobuses.

-Espera. ¿a dónde vas? -escucho que habla Luois.

-¡Qué te importa! -le digo apresurando mi paso, mi cabello se pega a mis mejillas y lo retiro con fuerza sintiendo como mis ojos se cristalizan. ¿pero qué carajo me pasa? ¿a caso voy a llorar por este idiota?

-Sí me importa, Anna. -dice él con voz más calmada.

¿Le importa? ¿Le importo?
¡pues qué se vaya a la mierda!

-¡Dejame en paz! -grito.

Ahora me encuentro corriendo, lagrimas bajan por mis mejillas, no sé que me pasa. Solo sé que debo huir de su lado. sorbo por la nariz, ya casi estoy llegando a la carretera, miro hacia atras para ver si dejó de perseguirme pero no, ahí viene atras.. ¡Me va alcanzar! ¡Dios!

-Cuidado Annaaaaaaaa. -grita Louis con voz desesperada.

¿Cuidado de qué?

Vuelvo mi vista al frente y veo una luz que me enceguece. Trato de parar pero ya es tarde, escucho un fuerte pitido y de pronto me encuentro frente a un auto. Uno muy grande que me impacta y me manda directo al suelo, causandome un fuerte golpe en la cabeza que me hace perder el sentido.

-¡Annaaaaaaaaa! -es el último grito desgarrador masculino que alcanzo a escuchar.




_____________

Pd: los capítulos están sin corregir por si ven alguna falta ortográfica. Besos ♥

D E S T I N OWhere stories live. Discover now