Adiós, mi amor. [KookMin]

Estaba equivocado.

“¿Dije algo malo?, ¿He mentido?, Estoy volviéndome loco, ¿A dónde voy?”

[Jimin]

¿Cómo se supone que voy a vivir aquí si no sé inglés? Con suerte logre tener mi apartamento, y gracias al traductor de google. Tampoco asistí a mi graduación por venir acá, tuve que pedir que mandaran todos mis papeles personales por correo. Me perdí de algo que seria tal vez lo mejor de mi vida.

Sinceramente extraño mucho a todos... Y sí, también lo extraño a él, pero en especial a mi madre, puede que casi nunca iba a verla después de mudarme, pero me mantenía en contacto siempre que podía, y ahora ya no es lo mismo, la llamo, pero esta tan lejos, y además mis amigos también lo están. Me estoy arrepintiendo de haberme ido, Me hubiera quedado, me siento tan solo ahora...

Mientras pensaba en todo eso, estaba torturándome de a poco haciéndome sentir como una basura; mi cuerpo actuó por si solo y me llevo directo a la cama, me acosté y abrace una almohada, era una noche tranquila... Hermosa, llovía y hacia un poco de frío, perfecto para pasar la mayor parte de la noche y del día siguiente en cama pensando en la boda que arruino mis sentimientos y mi autoestima... aunque mañana en la tarde iré a buscar trabajo, por los momentos tratare de dormir, necesito mucha fuerza, tanto física como emocional.

***

—¡Haz tu trabajo, Park Jimin! No es momento de hacer el tonto, ¿Quieres tu paga o no?

Encontrar a este hombre, y este trabajo no fue una de las mejores cosas que he hecho... de nuevo, soy tan malo con las decisiones, siempre terminan mal de alguna manera u otra. Ya estoy harto, no lo soporto, y apenas es el cuarto día de trabajo, encima de todo este hombre sabe hablar coreano, así que cada vez que puede se burla de mi por solo saber inglés básico, y no me va a pagar hasta que lo aprenda por completo; por esa razón hace poco me puse en contacto con Nam, esta semana es la novena vez que le llamo, le explique la razón por la que verdaderamente llamaba y le pedí el favor de que fuera mi profesor de inglés, así tal cual, sin rodeos. Él aceptó pero a cambio debo mandarle de vez en cuando figuras de colección del tonto león que ama con mi sueldo, no sé donde voy a conseguirlas.

—Ya escuche... No me grites, loco...

—¿Qué dijiste, acaso quieres problemas de nuevo?

—¡Deja que limpie tranquilo!, Yo solo vine aquí para tener un buen trabajo, tú me prometiste buena paga y no lo estas haciendo, me estoy esforzado para aprender inglés y obtener mi ascenso, así que por favor, si no es molestia, quiero trabajar.

Realmente me estaba desesperando estar aquí, quizás me consiga otro trabajo, no me gusta estar aquí lavando y limpiando en la cocina de un restaurante, queda sumamente sucia, tardo mucho para que esté todo reluciente y yo justo ahora no tengo la suficiente paciencia para hacerlo, mucho menos estando alado de este baboso...

—¿Ahora quieres decir que trabajas?.—Comenzo a reír.—Por favor, ¿Qué podría hacer un vago como tú?

—Parecias buena persona cuando te conocí.

—Tú mismo lo dijiste "Parecía", fui amable porque en serio necesitaba a alguien que limpiara y tú fuiste lo mejor que encontré, yo no puedo limpiar, ser chef es más difícil que un pinche o... Lo que sea que seas.

—Callate ya, me largo de aquí. Arreglatelas como puedas.—Suspire soltando la escoba y rodando los ojos, me quite el mandil de mi cintura lanzándolo al lava manos, tome mi mochila, me la colgué y me dirigí a la salida hasta que él me tomo fuertemente de la muñeca, apretando.

—¡Sueltame! ¡Si no me sueltas te demandare!

Como era de esperarse, solamente se rió.

—Que gracioso eres... ¿Qué tienes aquí? Parece caro...—Susurro y sin dar previo aviso me quito el brazalete, jure que nunca me lo iba a quitar de nuevo.

—¡Damelo! ¡Son cosas mías que no debes tocar!—En serio que aquel hombre me sacaba de quicio, no es la primera vez que hace ese tipo de cosas, nadie puede detenerlo, soy el único que trabaja aquí de noche con él.

—Pff... Que ridículo eres, solo quiero verlo.—Efectivamente eso hizo, comenzó a verlo detalladamente, no tenia idea de que estaba pasando por su mente.—Ni siquiera es de plata, ¿Qué clase de cosa es esta?.—Susurro.

—Son cosas personales, no debes saber nada respecto a eso, ¿Sí? Dámelo, es una orden.

Cuando escucho la palabra "Orden" levantó una ceja y sonrió de manera maliciosa. Se dio la vuelta con mi brazalete en mano, pero luego lo guardo en la bolsa de su pantalón, se dirigió al lugar donde estaban los trastes limpios y tomo una licuadora, la conecto y con solo tres movimientos metió el brazalete allí y la encendió. No pude reaccionar a tiempo.

—¡Lay!.—¿¡Cómo se atrevía!?.—¡Mi brazalete! ¡Apaga la maldita licuadora!.—Me acerque de manera "Peligrosa" a él para darle una cachetada pero me fue imposible, él solo estaba riendo. Al ver que no podía hacer nada en contra de él, lo deje de lado y desconecte la licuadora... Se habia roto, mi brazalete estaba roto...

—¡Eres un idiota!.—El nombre estaba todo rayado y no se podía distinguir.—¡Jodete, no volveré a este lugar!

—Como digas, siempre regresan... ¡Además necesitas dinero!

Tome todas las piezas de mi pequeño tesoro y lo guarde en la bolsa de mi pantalón con cuidado, salí corriendo de ese lugar, molesto, triste y demacrado, estos días en serio que están siendo una completa mierda... Entre tanto papeleo para obtener mi ciudadanía, buscar trabajo, una buena escuela, mandar dinero a mamá, la renta... Yo, no puedo con tanto, quiero regresar pero ya no puedo. No quiero volver a hacer los mismos errores que antes.

Tenia frío y no tenia suéter, el cielo esta nublado... cuando comenzó a llover saque el paraguas de mi mochila y lo abrí tapándome de las frías gotas que del cielo desprendían, parecía triste igual...

Llegando a "casa" lo primero que hice fue quitarme toda la ropa mojada, tirarla al suelo y meterme al baño, debia bañarme para no enfermar, no tengo para gastar en medicinas ahora. Una vez hecho eso tome mi pantalón, saque los piezas del brazalete y las deje en la mesita delante del sofá, donde ahora yo estaba. Parecía no tener arreglo, ¿Acaso es una señal o algo parecido?

No me di por vencido, estuve intentando arreglarlo durante casi 4 horas, sin bromear, diciendo de vez en cuando "No puedes romperte", pero no, nada... No podía. Me dirigí a la cocina y tome una de esas bolsitas para los sándwich, regrese y metí todo ahí, la cerré y deje en el mismo lugar, estaba muy cansado así que me sente para poder descansar los ojos, aunque no pude.

Mi mirada se dirigió a mi habitación cuando un tono bastante conocido comenzó, me levante del sofá con calma y camine a este encendiendo la luz, me quede estático al leer "JungKook esta llamándote" Creí que lo habia bloquedo, son las 5 de la mañana, ¿Quién llama a esta hora?, otro loco...
Tome el celular para presionar el botón de "Colgar" pero, mi dedo no respondió a lo que le estaba ordenado y este acepto la llamada. 

—"Hola"